lunes, 29 de febrero de 2016

GCE: La interacción entre Hitler y Franco

"La sombra de Hitler", una visión novedosa de la Guerra Civil Española
Por: Matías Falco
Pierpaolo Barbieri, investigador argentino egresado de Harvard, explicó a Infobae por qué y cómo la Alemania nazi intervino en España. El papel del llamado "dictador económico" Hjalmar Schacht




Pierpaolo Barbieri, el argentino que investigó la relación entre Hitler y Franco.Pierpaolo Barbieri, el argentino que investigó la relación entre Hitler y Franco.Crédito: Veronica Jacobson
En su nuevo libro, La sombra de Hitler (Taurus), el joven historiador argentino Pierpaolo Barbieri se propone ofrece una nueva visión sobre la Guerra Civil Española y la intervención de la Alemania nazi. Es que para Barbieri, quien desarrolló una vasta investigación en seis países, no fueron ideológicos los motivos que llevaron a Hitler a realizar esta jugada, sino económicos. En este sentido, como explicará más adelante a Infobae, para comprender este proyecto y sus consecuencias es fundamental la figura de Hjalmar Schacht, responsable de la economía del Tercer Reich.

—¿Cuál es la tesis del libro?
—El libro trata de explicar la Guerra Civil Española de una manera novedosa. En vez de considerarlo historia nacional, lo que yo trato de hacer es tratar de ver el conflicto con un lente europeo y tratar de entender las relaciones económicas que llevaron a la intervención alemana e italiana en el conflicto, que fue lo que determinó el curso de la Guerra.

—¿En qué consistió la investigación?
—Empecé esto en la Universidad de Harvard. Fue mi tesis de grado, después fue mi tesis de posgrado y también hice investigación en la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, lo que conllevó a hacer seguir en España, Italia, Alemania, Francia, Inglaterra y en los Estados Unidos. Estuve en distintos archivos, tratando de ver los documentos originales para ver si esta idea novedosa se podía probar con los documentos. En ese sentido, es un libro de Historia que trata de apuntar a un público general, pero también, para el que está interesado, tiene citas al final dando fuentes específicas de los distintos argumentos.

—¿Se encontró con información que superara la hipótesis inicial?
—Sí, por supuesto. Crear un libro es como pintar un cuadro: las cosas van cambiando a medida que uno avanza. Creo que los debates que no me esperaba encontrar fueron aquellos que hubo en la Alemania nazi. Algo que yo no esperaba es lo que yo llamo la Guerra Civil dentro del gabinete alemán, entre quienes proponían el imperio informal, como el que se trata de construir en España, y los que querían un imperio formal basado en el control pseudo racial de los pueblos. Como a todos, a mi me habían contado la historia del nazismo como una línea recta que iba desde 1933 a 1945, y eso era algo que no te explicaba estos debates económicos dentro del régimen.

—Es decir que es un punto de vista nuevo.
—Trato de presentar a estos actores de una manera nueva, y especialmente en lo que hace al conflicto español, porque era un conflicto en el que los nazis invirtieron muchos recursos y fue, si se quiere, la primera intervención extranjera del nazismo.

—Un poco la gran pregunta del libro es por qué Alemania intervino en la Guerra Civil Española, ¿podría explicar brevemente su visión?
—En principio es un tema estratégico, pero muy rápidamente y por la duración de la Guerra se convierte en un proyecto económico. Los españoles nacionalistas, el bando de Francisco Franco, necesitan de los alemanes porque necesitan recursos bélicos que no tienen. Necesitan crédito, pero ¿a cambio de qué? Por muchos años, nos contaron una historia que dice que intervinieron España por temas ideológicos. Lo que yo trato de proponer es que lo hicieron a cambio de un proceso de penetración económica donde las industrias alemanas se hacían de las españolas y proponían que esto continuara en el tiempo mucho más allá de la guerra civil.

—Por eso fue clave la figura de Hjalmar Schacht.
—Exactamente. Schacht era como la unión del poder monetario y fiscal en una sola persona. Desde ese lugar, el que llamaban "dictador económico" de la Alemania nazi construía una política en la que apuntaba al control informal de los territorios. Es decir, no conquistarlos sino ejercer la hegemonía económica. Y España fue, de acuerdo con mi investigación, el lugar en el que mejor funcionó el proyecto.

—¿Cómo fue la relación entre ambos países durante la Segunda Guerra Mundial?
—Técnicamente, Alemania nunca pidió que España entrara a la Guerra y se mantuvo estrictamente neutral, pero en términos económicos no existía la neutralidad, sino que se comerciaba mucho y eso fue lo que realmente produjo el quiebre de Franco con las democracias. Es muy interesante, porque la única reunión que existió entre Hitler y Franco fue un desastre: Hitler famosamente dijo que prefería ir al dentista antes que verlo a Franco en alguna otra oportunidad. Nunca se llegó a una alianza formal, lo que sí quedaba era este tema económico donde el 75 por ciento de todas las exportaciones de España iban al Eje, y eso era una dislocación que se había creado durante la Guerra. En la España de la pre Guerra, la mayoría del flujo comercial externo iba al Reino Unido o a Francia, y eso en el transcurso de la guerra civil se redirecciona a Alemania.

—Tras la derrota del Eje, ¿Franco se intentó desligar de la Alemania nazi?
—Exactamente. Franco no solamente entregó sus víctimas sino que también entregó las deudas que tenía con Mussolini o con Hitler, que eran muy distintas: Hitler tenía un proyecto de penetración económica que los italianos nunca tuvieron. En ese contexto, después de la Guerra Franco se intentó desligar de sus espónsores fascistas, porque ellos habían perdido y él no, y él planea quedarse en el poder. Entonces tiene que crear una ideología porque no la tiene: al principio Franco es una persona desprovista de ideología, entonces pivotea y trata de adaptar su relato ideológico para tener una perspectiva no fascista.

—¿Cómo lo construyó?
—Lo hace desde el conservadurismo, el autoritarismo político y de un alineamiento con los católicos conservadores. Crea lo que se llama un nacionalcatolicismo, que luego sobrevive hasta su muerte. Franco logró estar en el poder 30 años en el medio de una Europa cada vez más integrada. Logra una alianza con los Estados Unidos, basada en la idea del anticomunismo, pero lo que no logra es que Europa lo acepte. Todos los que habían luchado contra él o los que se acordaban de la guerra civil española sabían que había ganado un Franco que no fue exactamente respetuoso de los derechos humanos con los que perdieron.


Perón junto a Francisco Franco y Héctor. J. Cámpora.

—¿Cómo era la relación entre Perón y Franco?
—Cuando Perón va al exilio, va a la España de Franco, pero es muy importante recordar que la política fascista en la economía española de la guerra lleva a una gran hambruna, porque eran políticas muy poco eficientes. En ese contexto, Argentina va a la ayuda de Franco y hay contactos políticos y económicos donde ayuda con granos, aparte de con apoyo político, a que Franco no esté tan aislado.

—¿Ve puntos en común entre ambos líderes?
—No en el sentido de construcción de liderazgo, porque Perón, a pesar de que venía de una junta, fue elegido popularmente y Franco nunca participó de una elección. Franco tenía un perfil monárquico y muy atado a la Iglesia, que era distinto en el caso de Perón. Lo que sí se ve es que los dos fueron inspirados en su juventud por el fascismo de Mussolini y la estrategia económica corporatista, donde el Estado actúa como mediador entre los sindicatos y el capital. Ambos eran anticomunistas y venían de una tercera vía, que no era capitalista ni comunista.

—La Ley de Memoria Histórica continúa siendo un tema de debate en España, ¿cuál es su posición?
—Yo creo que en el proceso de la democratización de España se sacrifica saber todos los crímenes y ahondar en el pasado por la estabilidad política. Y así se crea una democracia afianzada, integrada a Europa y exitosa económicamente. España lo ha construido desde ese país poco desarrollado que dejó Franco en 1975. En ese contexto, creo que se sacrificó mucho en el momento de hacer la transición y luego, cuando está afianzado el proyecto democráctico, se ha vuelto a ver cosas que había que sacar de las fosas comunes. Y no solamente me refiero a los cuerpos, sino a dependencias políticas que se tenían y no se pueden ocultar para siempre. Franco cometió muchísimos crímenes de lesa humanidad, así como también hubo crímenes del otro lado de la guerra, porque fue un enfrentamiento fratricida y sin cuartel. En ese contexto, es importante para el futuro de los pueblos entender el pasado. Yo apoyo la iniciativa de entender cuales fueron los crímenes, juzgar a los responsables y tener una memoria que sea respetuosa con el pasado y las víctimas.

—El gobierno de Mariano Rajoy estuvo muchas veces en la mira de la oposición por la supuesta mala aplicación de la ley durante su administración, ¿qué análisis hace?
—Hay un debate. No se derogó la Ley ni se trató de eliminarla. Todavía está muy vivo el tema, por eso la perspectiva depende del partido al que uno le pregunte. Lo que sí es importante que en España se ha dejado a los jueces actuar sin problemas políticos. En la época de Baltasar Garzón creo que los hubo más que ahora.


