sábado, 14 de septiembre de 2024

Chile: La cronología del golpe de estado contra Allende

Minuto a minuto: así fue el golpe militar del 11 de septiembre de 1973 en Chile

Una cronología del día del golpe de Estado militar contra el presidente socialista Salvador Allende que quebró la democracia chilena
El Palacio de La Moneda durante el golpe de Estado del 11 de septiembre de 1973



El palacio presidencial de La Moneda durante el bombardeo de las tropas de Pinochet, el 11 de septiembre de 1973. Bettmann (Bettmann Archive)


Antonia Laborde || El País


El golpe de Estado contra el Gobierno del socialista Salvador Allende, el 11 de septiembre de 1973, arrancó por la madrugada, en el puerto de Valparaíso, en el corazón de la Marina. El mandatario repitió varias veces durante la jornada que no renunciaría a la presidencia de Chile. El bombardeo liderado por la Fuerzas Armadas se anunció para las once, pero comenzó al filo del mediodía. Tras media hora de ataque, con el palacio de Gobierno en llamas, los pelotones irrumpieron por la puerta del número 80 de la calle Morandé. Allende, que había adelantado en su último discurso que pagaría con su vida la lealtad al pueblo, se suicidó en el segundo piso.

Esta es la cronología del día que se quebró la democracia en Chile, en br a la información entregada por el Museo de la Memoria y los Derechos Humanos y la plataforma Memoria Histórica:

1.00 horas

Le informan al presidente Salvador Allende que tropas militares se trasladan desde el norte hacia la capital, Santiago. La Comandancia General de la Guarnición del Ejército justifica el movimiento con que son refuerzos ante posibles disturbios por el desafuero del senador Carlos Altamirano y el diputado Óscar Guillermo Garretón.

4.00 horas

Fuerzas del Ejército dan inicio a la Operación Silencio en Valparaíso, una maniobra para acallar las radiodifusoras afines a la Unidad Popular que unían el puerto con la capital. Más tarde bomardearían antenas radiales en distintos rincones del país. Mientras tanto, las Fuerzas Armadas preparan su propia cadena de transmisión a través de radio Agricultura.

5.00 horas

El coronel Roberto Guillard, el comunicador Álvaro Puga, el gerente de comunicaciones de la Sociedad Nacional de Agricultura, Federico Willoughby, el presidente la Feria Internacional de Santiago (FISA), Sergio Romero, se toman el quinto piso del Ministerio de Defensa, desde donde se encargarán de la cadena de transmisión de las fuerzas golpistas.

6.00 horas

Barcos de la Armada, que habían zarpado el día anterior para participar de la Operación Unitas, coordinada por Estados Unidos, regresan al puerto de Valparaíso. Efectivos navales se despliegan en las calles, la Intendencia y las plantas de la Compañía de Teléfonos de Viña y Valparaíso. Desde la Escuela Militar, se pone en ejecución el Plan A, que establece el estado de alerta para prevenir desbordes de la población.


Controles militares en los alrededores de La Moneda el 11 de septiembre de 1973. Horacio Villalobos (Corbis via Getty Images)

6.30 horas

En Santiago, el general Augusto Pinochet está instalado en la Escuela de Telecomunicaciones, el general Gustavo Leigh en la Academia de Guerra de la Fuerza Aérea de Chile (FACH), el general César Mendoza, que ha dado su propio golpe en Carabineros, se instala en el edificio de la institución en el centro de la ciudad, y el vicealmirante Patricio Carvajal, quien coordina la ejecución del golpe.

6.45 horas

En la br Carriel Sur de la Fuerza Aérea de Concepción, a 430 kilómetros al sur de Santiago, se alistan 12 aviones Hawker Hunter con una capacidad de tiro total de 5.600 proyectiles explosivos por minuto para emprender rumbo a la capital.

7.20 horas

El presidente Allende llama al Ministerio de Defensa pidiendo explicaciones de los movimientos de las Fuerzas Armadas. Unos minutos después, abandona su casa en la calle Tomás Moro y se dirige hacia La Moneda, acompañado de sus asesores y guardia personal. El Palacio de Gobierno ya se encuentra rodeado por las tropas rebeldes y algunos de los colaboradores del mandatario son detenidos por carabineros.

7.30 horas

El ministro de Defensa Orlando Letelier llega a su oficina y su ayudante, el coronel Sergio González, le manifiesta que ha sido depuesto de su cargo. El general Sergio Arellano lo detiene y dispone su traslado al Regimiento Tacna, convirtiéndose en el primer detenido del 11 de septiembre de 1973.