"Franco debería estar en los museos, pero quizás no en el centro de la ciudad", opina Barbieri.
Veronica Jacobson

—Es un tema que todavía genera mucha confrontación.
—Sí, en ese sentido el libro propone una mirada mucho menos española. Si no, creo que caemos muy fácilmente en las divisiones ideológicas y considero que es muy interesante pensarlo desde lo que era este proyecto de imperialismo alemán para la integración de Europa. Yo lo que siempre digo es que hoy tenemos instituciones que muchos critican, que son proclives a la crisis y han sufrido la crisis de deuda soberana, pero sin embargo son instituciones mucho más plurales y democráticas que las que hubieran hecho los nazis. El proyecto de integración que quería Schacht y sus asociados no era para nada democrático, iba a ser manejado desde Berlín sin la posibilidad de que nadie más pudiera opinar, mientras que desde la Unión Europea se ha construido un proyecto democrático y respetuoso de los derechos humanos.

—¿Considera que la Ley de Amnistía va a seguir vigente?
—Creo que a la larga la ley en sí va a seguir vigente y sin embargo hay ciertos crímenes que igual se van a investigar. La gran ironía es que la ley de Amnistía fue originalmente pensada para proteger a las víctimas del franquismo y no a los líderes. Sin embargo, después fue usada para promover a los otros. Yo apoyo las iniciativas judiciales para tratar de entender cómo murieron las víctimas. Creo que la Historia no está para estar enterrada, si no no hubiera escrito el libro. Pero es importante saber que en 1975, cuando la democracia en España no existía y muchos la creían imposible, era necesaria una ley que permitiera que los que habían sido ministros de Franco pudieran meterse en una elección y crear un partido, y eso ha llevado a una democracia muy exitosa.

—¿Cómo se consolidó?
—Hubo un bipartidismo donde estaba el PSOE, que eran socialistas, y el PP, fundado por un ministro franquista que hacía una propuesta conservadora pero democrática. Rajoy viene de ese partido, y por eso es que hay mucha gente que critica iniciativas como la Ley de Memoria Histórica, pero yo no creo que Francisco Franco se merezca tener estatuas de él en el medio de Madrid.

—Era la próxima pregunta... Hay quienes sostienen que la iniciativa propone eliminar una parte de la Historia, ¿cuál es su opinión?
—Yo no apoyo eso, creo que para los que fueron sus víctimas es un recordatorio demasiado cruento del pasado. Tampoco quiere decir que vayamos a eliminar todo, porque no se puede borrar la Historia, pero sí ciertas figuras y, dados los crímenes del franquismo, es difícil que siga en ese estado de centralidad como si fuera Don Quijote. Creo que Franco debería estar en los museos, pero quizás no en el centro de la ciudad en una efigie cual Napoleón Bonaparte. Los franceses pueden amar el proyecto político de Napoleón, pero es muy difícil divorciar los crímenes del franquismo con sus políticas, porque Franco no creó un sistema más plural y democrático, sino que fue a un lugar aislado, autoritario y desprovisto de derechos.

Infobae

domingo, 28 de febrero de 2016

Guerra de Vietnam: El sitio de Khe Sahn

Sitio de Khe Sanh
Parte de guerra de Vietnam


Wikipedia 

Traducción Esteban McLaren

Abastecimiento de Khe Sanh por aire

Fecha 21 de enero a 8 de abril de 1968
Lugar Entre la Zona Desmilitarizada y la frontera con Laos
Resultado Empate - Estados Unidos no perdió la posición, pero meses después terminó abandonándola
Beligerantes
Cuerpo de Marines de Estados Unidos vs Dos divisiones del EVN
y compañías del Vietcong
Comandantes
William Westmoreland David E. Lownds vs Vo Nguyen Giap
Fuerzas en combate
30.000 (USA) 20.000 (NV)
Bajas
205 muertos 443 heridos 2 desaparecidos (USA) Más de 9.000 (NV)

El Sitio de Hhe Sanh fue una de las batallas más largas y sangrientas de la guerra de Vietnam tanto por la cantidad de tropas desplazadas a ellas como por la de suministros y equipos que se movilizaron hasta la posición para que resistiera los ataques.

La supuesta importancia de la base

La base aérea de Khe Sanh se consideraba fundamental para poder atacar a las unidades del EVN que se infiltraban por la Ruta Ho Chi Minh y proteger la retaguardia de la Zona Desmilitarizada.
Se hallaba enclavada en una meseta al final, o al principio según el punto de referencia, de una valle que pasaba por ser uno de los más bellos del sureste asiático, rodeado de colinas poblada del densa selva donde la niebla flotaba con facilidad. Esta orografía no permitía la construcción de muchas carreteras y las pocas que había eran fácilmente controlables desde la meseta central.
Junto con Lang Vei eran las dos cuñas que podía detener la entrada de armas, suministros y hombres a esa parte de Vietnam del Sur.
Por sus especiales características el general William Westmoreland la consideró de vital importancia desde muy pronto, razón por la cual, fue preparada una pista de aterrizaje de varios kilómetros, un emplazamiento para varias piezas de artillería de 155 mm y otro para morteros de 107 mm; además estaba dentro del radio de acción de los obuses de 175 mm. situados más hacia el interior.
En cuestión de medios aéreos los norteamericanos dotaron a Khe Sanh de numerosos hangares para helicópteros, la gran pista citada y aviones de distintos tonelajes. También se la equipó con un polvorín para varias toneladas de munición y depósitos de combustible.

Los preparativos 

La base de Khe Sanh cerraba el valle y dominaba las comunicaciones con la frontera de Laos.

A mediados de 1967 el Politburó de Vietnam del Norte preparaba la Ofensiva del Tet y como maniobra de distracción o apoyo a la misma, no se sabe muy bien, decidieron intentar la toma de la base.
Desde agosto hasta enero Vo Nguyen Giap comenzó a acumular tropas y pertrechos en los alrededores de la posición estadounidenses enviados por la Ruta Ho Chi Minh. Llegando a estacionar dos divisiones, además de los efectivos que el Viet Cong aportó a la operación, más varias decenas de piezas de artillería y carros de combate. En principio la situación no era igual a la vivida en 1954 porque ahora los vietnamitas están en inferioridad de efectivos y artillería, cosa que sabían; restando argumentos a los que opinan que el objetivo de Giap era repetir el éxito contra los franceses. Pero tampoco Khe Sanh esta situada en un apartado valle de una apartada provincia como en la década anterior, era una posición más o menos estratégica en una zona de gran importancia para las infiltraciones de Norte, lo que hace pensar que quizá el objetivo del EVN era tomarla (en 1974 se reabrió para contribuir a la Ofensiva de Primavera).
Por su parte Estados Unidos tenía desplazados a la base algo más de una división; pero en el transcurso de la batalla llegarían a ser entre 15.000 y 30.000 hombres, incluyendo el apoyo aéreo (pilotos, mecánicos, controladores...), los refuerzos enviados en la Operación Pegasus y el personal de logística.

La batalla 

El oficial desertor
Poco antes de comenzar los bombardeos apareció un oficial del EVN con una bandera blanca junto a las alambradas del recinto. Los marines lo interrogaron y les advirtió de un ataque a gran escala por algunas de las mejores divisiones del norte con apoyo artillero que terminaría con asaltos en masa. Los oficiales no sabían si tomarlo como un desertor o como un infiltrado para intoxicar la información de que disponía.
Como fue habitual en toda la guerra de Vietnam los servicios de inteligencia no pudieron darles información precisa que confirmara o desmintiera las declaraciones del vietnamita; por lo que decidieron hacerle caso y reformar las defensas.
A las pocas horas comenzó el anunciado bombardeo. Al poco tiempo una serie de grandes explosiones se produjeron en el polvorín al ser alcanzado por una granada enemiga. Más unas 850 toneladas de municiones y explosivos, algunos elevan la cifra a más de 8,000, saltaron por los aires llevándose a varios soldados. En aquel momento los norteamericanos estaban en una situación muy crítica al haber perdido su reserva para operar sus armas.
Pronto la pista fue inutilizada para ser usada por los aviones e incluso por los helicópteros. Ciertamente los recuerdos de lo vivido por los franceses una década antes se hacían evidentes.

Helicópteros Sea Knight abasteciendo la base verticalmente.

Westmoreland dispuesto a reescribir la historia 
Lo sucedido a los franceses en 1954 no debía repetirse. En aquella ocasión las tropas coloniales disponían de muy pocos helicópteros y respecto a los aviones estuvieron siempre escasos de número o tonelaje.1 Para el general Westmoreland y su estado mayor lo sucedido en los años 50 no podía repetirse bajo ningún concepto. Para evitarlo comenzaron los vuelos de todo tipo de aparatos, llevando cargas en lonas colgando de los helicópteros o en palets dentro de las bodegas.
Como en 1954 la pista pronto quedó inutilizada para los aterrizajes; por eso se desarrolló el sistema de extracción por paracaídas (la carga era colocada en palets y estas eran extraídas de la bodega de los aviones por un paracaídas) y se hizo un uso intensivo del aprovisionamiento vertical (por helicópteros).
Se dio orden de tomar todas las colinas que podían cercar la base. Varios batallones salieron para cumplir la misión y los combates fueron muy encarnizadas, pero finalmente las cotas fueron cayendo una tras otra. Fueron necesarios varias acciones muy heterodoxas para conseguir la moral alta. Por ejemplo, se izó la bandera de las barras y estrellas cuando se tomó la cota 881, pese a estar prohibido por no ser territorio estadounidense; pero se toleró por ser necesario para la moral. Al mismo tiempo, se tocaba la himno nacional por las mañanas con los soldados en posición de firmes, pese al peligro que constituían los francotiradores vietnamitas.