7.55 horas

El presidente Salvador Allende se dirige al país por radio Corporación, del Partido Socialista. Informa que los militares han ocupado y cortado la comunicación con Valparaíso, lo que califica como un “levantamiento en contra del Gobierno legítimo, constituido, amparado por la ley y la voluntad de los ciudadanos”. “Lo que deseo es que los trabajadores estén atentos, vigilantes, que eviten provocaciones. Como primera etapa, tenemos que ver la respuesta, espero que sea positiva, de los soldados de la patria que han jurado defender el régimen establecido”.

8.00 horas

Con Valparaíso totalmente controlado por las Fuerzas Armadas, el almirante José Toribio Merino habla por primera vez ese día y asegura que lo que está ocurriendo “no es un golpe de Estado”. “Solo se persigue el restablecimiento de un Estado de derecho. No tenemos compromiso, solo gobernarán los más capaces y honestos. Estamos formados en la escuela del civismo, del respeto a la persona humana, de la convivencia, de la justicia, del patriotismo…”.

8.20 horas

El presidente Allende vuelve a dirigirse al país con la esperanza de que la sublevación esté circunscrita solamente a la Armada y Valparaíso.

8.30 horas

Las radios de oposición transmiten en cadena la primera proclama de las Fuerzas Armadas en la que se insta a renunciar a Allende. “Las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile están unidos en iniciar la histórica y responsable misión de luchar por la liberación de la patria del yugo marxista y la restauración del orden y de la institucionalidad”, sostiene el teniente coronel Roberto Guillard. “Los trabajadores de Chile deben tener la seguridad de que las conquistas económicas y sociales que han alcanzado hasta la fecha no sufrirán modificaciones en lo fundamental”, añadió.

9.00 horas

Comienzan a escucharse los primeros disparos de un enfrentamiento entre militares y carabineros con francotiradores instalados en los edificios públicos del sector aledaño al Palacio de Gobierno.

9.20 horas

“No lo haré”, responde tajante Allende a través de las radios Magallanes y Corporación, que lograban salir por frecuencia modulada. “Hago presente mi decisión irrevocable de seguir defendiendo a Chile en su prestigio, en su tradición, en su norma jurídica, en su Constitución”. “¡Yo no voy a renunciar! Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que entregáramos a la conciencia digna de miles y miles de chilenos, no podrá ser segada definitivamente”.

10.00 horas

El teniente coronel Roberto Guillard realiza un ultimátum a través de las radios golpistas: “Si no hay rendición, La Moneda será bombardeada a las 11 de la mañana”. Media hora después, advierten que las mujeres del palacio de Gobierno tienen tres minutos para salir porque el edificio será bombardeado por la Fuerza Aérea “en tres minutos”.

10.30 horas

Salvador Allende transmite su último mensaje a través de radio Magallanes. “Trabajadores de mi patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo donde la traición pretende imponerse. Sigan sabiendo ustedes que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor. ¡Viva Chile!, ¡viva el pueblo!, ¡vivan los trabajadores!”. El presidente, tras una conversación con el coronel Patricio Carvajal, congrega a quienes estaban en La Moneda y les informa que se acuerda una tregua de 10 minutos para el abandono del lugar. Sólo quedan los miembros del Grupo de Amigos Personal (GAP) y otras 25 personas, entre dirigentes y asesores cercanos.

11.00 horas

Allende rechaza los llamados de Carvajal a la rendición y su ofrecimiento de un avión para partir al exilio. La Guardia Presidencial de Carabineros abandona el Palacio. Las tropas militares atacan frontalmente el Palacio de La Moneda. El bombardeo aéreo provoca un incendio. En 16 minutos, los aviones lanzan más de 20 bombas sobre el edificio. Dos aviones bombardean la residencia del mandatario de calle Tomás Moro.


Soldados a favor del Golpe se refugian mientras aviones bombardean La Moneda. ENRIQUE ARACENA (ASSOCIATED PRESS)

12:00 horas

La infantería ataca el Palacio presidencial con artillería y armas pesadas.

13.00 horas

Con La Moneda en llamas y en medio del combate, Osvaldo Puccio, Fernando Flores y Daniel Vergara salen del palacio de Gobierno y se dirigen hacia el Ministerio de Defensa para conversar algunas condiciones de rendición: no más bombardeos, formación de un gobierno de civiles y respeto de las conquistas sociales. Cuando llegan, son detenidos.

13.30 horas

Allende acepta la rendición. Todos debían salir sin armas, caminando y con una bandera blanca. La última en salir es Payita, su íntima secretaria, a quien el presidente entrega el Acta de Independencia, la que minutos después será destruida por uno de los militares que la detiene.

13.40 horas

El presidente Salvador Allende se suicida con la metralleta regalada por Fidel Castro. En el Salón Independencia, del segundo piso, el general Javier Palacios, al mando del operativo, lo encuentra muerto.

14.00 horas

Palacios comunica la noticia a Carvajal: “Misión cumplida. Moneda tomada. Presidente muerto”. Carvajal, a su vez, lo informa a los generales Pinochet y Leigh: “They say that the Allende committed suicide and is dead now”.

14.20 horas

El teniente coronel Roberto Guillard informa por la radio: “Las Fuerzas Armadas y de Orden han asumido el deber moral que la Patria les impone de destituir al Gobierno que, aunque inicialmente legítimo, ha caído en la ilegitimidad flagrante, y han decidido asumir el poder por el solo lapso que las circunstancias lo exijan, apoyados en la evidencia del sentir de la gran mayoría nacional, lo cual por sí, ante Dios y ante la Historia, hace justo actuar y, por ende, las resoluciones, normas e instrucciones que se dicten para consecución de la tarea de bien común y de alto interés patriótico que se dispone a cumplir. Firmado: Junta de Gobierno de las Fuerzas Armadas, Carabineros de Chile”.

15.00 horas

Los bomberos llegan a apagar el fuego en La Moneda. La Junta Militar conmina a 95 políticos de la Unidad Popular a entregarse en el plazo de una hora en el Ministerio de Defensa. Algunos de los colaboradores y guardias personales de Allende, detenidos en La Moneda, son trasladados al regimiento Tacna. No se los vuelve a ver.

17.00 horas

Militares retiran el cuerpo de Allende del Palacio de la Moneda, cubierto en una manta, y lo trasladan en una ambulancia al Hospital Militar, donde se certifica la causa de su muerte. “La causa de la muerte es la herida a bala cérvico-buco-cráneo-encefálica reciente, con salida de proyectil. El disparo corresponde a los llamados “de corta distancia” en medicina legal… El disparo ha podido ser hecho por la propia persona”. El informe fue dado a conocer en 1990.


Soldados y bomberos sacan el cuerpo de Salvador Allende del palacio presidencial. Anonymous (ASSOCIATED PRESS)

18.00 horas

Se inicia el toque de queda. Una hora más tarde, los jefes de la nueva Junta Militar inician su primera reunión.

20.00 horas

En el Ministerio de Defensa se organizan las fuerzas para asegurar el control de la capital, a través de un masivo despliegue de tropas y bandos militares difundidos por la cadena oficial.

20.30 horas

Se habilita el Estadio Chile y el Estadio Nacional como campos de prisioneros. En este último se detiene a cerca de 5.600 personas, entre ellas, más de 600 estudiantes, profesores y empleados de la Universidad Técnica del Estado y 150 trabajadores de la fábrica textil Sumar.



04:45
Sobrevivientes del golpe de Estado, regresan al estadio donde fueron torturados
Personas detenidas tras el golpe de estado contra el gobierno del presidente Salvador Allende son tomadas como prisioneras en el Estadio Nacional, Santiago de Chile.Foto:AP | Vídeo:EPV

22.00 horas

El Canal 13 de televisión emite las primeras imágenes de la recién asumida Junta Militar. Frente a las cámaras toma juramento como presidente Augusto Pinochet. Se da lectura al Decreto ley N° 1 con el que se implanta el estado de sitio.

La dictadura duró 17 años. Chile reconoce a más de 40.000 víctimas y la cifra oficial es de 3.065 los muertos y desaparecidos desde 1973 a 1990. Las víctimas de desaparición forzada son 1.469. Solo 307 cuerpos o restos óseos han sido identificados.