El final de Lang Vei 
A unos kilómetros de la la base aérea los boinas verdes tenían su campamento base de Lang Vei. Sabían que podían ser atacados y estuvieron preparándose a y reforzando las defensas. Pero todo resultó inútil.
De madrugada los norvietnamitas atacaron y los carros de combate que habían conseguido mover por la jungla dejaron asombrados a los estadounidenses que podían esperarse cualquier cosa menos armas pesadas. Las Fuerzas Especiales se defendieron valientemente con los pocos cañones sin retroceso de que disponían. Pidieron apoyo artillero y aéreo por radio. Tuvieron varias bajas mientras lograban destruir algunos blindados; pero finalmente toda la posición cayó y el masivo ataque de aviación, artillería y helicópteros artillados no llegó.
Tras la caída de Lang Vei Khe Sanh estaba prácticamente aislado y sus defensores aguardaban el ataque por tierra. La situación en la base resultaba dantesca. Casi toneladas de excrementos a medio quemar, montañas de desperdicios, hombre durmiendo envueltos en sus ponchos para evitar ser mordidos por las ratas y otros untándose los dedos de mantequilla para ser mordidos, contraer una enfermedad y ser evacuados. Sin embargo siguieron aguantando.
Finalmente el ataque terrestre no se produjo, la posición fue auxiliada y las fuerzas vietnamitas se retiraron. Para los norteamericanos fue una victoria, sin embargo no está claro cuales fueron las razones para este desenlace.
Para fuentes norteamericanas la potencia de fuego y los bombardeos de los B-52 fueron los responsables, pues entre enero y marzo de 1968 se realizaron 2 700 salidas con 110 000 Kg de bombas lanzadas. Una fuerza de tres bombarderos llegaba a la sitiada posición cada 90 minutos arrasando las trincheras, los búnqueres y las posiciones vietnamitas. Una de estas fuerzas presuntamente logró acabar con el 75% de un regimiento vietnamita de 1 800 soldados.2
Otra hipótesis es que el cerco había cumplido su misión de distraccción y no era necesario emplear más hombres y tiempo en ello.


Conclusiones 

El Sitio de Khe Sanh sigue presentando multitud de incógnitas, lo mismo que su operación hermana: la Ofensiva del Tet.3

¿Qué perseguía Giap con el cerco de Khe Sanh?
No existe una respuesta clara para esta pregunta. 

  • Para los medios occidentales, sobre todo estadounidenses, la operación era un claro intento por parte del General de rememorar la gloriosa victoria de Batalla de Dien Bien Phu. Tanto es así que, según rumores no confirmados, veteranos oficiales franceses viajaron a Saigón para asesorar a los estadounidenses. 
  • Análisis posteriores han hecho notar que, de ser así, se hubiera realizado algún ataque contra la posición en algún momento. Cosa que nunca sucedió. Por estos motivos se baraja la hipótesis de que Khe Sanh fuese una maniobra de distracción para tener ocupados a decenas de miles de norteamericanos en un rincón perdido del país en lugar de participar en la Ofensiva que estaba a punto de realizarse. 
  • Por último, hay quien opina que fue el segundo caballo al que apostó el General para lograr, si no una victoria, sí la salida de las tropas extranjeras tras una derrota considerable. Desde esta perspectiva si el ejército de Vietnam del Sur se hubiese colapsado ante la Ofensiva, o si la base hubiese caído el golpe para la población hubiese sido demasiado duro como para seguir apoyando una guerra como aquella.

Dos cosas son ciertas:


    [1] Giap logró tomar la base de las Fuerzas Especiales en Lang Vei y con ella la posibilidad de mantener abierta la Ruta Ho Chi Minh en esa zona, además de destruir todo el trabajo realizado por los boinas verdes con las tribus de las montañas. [2]El alto mando de Estados Unidos tuvo delante de sí la batalla convencional que tanto buscaba (carros de combate, despliegue de soldados...); pero dejó casi abandonados a sus hombres en las montañas para concentrarse en Keh Sanh.

¿Vieron los estadounidenses lo que se pretendía? 
Parece que desde un principio Westmoreland consideró lo de Khe Sanh como una oportunidad de reescribir al historia y así trató de corregir todos los errores cometidos por los franceses:

  • El abastecimiento no podía faltar. Si los aviones no podían aterrizar debían inventarse cuantas técnicas hicieran falta para lograr llevar hasta la base alimentos, combustible y sobre todo municiones. 
  • Las colinas debían quedar bajo su control para evitar el emplazamiento de baterías a contraladera, una de las claves en al derrota francesa. Así se lanzaron varios batallones para tomarlas, incluida la alejada Cota 881. 
  • Los efectivos debían ser reforzados por medios seguros para asegurar un número suficiente de defensores. Para esto se realizó la Operación Pegasus que supuso una humillación para los sitiados. Después de todo, los marines no sólo se habían defendido con valor, sino que habían salido y tomado una por una todas las posiciones que les podían amenazar.

Ciertamente lo consiguió, pero al final la posición quedó totalmente aislada y se consideró que no merecía la pena seguir empleando hombres y recursos en ella. Fue otro golpe a la moral que llegó en uno de los peores momentos de conflicto.

Un ejemplo de resistencia

Pese a su inutilidad la defensa de Khe Sanh pasó a la imaginería popular de Estados Unidos como un ejemplo de resistencia y de heroicidad. Varias películas han presentado esta batalla entre los casos de arrojo.


Bibliografía

1- David Solar, Ocaso Francés en Indochina, nº 62 de La aventura de la Historia, Madrid, Arlanza Ediciones, diciembre de 2003
2- Varios, Guía ilustrada de guerra aérea sobre Vietnam (I) - Tecnología militar, Ediciones Orbys, Barcelona, 1986, ISBN 84-7634-711-1
3- Varios, Nam, Crónica de la guerra de Vietnam, 1988, Editorial Planeta-De Agostini, Barcelona, ISBN 84-396-0755-6.
4- David L. Robb, Operación Hollywood, Editorial Océano, Barcelona, 2006, ISBN 84-494-2696-0




Khe Sanh, hoy

Mapa de Google Earth

Monumento a la Victoria

Restos de la base americana



sábado, 27 de febrero de 2016

Pictorial: El levantamiento de Wuchang (1911)

Raras Fotos del Levantamiento de Wuchang en China




El levantamiento de Wuchang de 10 de octubre de 1911 comenzó la revolución de Xinhai, que llevó al colapso de la dinastía Qing y el establecimiento de la República de China (ROC).

En 1900, la dinastía Qing gobernante creó un ejército modernizado llamado el "Nuevo Ejército". En ese momento, la ciudad de Wuchang, en el río Yangtze en la provincia de Hubei, tuvo la industria militar más moderna. Se comenzó a fabricar armas y otros equipos militares para el nuevo ejército. Las ideas revolucionarias de Sun Yat-sen, ampliamente influido en los oficiales y soldados del Nuevo Ejército en Wuchang, muchos se unieron a las organizaciones revolucionarias.

El levantamiento 
La propia insurrección estalló por accidente. Revolucionarios en la concesión de Rusia de la ciudad habían construidos bombas, y una de las cuales explotó accidentalmente. Esto llevó a la policía investigar, y descubrieron las listas de miembros de la Sociedad Literaria en el Nuevo Ejército. Frente a la detención y la ejecución de algunos, se dio un golpe. Las autoridades locales entraron en pánico y huyeron, y el ejército se hizo cargo de la ciudad en menos de un día. Los revolucionarios enviaron un telegrama a las otras provincias para pedirles que declarar su independencia. En seis semanas, quince provincias se habían separado.

La revuelta fue considerado todavía sólo el último de una serie de motines que se produjeron en el sur de China. Se esperaba ampliamente que se pusiera fin a la misma en seguida pero llegó a tener implicaciones mucho más grande sólo porque la acción retardada de la dinastía Qing frente a la rebelión, lo que permitió asambleas provinciales en muchas provincias del sur de declarar la independencia de la dinastía Qing y declarar lealtad a la rebelión.
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10 de octubre no es el Día Nacional de la República Popular de China, pero también puede haber actividades conmemorativas en la China continental, por lo general se refiere al día como el aniversario del Levantamiento de Wuchang (chino simplificado: 武昌起义纪念日).























viernes, 26 de febrero de 2016

Guerra Antisubversiva: El ataque terrorista del ERP en Azul

Video: así fue el atentado terrorista del ERP en Azul.


Así fue el criminal atentado terrorista del ERP en Azul. Testimonio de Silvia Ibarzábal, Presidente de AFAVITA.


Prensa Republicana

jueves, 25 de febrero de 2016

SGM: Polonia y su colaboración en el Holocausto

Polonia y las sombras del Holocausto

El Gobierno de Varsovia inicia una cruzada contra el historiador Jan T. Gross, que desveló la matanza de judíos en Jedwabne, perpetrada por polacos

Guillermo Altares
Fuente: El País

Judíos de Jedwabne asesinados durante el pogromo de 1941. Getty Images


Jan T. Gross, profesor de la universidad estadounidense de Princeton de origen polaco, desveló en 2001 uno de los últimos secretos de la II Guerra Mundial, y uno de los más oscuros: la matanza el 10 de julio de 1941 de los judíos del pueblo de Jedwabne, en Polonia. Los autores no fueron los nazis, sino sus propios vecinos polacos, que tras someterlos a todo tipo de torturas y vejaciones públicas quemaron vivos a los supervivientes en un pajar.