 

viernes, 13 de septiembre de 2024

EA: La influencia prusiana en su formación (2/2)

 
Historia del Ejército Argentino, la profesionalización, segunda y última parte- Música de fondo: "La Historia Desconocida" y "Las Guerras" (Fernando Torres). Enrique Dick. La profesionalización en el Ejército Argentino (1899-1914). Buenos Aires, Academia Nacional de la Historia. 2014 Enrique Dick y Gustavo Schiavo. La profesionalización en el Ejército Argentino (1914-1928). Buenos Aires, Círculo Militar. 2020 Robert Potash. El Ejército y la Política en la Argentina 1928-1945. De Yrigoyen a Perón. Buenos Aires, Ed. Sudamericana, 1994. Álvaro Barros. Indios, fronteras y seguridad interior. Buenos Aires, Solar/Hachette, 1975. Jorge Crespo. Guía de uniformes militares. Comandantes y jefes argentinos del ejército 1865-1945. Buenos Aires, Ayer y Hoy. 2004 Guillermo Palombo. Uniformes del Ejército Argentino. Antecedentes históricos (1702-1914). Buenos Aires, Lilium. 2023 Miguel Ángel Cuarterolo. Soldados de la Memoria. Imágenes y hombres de la Guerra del Paraguay. Buenos Aires, Planeta. 2000 Miguel Ángel Cuarterolo y Abel Alexander. Soldados 1848-1927. Buenos Aires, Edivern. 2004

jueves, 12 de septiembre de 2024

GCE: Guadalajara en 1937

Guadalajara 1937

Weapons and Warfare




Fuerzas republicanas con un CV33 capturado en la batalla de Guadalajara, marzo de 1937.

El 5 de febrero, destacamentos italianos participaron en operaciones en los alrededores de la ciudad de Málaga, como parte de una nueva ofensiva nacionalista en todo el frente. Málaga fue tomada el día 8 y unidades italianas ocuparon las localidades cercanas de Nerja y Motril. Como resultado de su éxito aquí, los italianos sobreestimaron las posibilidades de una victoria rápida y decisiva y lanzaron una gran ofensiva el 8 de marzo. Dos divisiones de infantería, cada una apoyada por dos compañías de tanques, salieron al campo y descubrieron que el terreno se había convertido en una vasta extensión de barro espeso y pegajoso debido a las fuertes lluvias que cayeron la noche anterior. Esto limitó considerablemente la movilidad de los blindados italianos.

Al día siguiente, dos unidades de tanques italianos avanzaron hasta un punto a unos 30 kilómetros de Guadalajara. En diversas escaramuzas, los republicanos perdieron nueve de los 22 tanques que empleaban. Ambos bandos consumieron enormes cantidades de combustible debido a la dificultad del terreno, y el suministro de combustible a menudo se retrasaba debido a la congestión a lo largo de las rutas de suministro.

En un intento de frenar el avance italiano, los republicanos colocaron dos BT-5 a lo largo de su ruta de retirada como parte de su retaguardia, pero uno de ellos fue destruido. El 9 de marzo, los italianos habían ocupado Brihuega, pero esa misma noche, seis BT-5 prepararon una emboscada en el bosque periférico. Tan pronto como la Tercera División Italiana, apoyada por dos compañías de tanques y la compañía de vehículos blindados, comenzó su movimiento al amanecer del día siguiente, cayó en la trampa. Los tanques soviéticos dispararon sus cañones y ametralladoras casi a quemarropa. Destruyeron dos tanques y causaron muchas bajas. La empresa de vehículos blindados Lancia, que funcionaba como unidad de reconocimiento, también sufrió grandes pérdidas: al menos tres de sus vehículos fueron capturados y utilizados por el enemigo.



El avance italiano del 8-11 de marzo de 1937 en la Batalla de Guadalajara.

Al día siguiente, 11 de marzo, tres tanques lanzallamas se apresuraron a ayudar a una columna de infantería que se había topado con una serie de nidos de ametralladoras enemigas cerca de Trijueque. Un tanque fue alcanzado después de haber destruido algunas posiciones, otro volcó al salirse de la carretera y un tercero fue destruido por un proyectil antitanque. Un segundo teniente se acercó en su propio tanque en un intento de sacar a los supervivientes. Alcanzado por una bala de un BT-5, que le cortó el brazo, logró llevar su vehículo de regreso a las líneas amigas antes de morir. Otro tanque que realizaba operaciones de reconocimiento en dirección a Torjia también fue alcanzado, pero también fue puesto nuevamente en funcionamiento. Otros dos tanques fueron destruidos por disparos de 45 mm de los BT-5. Obviamente, los tanques italianos con sus ametralladoras de 8 mm no fueron rival para los BT-5 una vez que estuvieron dentro del alcance.