Aunque 21 perpetradores habían sido juzgados y 11 condenados por un tribunal polaco al final del conflicto, la atrocidad acabó por ser atribuida a las SS y así quedó en la memoria colectiva. El libro de Gross, Vecinos, causó hace 15 años un impacto tremendo en Polonia, un país que este historiador y sociólogo abandonó en 1968. Ahora, el Gobierno polaco, cuyas medidas autoritarias están causando una honda preocupación en la UE, ha lanzado una cruzada contra este investigador.

La Fiscalía polaca está estudiando presentar una demanda contra Gross por un texto publicado en septiembre en el diario alemán Die Welt, titulado "La vergüenza de Europa del Este", en el que reprochaba a los Gobiernos de Polonia, Hungría y Eslovaquia su insolidaridad con los refugiados. La frase por la que el fiscal estudia procesarlo por el delito de "insulto público a la nación" es: "Aunque los polacos están orgullosos con razón de su resistencia ante los nazis, mataron más judíos que los alemanes durante la guerra". El Gobierno califica esta frase de "calumnia y un bofetón a los millones de polacos que perdieron la vida en aquella época".

En el texto, Gross reprocha el profundo antisemitismo de la sociedad polaca, antes, durante y después de la guerra. La oficina del presidente Andrzej Duda anunció esta semana que está estudiando además despojar a Gross de la orden del mérito civil, una medida que ha provocado dos manifiestos públicos de solidaridad por parte de diferentes profesores. Desde la victoria en octubre delpartido ultraconservador Ley y Justicia, numerosos periodistas e intelectuales críticos han sido acorralados en medio de una intensa retórica nacionalista.

"Mis libros sobre las relaciones entre polacos y judíos durante la guerra son el motivo real por el que este régimen populista y nacionalista me está atacando", responde el profesor Gross (Varsovia, 1947) desde Estados Unidos por correo electrónico. "La fiscalía ha iniciado una investigación oficial que puede conducir a mi procesamiento. El Gobierno actual es nacionalista, xenófobo y autoritario y va a imponer su propia agenda con respecto a la enseñanza de la historia polaca". Gross tuvo que abandonar Polonia en 1968, dentro de una persecución de disidentes, de la dictadura comunista, marcadamente antisemita.


El historiador Jan T. Gross, en 2008. Radoslaw Nawrocki ZUMAPRESS.com

Un portavoz de la Presidencia polaca, Marek Magierowski respondió ayer a una pregunta sobre este tema: "El profesor Gross es un personaje muy controvertido. Muchos historiadores polacos de renombre lo llaman 'novelista'. Sus libros están repletos de errores, basados en prejuicios. Gross aborda en sus libros temas muy delicados: matanzas de judíos cometidas por campesinos polacos; antisemitismo polaco después de 1945. Algunos de sus libros y algunas sus declaraciones parecen formar parte de una campaña cuyo objetivo es crear la imagen de una nación ferozmente antisemita. Paradójicamente es la misma que más representantes tiene en la lista de Los Justos entre las Naciones. No es que no haya antisemitas en Polonia. No es que no debamos avergonzarnos de algunos hechos de nuestro pasado. Pero Gross ha cruzado la línea que separa la historiografía de la propaganda".

Una verdad oculta

La publicación de Vecinos provocó un profundo choque en la sociedad polaca y, aunque se han editado más investigaciones sobre el tema e incluso se realizó una película en 2012, El secreto de la aldea, sigue siendo una verdad a la que le cuesta salir a la luz. "El tratamiento de los judíos por parte de los polacos durante la guerra ha sido investigado a fondo desde hace una década. Pero los resultados no han calado en el conocimiento general de la guerra. Los polacos mantienen una profunda ignorancia sobre la mayor tragedia de la II Guerra Mundial, el Holocausto", prosigue Ross.

El gran problema es que Polonia es uno de los países que más sufrió durante aquel conflicto, invadido por la Alemania nazi y por la URSS, totalmente destruido, con cinco millones de muertos —tres de ellos polacos judíos, asesinados en gran parte en los campos de exterminio nazis instalados en la Polonia ocupada—. El Gobierno de Varsovia ha anunciado una ley que penalice la utilización de la expresión "campos de exterminio polacos", porque Polonia no tuvo nada que ver con la organización de estos centros de muerte, de los que sus ciudadanos fueron víctimas.

Cuando se reveló en 2001 lo ocurrido en Jedwabne, un pogromo en el que fueron asesinadas entre 300 y 1.600 personas, el director de Gazeta Wyborcza, Adam Michnik, uno de los más importantes intelectuales polacos, escribió: "Es difícil valorar la dimensión de ese choque. El libro de Gross ha provocado reacciones que pueden ser comparadas con las que motivó el libro de Hannah ArendtEichmann en Jerusalén". El filósofo George Steiner aseguró entonces que "el relato de Gross de las atrocidades durante la guerra ha despertado a una nación que ha escondido sistemáticamente su pasado". En sus investigaciones, Gross también destapó otros pogromos cometidos por ciudadanos polacos.

Narrativa de la guerra

"Es muy difícil para los ciudadanos polacos admitir cualquiera de esas cosas porque durante la guerra la narrativa fue la misma: sólo los nazis cometieron crímenes y los polacos fueron víctimas", ha señalado la periodista Anna Bikont, autora de otro libro sobre Jedwabne, en el que no sólo relata los hechos sino que describe el antisemitismo que persiste en parte de la sociedad polaca y el silencio que sigue planeando sobre la matanza. Su estudio, El crimen y el silencio, fue publicado en polaco en 2005, en francés en 2011 (ganó el Premio del Libro Europeo) y el año pasado en inglés.

En una reseña significativamente titulada "Peor de lo que pensábamos", el escritor británico Julian Barnes aseguró en The New York Review of Books que el trabajo de Bikont "amplia nuestro conocimiento sobre el antisemitismo en Polonia, encabezado por la Iglesia católica y las élites profesionales y el todavía más terrible antisemitismo posterior al conflicto". Según Gross, entre 1.500 y 2.000 judíos fueron asesinados en los años posteriores a la ocupación alemana. "El episodio más trágico fue el pogromo de Kielce, el 4 de julio de 1946, en el que 80 judíos fueron asesinados en un día", explica.

En septiembre 2011, el memorial de Jedwabne dedicado a las víctimas judías apareció marcado con cruces gamadas y con mensajes como: "Eran altamente inflamables". Anna Bikont entrevistó a dos de los perpetradores que fueron condenados. Dice que es lo más duro que ha hecho en su vida profesional: "Fueron completamente cínicos. No mostraron ningún tipo de arrepentimiento".

miércoles, 24 de febrero de 2016

Guerra Antisubversiva: ¿A cuántos hubiese matado Montoneros?

Jorge Lanata: "La dictadura provocó 30.000 muertes; ¿cuántas hubieran provocado los Montoneros?"
El periodista comparó a la organización armada con los Jemeres rojos y opinó que la militancia se usa "para justificar cualquier conducta".


Jorge Lanata: "Cristina quería,
cada mañana, la tapa del Granma
con la vaca lechera campeona".




Jorge Lanata reavivó la polémica sobre la última dictadura cívico-militar y la cifra real de desaparecidos. Además habló del "aprovechamiento" de parte del kirchnerismo de lá historia y de la militancia de los años setenta.

"A medida que pasan los meses y vemos actuar al kirchnerismo residual, su herencia cultural aparece más desnuda", escribió el periodista.

"Persistan o no los ideales del setenta sería bueno preguntarse cuáles fueron o cuáles hubieran sido: la dictadura provocó 30.000 muertes; ¿cuántas hubieran provocado los Montoneros?", planteó.

En su columna en el diario Clarín, intitulada "Sobre la militancia", el cronista comparó a la organización armada peronista con los Jemeres rojos, una guerrilla de izquierda que llegó al poder en Camboya en el año 1975 de la mano del genocida Pol Pot.

"La idea de “juventud maravillosa” tiñe la herencia residual: una generación que se supone de superhombres diezmada por militares extranjeros", continuó el fundador de Página/12. Y sostuvo que ese "mito" está "tan enraizado en la cultura residual K" que "ha llevado a los jóvenes de La Plata, por ejemplo, a pensar que Rodolfo Walsh fue un gran periodista y escritor porque era guerrillero". "Es exactamente al revés: Walsh fue un gran escritor a pesar de ser guerrillero", remató

Lanata sostuvo que "persiste la idea central de negar la realidad evidente, el comportamiento de guetto fanático y la adhesión religiosa al manual político". "Y, en el subtexto, la fórmula final del Hombre Nuevo, una idea bíblica que nunca resolvió la contradicción de hacer nacer al Hombre Nuevo de las manos del Hombre Viejo", agregó.

En cuanto al periodismo, el periodista escribió que "las consecuencias del periodismo militante han sido funestas; el periodismo militante está filosóficamente en contra del periodismo: el periodista tiene preguntas y el militante respuestas. El periodista duda y el militante sostiene su fe".

"Cristina quería, cada mañana, la tapa del Granma con la vaca lechera campeona", completó, en referencia al diario oficialista de Cuba.

"La militancia no es una capacidad, sino una elección, y como tal debe ser respetada; hoy se utiliza para justificar cualquier conducta", concluyó Lanata.

martes, 23 de febrero de 2016

Historia naval: El hundimiento del CSS Hunley

El hundimiento del CSS Hunley


por Robert Derencin
Traducción Iñaki Etchegaray y Esteban McLaren

Introducción
La guerra civil americana duró desde el 14 de abril de 1861 al 26 de abril de 1865. Los estados de la Unión fueron 22 estados y la Confederación consistió en 11 estados. La guerra tuvo mayor parte de combates en tierra. A pesar de ello, la guerra naval fue también significativa para el resultado final de la guerra civil. El 17 de abril 1861 la Confederación aprobó la piratería. Dos días después, el 19 de abril 1861 la Unión declaró el bloqueo del Confederación. La guerra naval fue manejada en áreas costeras, en los ríos y contra el tráfico marítimo del enemigo, por medio de bloqueo y por guerra de corsarios. Era una guerra sin batallas navales verdaderas. La Confederación manejó la guerra de cruceros excelentemente, pero sin efecto verdadero en el resultado final de la guerra civil. Los estados la Unión (norteños) tenían predominio de naves y de otro material de la guerra y su bloqueo de la Confederación, i.e. la costa meridional tenía mucho más efecto en el resultado final de la guerra civil.

Uno de los puertos meridionales más importantes era Charleston. Charleston estuvo bajo bloqueo desde el 5 de abril de 1863 al 17 de febrero de 1865, cuando la ciudad capituló. Delante de Charleston estaban el fuerte destacamento de fuerzas de la Marina de Guerra de la Unión (USN). Algunos individuos del lado de la Confederación, el mejor conocido de ellos fue Horace L. Hunley, habian inventado y construido el primer submarino exitoso en el mundo, el CSS Hunley.

El 17 de febrero 1864 el CSS Hunley atacó y hundió el USS Huasatonic. Después el CSS Hunley mismo se hundió. La razón de hundirse del CSS Hunley fue desconocida. En este artículo se consiguen algunos situaciones posibles de que qué pudo haber sucedido al CSS Hunley durante esa noche histórica.

Descripción técnica del CSS "Hunley"
El CSS Hunley fue hecho de una caldera de vapor cilíndrica del hierro. La caldera fue profundizada y alargada. Cada extremo del submarino fue afilado. En la tapa del submarino el casco era dos torres sobresalientes, cerca de los extremos del submarino. La torre sobresaliente delantera fue pensada para el capitán submarino y la torre sobresaliente en popa fue pensada para el primer oficial del submarino. En ambas torres sobresaliente se colocó varios puertos pequeños de la visión (portas). Las torres sobresalientes también fueron pensadas para pasar al equipo dentro y fuera del submarino. En la tapa del submarino el casco (entre las torres salientes) era caja también colocada del tubo respirador. La caja del tubo respirador fue pensada para permitir la entrada del aire fresco cuando el submarino fuese sumergido. La caja del tubo respirador consistió en los tubos movibles del tubo respirador de cuatro pies. Los tubos del tubo respirador fueron ajustados con las llaves de paso. Las llaves de paso hicieron la penetración imposible del agua en el submarino cuando el submarino fuese sumergido debajo de los cuatro pies. Los pesos adicionales del hierro fueron empernados en el superficie inferior del casco del submarino. Si el submarino necesitaba flotabilidad adicional, en una situación de la emergencia, el equipo podía sacar los pesos del hierro desatornillando los jefes de los pernos, desde adentro del submarino. En ese caso el submarino podía levantarse a la superficie más fácilmente.


El CSS Hunley era accionado manualmente. El equipo (ocho hombres) daba vuelta a un cigüeñal, que fue conectado con el propulsor del submarino. La velocidad máxima de Hunley, cuando el equipo trabajaba su mejor forma, era cerca de 3 nudos.

Había dos tanques de lastre dentro del submarino. Los tanques de lastre fueron colocados cerca del extremo del submarino; i.e. había tanque de lastre delantero y tanque de lastre en popa. Ambos tanques fueron abiertos en sus tapas. Cada tanque fue equipado de un martillo (válvula) y de una bomba de mano y se podría inundar con agua abriendo su válvula (martillo). También era posible expulsar el agua del tanque por medio de su bomba de mano. Cuando el capitán submarino pidió sumergirse, los tanques fueron inundados. Cuando el capitán pidió la emergencia, los tanques eran secos bombeado.

El submarino tenía dos planos de la zambullida, colocados en cada lado del submarino, más cercano al arco submarino. Una barra horizontal conectó los planos de la zambullida. Moviendo una palanca dentro del submarino era posible ajustar la posición de los planos de la zambullida y en esa manera era posible cambiar la posición subacuática y la profundidad del submarino.

El CSS Hunley tenía un torpedo botalón montado del mástil. El plan era pegar el torpedo en el casco de una nave enemiga. Debido a más fácilmente pegar, en el extremo del torpedo estaba una lengüeta. Después de pegar, el submarino invertiría su curso, su parte posterior lejos del blanco y el torpedo sería separado del mástil (i.e. del submarino). Después de que el submarino alcanzara una distancia de seguridad de la nave enemiga (y del torpedo) el torpedo sería detonado por una línea que fue conectada entre el torpedo y el submarino.

Cerca del tanque de lastre delantero (el lugar de trabajo del capitán submarino) fueron situados una rueda de manejo, compás, galga de la profundidad (galga de mercurio, usada para demostrar la profundidad del submarino) y una vela. La vela fue utilizada para asegurar la luz en la cabina del submarino. También, la vela indicaba la condición del suministro de aire.

Las tripulaciones del submarino y las pruebas
El CSS Hunley fue diseñado para un equipo de nueve hombres. La posición del capitán de submarinos estaba cerca de los submarinos remite el tanque. El capitán era el comandante. Él observaba la situación alrededor del submarino a través de la torre sobresaliente delantera, navegando, dirigiendo el submarino, dirigiendo con el tanque de lastre delantero (martillo de mar y bomba de mano). El capitán manejaba los planos de zambullida (por la palanca dentro del submarino). El primer oficial del submarino estaba en segundo lugar en comando. Su posición estaba cerca del tanque de lastre en popa. Como el capitán, el primer oficial observaba la situación alrededor del submarino a través de la torre conning en popa. También, el primer oficial dirigía con el tanque de lastre en popa (martillo de mar y bomba de mano). Cuando era necesario el primer oficial ayudaba al equipo submarino a dar vuelta al propulsor operado manualmente. Había también siete hombres previstos para dar vuelta al propulsor operado manualmente.

Debido a lo mencionado arriba, está claro que la posición del capitán submarino era vital. No sólo porque el capitán era responsable de ordenar sino también porque el capitán manejaba muchos dispositivos e instrumentos (el compás, zambullida acepilló la palanca, martillo de mar y bomba de mano delantera, rueda de manejo, vela, y galga de mercurio). Hubo muchas pruebas tripulaciones hechas por el CSS Hunley. Pero, durante dos que las prueba de conducción el submarino se hundió, ambas veces debido a los errores personales (de los capitanes).

El primer hundimiento del CSS Hunley sucedió el 29 de agosto de 1863, durante una prueba de tripulaciones en el puerto de Charleston. El equipo consistió en nueve miembros de la Marina de Guerra de la Confederación. El comandante submarino era el teniente Payne de la Marina de Guerra confederada. Cuando el submarino todavía estaba emergido, y las portillas del submarino (bocas) todavía estaban abiertas, el teniente Payne ordenó "Adelante!". Entonces, el teniente Payne "se enredó en la manivela (delantera) y al intentar liberarse él mismo atoró su pie en la palanca que controlaba las aletas (i.e. planos de la zambullida)". Las aletas (planos de la zambullida) fueron presionadas hacia abajo y el CSS Hunley se zambulló. Dado que las portillas (bocas) todavía estaban abiertas el submarino se llenó rápidamente de agua. Cuatro tripulantes tuvieron éxito para dejar el submarino a través de las bocas (incluyendo al teniente Payne). Cinco tripulantes murieron.

El CSS Hunley se hundió debido a error personal de teniente Payne. Los comandantes del ejército y de la Marina de Guerra de la Confederación creyeron que los miembros de la Marina de Guerra de la Confederación eran más incapaces de navegar el CSS Hunley mejor que "aficionados". Pero se olvidaron de que el CSS Hunley era algo totalmente nuevo en la guerra naval, lo inventaron y lo construyeron los mismos "aficionados". Los comandantes del ejército y de la Marina de guerra de la Confederación fueron así en parte responsables de la tragedia.

Después de primer hundimiento del CSS Hunley, los comandantes del ejército de la Confederación y de la Marina de guerra se dieron cuenta que el equipo del Hunley debe hacerse más familiar con las operaciones de la construcción y de funcionamiento del submarino. Debido a eso, Horace L. Hunley fue a Mobile, en lugar en donde el submarino fue construido, la tienda Parks and Lyons, a reclutar al nuevo equipo. Para el submarino nuevo designaron al comandante el teniente George E Dixon del ejército de la Confederación. Dixon, era un soldado joven pero experimentado y valiente.

El 15 de octubre 1863 el CSS Hunley se hundió por segunda vez. Ese dia el teniente Dixon estaba fuera de Charleston y Horace L. Hunley navegó como el comandante. El equipo consistió en ocho hombres, incluyendo Horace L. Hunley. En los primeros momentos de la prueba que conducían el submarino navegó emergido, con los tanques de lastre vacíos. La cabina submarina fue encendida a través de las puertas (i.e. por la luz del día, que pasó a través de las puertas colocadas en las ambas torres conning). Entonces, capitán Hunley decidió sumergir el submarino. Él dio vuelta en parte abajo a los planos de la zambullida y después abrió el martillo delantero del tanque de lastre (debido al lastre adicional necesario del submarino). El submarino se sumergió y en ese momento la cabina estaba en oscuridad total. Debido a eso, el capitán Hunley decidió encender una vela, para asegurarse luz en la cabina. Y, él se olvidó de cerrar el martillo delantero del tanque de lastre (válvula). El tanque de lastre delantero pronto fue inundado por el agua y el agua continuó inundando la cabina del submarino entero. El submarino se desbordó y se hundió muy rápidamente. El equipo intentó expulsar el agua del submarino.

Después de que la recuperación del submarino el martillo en popa fue encontrada cerrada correctamente y el tanque de lastre en popa estaba casi vacío. El martillo del tanque de lastre delantero estaba de par en par abierto, y la llave del martillo no estaba en el enchufe sin en el piso del del submarino. El Capitán Hunley intentó sin éxito expulsar el agua usando la bomba de mano delantera.

El equipo intentó lanzar el lastre de la quilla del hierro pero no dio vuelta lo suficiente a las llaves. Debido a éso, el lastre de la quilla de hierro seguía unido al submarino. Luego de la recuperación, se encontró que los pernos que sostuvieron el lastre de la quilla del hierro habían sido dados vuelta en parte, pero no bastantes para lanzarlo. El equipo entero de 8 hombres murió.

El hundimiento sucedió como resultado de error personal de capitán Hunley. El Capitán Hunley no era un comandante de submarinos. Pero, en la ausencia de teniente Dixon, él tomó su posición e incurrió en la equivocación fatal. No obstante después de la recuperación del submarino, el teniente Dixon y otros nombraron al submarino "Horace L Hunley" para honrar los méritos de capitán Hunley. Aún más, después de la recuperación del teniente Dixon, éste habló con el ingeniero J H. Tomb de la Marina de guerra de la Confederación y le dijo que lo que sucedió fue que el hundimiento se produjo porque la tripulación se olvidó de cerrar "la válvula". Posiblemente él deseó proteger de ese modo al capitán Hunley.

Después del segundo hundimiento, el CSS Hunley fue recuperado y restaurado. El Teniente Dixon convenció autoridades de que era posible navegarlo y hacer con él un ataque certero. Él reclutó a nuevo equipo (el tercer equipo del CSS el Hunley) e hizo muchas pruebas de tripulación con el submarino. Debido a las experiencias anteriores, el teniente Dixon realizó algunos cambios en su estrategia.

Según el ingeniero JH Tomb de la Marina de guerra confederada la intención original de teniente Dixon era sumergir el submarino e impulsarlo desde abajo. Pero en ese caso el torpedo estaría sobre el submarino y el submarino se podría hundir debido a dos razones. La primera razón podía ser explosión del torpedo. Si el submarino no sería dañado debido a la explosión, el submarino tuvo que ser sumergido, al ángulo (sobre) de 45 grados (arco para arriba, popa abajo). Era muy duro guardar que la posición con las capacidades y ella navegacionales del CSS el Hunley era casi imposible conseguir curso invertido con tal submarino colocado. Debido a las razones mencionadas sobre el submarino fue emergido probablemente durante el ataque contra el USS Huasatonic.

La misión
El Teniente Dixon arregló con el teniente coronel Dantzler (mariscal de la batería) que él demostraría dos señales ligeras azules cuando el submarino estuviese listo para la vuelta a la base después del ataque. El submarino fue a atacar una nave enemiga el 17 de febrero de 1864. Las condiciones atmosféricas eran: despejadas, la noche brillante y el claro de luna, viento moderado del norte y hacia el oeste, mar liso y reflujo de la marea medio. El ataque ocurrió entre aproximadamente 8:45 P.M. y 9:00 P.M.. El submarino fue observado por primera vez cerca de 8:45 P.M., 75 a 100 yardas del USS Huasatonic, por el principal John Crosby, que era el oficial de la cubierta del USS Huasatonic. El objeto desconocido observado en el agua apuntaba a él como una marsopa, pero cuando él notó que el objeto desconocido comenzaba a moverse hacia el USS Huasatonic muy rápido, él dio la alarma. El Teniente F. J. Higginson, el oficial ejecutivo de USS Huasatonic, llegado en la cubierta inmediatamente. Preguntó qué pasaba y entonces notó: "algo que se asemeja a un tablón que se mueve hacia la nave en un índice de 3 a 4 nudos. Después paró y aparecía moverse de lentamente ".

Naturalmente, después de que el CSS Hunley pulsara el torpedo en el USS Huasatonic el submarino invirtió su curso para alcanzar distancia de seguridad y para detonar el torpedo. De acuerdo al Teniente Higginson el torpedo explotó adelante del mastil central, en la linea de la santabarbara. El torpedo explotó a tres minutos luego que el submarino fuese observado en la superficie por primera vez.

CSS Hunley: Un ataque por un submarino semi-sumergido

Al menos unos pocos hombres a bordo del USS Huasatonic abrieron fuego con armas pequeñas al submarino: Entre ellos estaba capitán Charles W. Pickering (Oficial en Jefe), el Teniente Higginson (Oficial Ejecutivo), principal temporario John Crosby (oficial de cubierta) y el marino Charles Craven. Por los testigos el submarino "exhibió dos protuberancias arriba e hizo una ondulación leve en el agua". Las protuberancias eran las torres conning del submarino y el submarino hizo una ondulación leve porque emergió durante el ataque. Alrededor 9:30 P.M. una señal azul ligera fue observada y contestada por el jefe de la batería. La señal fue interpretada como petición del submarino para que una luz los dirija con seguridad nuevamente dentro de puerto.

El marinero Roberto Flemming (de USS Canandaigua) también observó la señal. El Capitán Green de la USN, quién era oficial en jefe del USS Canandaigua, era informado en cerca de 9:20 P.M. sobre el ataque. Los miembros de la tripulación del USS Huasatonic alcanzaron al USS Canandaigua en un bote salvavidas y después les informaron sobre el ataque. Dijeron que el ataque fue hecho por el "artefacto torpedo rebelde". El USS Canandaigua alcanzó al lugar de hundirse del USS Huasatonic en 9:35 P.M..

El USS Huasatonic se hundió. Dos oficiales y tres hombres fallecieron pero el resto de su equipo fue rescatado.

Dibujo del USS Huasatonic. Un dibujo de la guerra fue construido en 1861 y tenia 207 pies de largo y llevaba una tripulación de 160.

El CSS Hunley nunca volvió a la base.

El submarino se hundió con todos sus tripulantes. No se sabe para seguro porqué el submarino se hundió. En el capítulo siguiente será intentado explicar algunas posibilidades qué sucedió al submarino después del ataque.


Posibles escenarios 
Ha habido muchas teorías sobre por qué el CSS Hunley hundió. De acuerdo con las teorías el CSS Hunley se hundió por el resultado de la explosión del torpedo, o por hundimiento del USS Huasatonic, o como consecuencia de los disparos de defensa del Huasatonic USS (por armas ligeras). La última teoría es que el submarino se hundió por el empeoramiento de las condiciones meteorológicas. El CSS Hunley no se hundió a causa de las teorías anteriores. Después del ataque (después de la defensa de los disparos USS Huasatonic, después de la explosión del torpedo y después que se hundió el USS Huasatonic) la señal azul fue enviado por el submarino. Eso significa que el teniente Dixon cree que el submarino y su tripulación serían capaces de volver a la base de forma segura. Ni los miembros de la tripulación resultaron heridos así ni el submarino tan fuertemente dañada como para hacer volver a la base imposible.

Las cambiantes condiciones meteorológicas - Pocas horas después del ataque de las condiciones meteorológicas fueron empeorando. Eso podría ser una posible razón por la que el submarino se hundió. La tripulación estaba agotada (física y psíquicamente) y en estas condiciones todo es posible. Pero desde que ocurrió horas después del ataque y después de la señal de la luz azul se envió esta posibilidad no es probable.

El teniente Dixon ordenó la señal de luz azul para ser enviado porque estaba seguro de que el submarino estaba listo para un regreso seguro a la base. Por otra parte, el teniente Dixon era un soldado valiente y con experiencia (fue miembro del Ejército Confederado) y sabía que la parte más peligrosa de cualquier acción militar no iba a venir al lugar de un ataque y el ataque en sí, sino el regreso a la base. Por otra parte, el teniente Dixon sabía acerca de los errores personales de los comandantes de los submarinos anteriores (Payne y Hunley) y es improbable que hizo lo posible por no cometer los mismos errores.

El USS Canandaigua llegaron al lugar del hundimiento del USS Huasatonic muy pronto. La llegada del USS Canandaigua se observó desde el CSS Hunley. Debido a que el teniente Dixon, posiblemente, decidió navegar sumergido, completamente sumergido en la profundidad o con snorkel. Si él decidió navegar a una profundidad de snorkel (hasta cuatro pies) que a su vez, el tubo de respiración en la posición de ese tipo para garantizar el flujo de aire fresco dentro del submarino. Los tubos de snorkel estaban equipados con las llaves de paso. En caso de que el submarino sumergido a una profundidad inferior a cuatro pies, las llaves de paso habilitado agua para llegar en el submarino. No había posibilidad de que las llaves de paso fueron dañados durante la explosión del torpedo, o por otra razón, el submarino sumergido bajo un metro y el agua se desbordó la cabina submarino.

Tal vez el teniente Dixon decidió navegar completamente sumergida, en la profundidad por debajo de cuatro pies. Luego ambos tanques se inundaron y el teniente Dixon volvió la palanca de los planos de buceo a la posición inferior (para el buceo). A causa de la explosión y por el hundimiento del USS Huasatonic alrededor del submarino se flotaron muchas piezas de madera, cuerdas y otras cosas de la USS Huasatonic. Tal vez una de paz (o incluso piezas de algunos) de las cosas mencionadas anteriormente llegó a cerca del submarino. En ese caso, era muy posible que el pedazo de madera o cuerda iba entre el casco submarino y el plano de buceo (s).

En el momento en que el teniente Dixon volvió la palanca en posición hacia abajo, la pieza de madera o de cuerda puede permanecer bloqueado en el lugar entre el casco submarino y el plano(s) de buceo. Si ese es el caso de los aviones de buceo no puede ser regresado a su posición horizontal (para retener alcanzado profundidad) o en una posición hacia arriba (para el revestimiento). Es posible que el teniente Dixon rechazó la palanca de planos de la zambullida, el submarino se convirtió para sumergir y cuando quiso girar la palanca en posición horizontal que no era capaz de hacer eso. Era imposible para liberar los planos de buceo desde el interior del submarino, y el submarino sumergido cada vez más profundamente, hasta el fondo. Hay una posibilidad adicional, tal vez la hélice submarinos también fue bloqueado por el pedazo de madera o cuerda.

Cuando el submarino llegó al fondo del mar tanto en los tanques de lastre se vieron inundadas por el agua, pero los tanques y submarinos de la cabina no se desbordó. Es muy posible que la tripulación trató de vaciar los tanques de lastre, pero la arena y el barro alrededor del submarino podría haber hecho imposible. También es muy posible que la tripulación trató de soltar el lastre de la quilla de hierro, pero por alguna razón no pudieron hacerlo. El informe del naufragio del USS Huasatonic (hecho por USN, el 27 de noviembre de 1864) "los restos del naufragio se establecieron en la arena de unos cinco pies, formando un banco de arena y barro alrededor de su cama. El fondo del mar en la zona de 500 metros alrededor de El pecio fue arrastrado. El torpedero (es decir, el Hunley) no fue encontrado. " Aunque naufragio del Hunley CSS no se encontraba en las inmediaciones del naufragio del USS Huasatonic es muy posible que el pecio submarino se asentaron en condiciones similares, es decir, en el barro y la arena.

Conclusión 
El CSS Hunley fue el primer submarino con éxito en la historia naval. características de la construcción Hunley, el equipamiento y la navegación tal vez no eran perfectas pero estaba sin embargo en la parte superior de la tecnología en el momento y no hay duda de que el CSS Hunley fue un submarino real. Era la primera vez que un submarino atacado con éxito una nave enemiga. Esta fue también la primera vez que un submarino se hundió bajo las circunstancias misteriosas, pero no la última. Desde los tiempos de la CSS Hunley estos días muchos submarinos se han hundido en misteriosas circunstancias. No es raro que se hunden los submarinos (o más bien desaparecer) en circunstancias misteriosas. Después de todo, todo sobre los submarinos (tecnología, tácticas, etc) son misteriosos.

El CSS Hunley hizo su función completa y perfectamente. El almirante USN Dahlgren, Comandante de la Escuadrilla del Atlántico Sur bloqueaba en su informe (el 7 de enero de 1864) escribió que los "rebeldes" (es decir, el Ejército y la Armada confederada) tuvo tres submarinos. El almirante Dahlgren de la USN también sabía de los accidentes durante las pruebas (ensayos). En el informe también se describen las tácticas submarino. Los informantes desertores de la Confederación que se escaparon de la sitiada Charleston.

Dos días después del ataque, el 19 de febrero de 1864, el almirante Dahlgren de la USN escribió: "Toda la línea de bloqueo estará infestada con estas defensas baratas, conveniente y formidables, y debemos cuidar todos los puntos. Las medidas para la prevención no puede ser tan obvias. " Dos hechos son, evidentemente, desde arriba mencionado informe (de fecha 19 de febrero 1864). El primer hecho es que la USN estaba perturbado debido a la existencia de los submarinos confederados (que no sabía cómo muchos submarinos existiera). De la frase: "Las medidas para la prevención puede no ser tan obvio." es evidente que el almirante Dahlgren deseaba capturar el submarino de la armada confederada. Ordenó que las medidas no es evidente para la prevención antisubmarina porque quería provocar un segundo ataque.

Desde el CSS Hunley a estos días los países con poderío naval menos eficaz han luchado contra países enemigos (con el poder naval superior) por medio de los submarinos, las fuerzas bajo el agua de comando, rápido superficie de naves de ataque (barcos torpedo y cohetes) y así sucesivamente. El ataque el 17 de febrero de 1864, formulada por el CSS Hunley (y hundimiento del CSS Hunley y el USS Huasatonic) es parte importante de la historia naval. Lamentablemente, el ataque se cobró su precio en vidas humanas, en ambos lados.

UBoat

lunes, 22 de febrero de 2016

Argentina: La apabullante entrada de San Martín en la vida porteña

La insólita entrada de San Martín en la historia argentina
Rolando Hanglin - Infobae


La entrada de San Martín en la historia argentina es insólita. Era en 1808 un destacado militar español "indiano" (nacido en América) de gran valor y experiencia, probado desde los 13 años en batallas marítimas y terrestres, en Francia, Cataluña y África, prisionero a veces y condecorado otras. En mayo de 1811, participa de la batalla de Albuera, en Badajoz, donde fuerzas españolas, portuguesas e inglesas (a las órdenes del general William Beresford, que había sido gobernador de Buenos Aires durante 1806, en la primera invasión inglesa) derrotan a los franceses, comandados por el general Soult. Luego se recomponen las posiciones.

A principio de 1812, San Martín llega a Buenos Aires, es designado al frente del Regimiento de Granaderos a caballo, se casa a los 35 años con Remedios de Escalada (la flor de la burguesía porteña, 15 años) y el 8 de octubre da el primer golpe militar de nuestra historia junto a Carlos María de Alvear, un bisoño oficial de 23 años que había sido el presentador de San Martín en Buenos Aires, donde el de Yapeyú no tenía parientes ni amigos, y también –no es un dato menor- su padrino de bodas en el enlace con Remedios.

¡Todo esto lo hace San Martín durante el primer año de su vida en nuestra ciudad! Como cumpliendo un plan o persiguiendo un objetivo que requería pasos sucesivos... tal vez un programa concebido en Cádiz... o en Londres. La asonada concluye con el reemplazo del Primer Triunvirato por el Segundo, integrado por hombres de la Logia Lautaro.


José de San Martín y Carlos María de Alvear

No es imposible que San Martín haya conocido personalmente a Beresford en Albuera, inquiriendo sobre sus impresiones acerca de Buenos Aires. Beresford, después de la fallida Primera Invasión Inglesa, era partidario de evitar la vía militar y colaborar con la emancipación sudamericana, reservando para Inglaterra un ventajoso papel comercial. De todos modos, en Londres circularon durante años distintos proyectos y borradores estratégicos para arrebatarle a España sus colonias. Existió, por ejemplo, un Plan Vansittart (1796) destinado a atacar Buenos Aires, Valdivia, Valparaíso y la Concepción. Después, una vez afirmados en Chile, los invasores pasarían a Callao y Lima. Bastante similar a lo que finalmente realizaría San Martín, en 1817. No es imposible que don José conociera estos proyectos militares. Como, por otra parte, los españoles y franceses habían colaborado notoriamente con la Independencia Norteamericana, es posible que los ingleses desearan devolverles la atención, en especial porque, después de la Revolución de América del Norte, en 1778, Inglaterra necesitaba un gran territorio capaz de producir buenas materias primas (caucho, cuero, sal, maderas, etc) y un mercado de numerosos puertos y grandes poblaciones, ávido de sus productos manufacturados. Inglaterra fue el país pionero de la revolución industrial.

Otro plan, aún más parecido al de San Martín, formulado por Thomas Maitland y descubierto por Rodolfo Terragno en archivos escoceses, incluía también el cruce de los Andes para el proceso Buenos Aires-Santiago-Callao-Lima. Está claro que el corazón económico del mundo hispanoamericano era Lima, aunque el Imperio Hispano abarcaba lugares tan remotos como Filipinas y Veracruz. Si Inglaterra se apoderaba de las colonias españolas, bien por conquista militar, bien por dominio naval y comercial, cosa que desde 1805 (Trafalgar) era perfectamente posible, habría perdido de cualquier modo los 13 Estados Norteamericanos iniciales, pero ganando a cambio un inmenso mercado de negocios: la América Hispana.

SEPARADAS DE ESPAÑA, LAS COLONIAS DEBÍAN RESOLVER SU INDEPENDENCIA TOTAL, ACUDIR A LA PROTECCIÓN DE UN MONARCA EUROPEO O ACEPTAR EL DOMINIO DE LA NUEVA POTENCIA

Entre 1805 y 1811, toda la región se conmovió con Cabildos Abiertos y revueltas civiles, ya que España caía en manos de los franceses, quedaba separada de sus colonias y éstas debían resolver su independencia total, o acudir a la protección de un monarca europeo, o aceptar el dominio de la nueva potencia emergente: Gran Bretaña. En este contexto, algunos sostienen que San Martín fue seducido por agentes ingleses después de la batalla de Trafalgar (1805) en la que el almirante Nelson destruyó la flota franco-española. Inglaterra quedaba, así, dueña de todos los mares. Con las colonias españolas, francesas y holandesas a disposición de sus temibles barcos de guerra. Según el historiador británico J.C. Metford, San Martín fue reclutado por James MacDuff, cuarto conde de Fife, liberal y masón, que se alistó como voluntario en las guerras peninsulares contra Napoleón, a partir del 2 de mayo de 1808. Sea como fuere, parece haber existido algún contacto entre militares y políticos ingleses, por un lado, y el español San Martín por el otro. Cuando éste pide la baja a los 34 años, alega que debe atender negocios familiares en Lima, pero en realidad viaja a Londres con pasaporte facilitado por Lord MacDuff o Lord Charles Stuart. Una vez allí, se aloja en la Casa de los Diputados de Venezuela, en Grafton Street. Allí traba relación con Luis López Méndez, Andrés Bello, Vicente Rocafuerte y, en fin, el grupo de los latinoamericanos partidarios de la independencia. Entendemos que la casa aún existe y que perteneció a la familia del venezolano Miranda, precursor de todos los libertadores.

El hecho es que, según Oriol Anguera, San Martín desertó de las armas españolas en Cádiz, en 1811. El Libertador ha señalado en sus cartas que los militares españoles nacidos en Indias, al ver que se avecinaba un gran conflicto por la Independencia que estaban declarando sus colonias natales, habían decidido acudir en defensa de sus tierras de origen. En el informe de la Gazeta de Buenos Aires sobre la Fragata Canning, se destacan los antecedentes de Alvear, San Martín, Vera, Zapiola, pero también de Francisco Chilavert (español nativo) y Eduardo Kailitz, tirolés, barón de Holmberg y fundador de una gran familia argentina. No todos eran "indianos": algunos eran, simplemente, militares profesionales que buscaban trabajo en un mundo resquebrajado.

El 9 de marzo de 1812 había atracado en Buenos Aires la fragata inglesa "George Canning", trayendo a bordo un grupo nutrido de oficiales. Entre los más destacados está Carlos María de Alvear y Balbastro, nacido en Misiones en 1789. Su padre había sido brigadier de la Real Armada. Otros: José de San Martín, Francisco de Vera, Matías Zapiola... en total: 19 profesionales de la guerra. Sin duda, todos ellos de orientación liberal y contrarios al absolutismo borbónico.

Informe del Primer Triunvirato a Juan M. de Pueyrredón: "No olvide que en la Fragata Canning han llegado 19 oficiales facultativos, y de crédito, que desesperan de la suerte de España. Quieren salvarse, y que se salven estas preciosas provincias".

EN AQUEL PRIMER AÑO, SAN MARTÍN SE UBICA BIEN EN BUENOS AIRES Y LUEGO AVANZA EN SU DECIDIDO -AUNQUE RESERVADO- PLAN CONTINENTAL

En aquel primer año (1812) San Martín se ubica bien en Buenos Aires (a pesar de que lo sospechan espía español, francés o inglés). En nuestro país, sólo conocía la aldea de Yapeyú, que su padre había administrado hasta que don José cumplió 5 años y la familia volvió a España. El caso es que entró pisando fuerte. Los primeros años registran, empero, dificultades. San Martín sólo combate en la escaramuza de San Lorenzo, su única acción en territorio argentino. Concibe un Plan Continental Buenos Aires-Santiago-Callao-Lima. Logra la evidente ayuda de Inglaterra que, a partir del Primer Ministro Castlereagh, va dejando sus ambiciones coloniales y se inclina por establecer una útil relación comercial con las colonias españolas, sin conquistarlas. Así resulta suceder al final. No debe olvidarse que en toda Latinoamérica, desde Buenos Aires hasta México y Haití, pero muy especialmente Caracas y también Chile, se verificaba una efervescencia que puede sintetizarse en esta pregunta: ¿qué hacer ahora sin España, que ha caído en manos de Napoleón? Es en este contexto que debe entenderse el decidido (aunque muy reservado) proyecto de San Martín.

El 11 de febrero de 1817, después de cruzar los Andes, José de San Martín ve que se acerca el choque armado con los españoles que defendían sus posiciones en Chile, y entusiasmado le dice a su edecán, Manuel de Olazábal: "¡Duro con los latones a la cabeza de los matuchos, que queden pataleando...!" (Nota: "matucho" era la denominación del animal castrado en Mendoza y Chile, "latones" eran figuradamente los sables).

Unos 2.450 hombres, con cinco piezas de artillería, al mando del general Rafael Maroto, se nuclean junto al pabellón rojo y gualda que representa a España, en lo alto de la cuesta de Chacabuco, en el valle del Aconcagua. Al pie del monte, 3.600 hombres con nueve piezas de artillería avanzan bajo la bandera del Ejército de los Andes (ni argentina, ni chilena) de formato vertical, que podría denominarse gallardete.

EL HISTORIADOR FRANCÉS ANDRÉ FUGIER APUNTARÍA QUE SAN MARTÍN HABÍA ASIMILADO BRILLANTEMENTE LAS NUEVAS TÁCTICAS DE NAPOLEÓN

En la madrugada del 12 de febrero, San Martín pone en marcha su estrategia, consistente en envolver a los españoles mediante dos columnas: la de Soler por el Oeste, la de O´Higgins por el Este. El combate es encarnizado. Parte de batalla que firma San Martín: "La carnicería fue terrible, y la victoria completa". El historiador francés André Fugier apuntaría después que San Martín había asimilado brillantemente las nuevas tácticas de Napoleón, reemplazando el ataque frontal por el movimiento de columnas envolventes. En particular, la batalla de Chacabuco le resulta muy similar a la de Montenotte, librada por Napoleón después de cruzar los Alpes, el 12 de abril de 1796.

Ha de recordarse que los grandes jefes militares, los mariscales y estrategas de aquella época, eran celebridades de amplia formación académica y sus "creaciones" en combate se valoraban como sinfonías de consumados maestros. Ellos (los Napoleón, los Nelson, los Bolívar) hicieron el mundo y el mapa de su tiempo.

San Martín entra triunfante a Santiago de Chile y escribe al Director Supremo de las Provincias Unidas, Juan Martín de Pueyrredón, en Buenos Aires: "En veinticuatro días hemos hecho la campaña. Cruzamos la cordillera más alta del mundo, concluimos con los tiranos y dimos la libertad a Chile". Al día siguiente es capturado el General Marcó del Pont, que buscaba escapar por Valparaíso. Este hombre se presentaba así: "Don Francisco Casimiro Marcó del Pont, Caballero de la Orden de Santiago, de la Real y Militar de San Hermenegildo, de la Flor de Lis, Maestrante de la Real de la Ronda, benemérito de la patria en grado heroico y eminente, Mariscal de Campo de los Reales Ejércitos, Superior Gobernador, Capitán General, Presidente de la Real Audiencia, Superintendente subdelegado del General de Real Hacienda y del de Correos, Postas y Estafetas y Vice Patrono Real de este reino de Chile". Los títulos enunciados son de una soberbia belleza, sobre todo en contraste con el Libertador, que simplemente (en su clásico alarde de austeridad) se presentaba como "José San Martín". Al ver a su enemigo ya detenido, le dice: "Ah general... ¡Venga esa mano blanca!"

VIENDO LOS TÚMULOS DONDE ESTÁN ENTERRADOS LOS INFANTES, SAN MARTÍN SE CONDUELE Y EXCLAMA: "¡MIS POBRES NEGROS!"

Esta famosa ironía tiene una pequeña historia. Cuando el enviado tucumano Antonio Álvarez Condarco visita a Marcó de parte de San Martín para hacerle conocer las decisiones del Congreso de Tucumán, donde Chile se consideraba una más de las Provincias Unidas del Río de la Plata, el español echa una ojeada al papel y luego lo tira al fuego. Garabatea ligeramente una respuesta para San Martín y mirando fijamente a los ojos de Condarco, le dice: "Firmo con mano blanca, no como San Martín que la tiene negra". No se sabrá jamás si el Capitán General de Chile se refería al color de la piel de don José (famosamente morena como la de un indio, dixit Alberdi) o a su traición a la bandera española. En cuanto a negros africanos, los había muchos en el ejército. Entre otras cosas, se les ofrecía la manumisión si se enrolaban. Casi todos infantes, porque no eran buenos jinetes. Cuando recorre el valle de Aconcagua regresando a Mendoza y ve los túmulos donde están enterrados los infantes, San Martín se conduele y exclama: "¡Mis pobres negros!" Lo acompañaba su edecán inseparable, el irlandés John O´Brien. Pues, como decía Mitre, San Martín no hacía ni decía nada si no había un británico escuchando, tomando nota o arrimando respetuosas sugerencias.

El caso es que, con Chacabuco, se inició concretamente el Plan Continental de San Martín, hacia Perú. Aún faltaba, claro, que Álvarez Condarco contratara una flota importante, seleccionara a su almirante (que resultó ser William Cochrane, con el que San Martín terminó entre insultos y casi trompadas) y la correspondiente tripulación británica o yanqui, para flanquear desde el Pacífico la expedición al Perú. Marineros de guerra argentinos, prácticamente no los había. Y barcos, menos. Ya llegaría el tiempo del irlandés-argentino William (Guillermo) Brown. La historia es larga y llena de misterios. Pero así comenzó el Plan Continental. Ahora mismo, estamos a las vísperas de su Bicentenario.



El autor es vicepresidente del Instituto de Estudios Historicos Julio Roca