Luego, los italianos lanzaron un ataque combinado de blindados e infantería, pero fue detenido por la artillería pesada y las fuerzas aéreas republicanas. El 12 de marzo, Palacio Ybarra era el punto de máxima penetración hacia Guadalajara. Fue aquí donde el batallón pro republicano “Garibaldi”, formado por voluntarios italianos antifascistas, derrotó a los nacionalistas con la ayuda de dos BT-5. No muy lejos, en Los Yebenes, la 4.ª División italiana (Littorio) relevó a la 3.ª. El 13 de marzo, dos BT-5 volvieron a tender una emboscada a los italianos, aunque finalmente fueron destruidos.

El 18 de marzo, los republicanos iniciaron una contraofensiva. En preparación, habían reclutado hombres y material de otras unidades para reunir al menos 60.000 soldados y 60 tanques. Los italianos que se enfrentaban a ellos sumaban unos 30.000 hombres. Los republicanos inmediatamente trasladaron sus tanques al frente, colocando unos 40 de ellos en la zona de Brihuega. Bien apoyados por artillería y unos 80 aviones, comenzaron su ataque esa tarde. Esa noche, los republicanos volvieron a ocupar Brihuega y obligaron a los italianos a retroceder varios kilómetros. Mientras tanto, los tanques italianos permanecían inactivos por falta de combustible. Los combates cesaron en un punto muerto el 21 de marzo, a pesar de que los italianos habían avanzado unos 20 kilómetros desde sus posiciones originales del 8 de marzo.

Después de reorganizarse en Villasante, los italianos también participaron en operaciones a lo largo del Golfo de Vizcaya, una zona tenazmente controlada por las fuerzas vascas pro republicanas. Los vascos habían establecido una fuerte defensa alrededor de la ciudad de Bilbao. Los italianos atacaron el 28 de abril, iniciando una larga batalla alrededor de la ciudad. El 15 de junio, tanques italianos atacaron las posiciones defensivas vascas en un punto débil que había sido descubierto por un desertor. El 19 de junio entraron y ocuparon Bilbao, que ya había sido evacuada por sus defensores.

Limitaciones de los blindados

En general, los vehículos de combate italianos utilizados en la Guerra Civil Española se vieron perjudicados por la inferioridad de su armamento. No eran rival para los tanques enemigos más pesados, armados con armas de fuego rápido de 37 mm y 45 mm en torretas giratorias. También hubo otros problemas con el equipo; por ejemplo, los sistemas de entrada de aire de los tanques y vehículos blindados no estaban equipados con filtros adecuados para proteger a los tripulantes del polvo fino tan frecuente en el campo español. En un intento por proteger sus caras y bocas del polvo, los italianos adaptaron sus máscaras antigás para que sirvieran como protectores contra el polvo, pero fue en vano.

Los petroleros italianos en España enfrentaron condiciones radicalmente diferentes a las de la Guerra de Etiopía de 1935-36, en la que los etíopes mal equipados fueron abrumados por un ejército italiano relativamente moderno. Los italianos encontraron la situación en su contra en España, y esto se reflejó en el nivel relativamente alto de sus bajas. Aún más significativo, sin embargo, fue que el Estado Mayor italiano no logró extraer ninguna lección útil en la guerra de tanques de la experiencia española. En consecuencia, cuando Italia entró en la Segunda Guerra Mundial en 1940, sus unidades blindadas (todavía compuestas principalmente por CV 3/35, aunque pasaron a llamarse L3) se enfrentarían a tanques aún más formidables que el BT-5 o el T-26B, y los resultados en el El campo de batalla iba a ser desastroso.

martes, 10 de septiembre de 2024

EA: La influencia prusiana en su organización (1/2)



Enrique Dick. La profesionalización en el Ejército Argentino (1899-1914). Buenos Aires, Academia Nacional de la Historia. 2014 Enrique Dick y Gustavo Schiavo. La profesionalización en el Ejército Argentino (1914-1928). Buenos Aires, Círculo Militar. 2020 Robert Potash. El Ejército y la Política en la Argentina 1928-1945. De Yrigoyen a Perón. Buenos Aires, Ed. Sudamericana, 1994. Álvaro Barros. Indios, fronteras y seguridad interior. Buenos Aires, Solar/Hachette, 1975. Jorge Crespo. Guía de uniformes militares. Comandantes y jefes argentinos del ejército 1865-1945. Buenos Aires, Ayer y Hoy. 2004 Guillermo Palombo. Uniformes del Ejército Argentino. Antecedentes históricos (1702-1914). Buenos Aires, Lilium. 2023 Miguel Ángel Cuarterolo. Soldados de la Memoria. Imágenes y hombres de la Guerra del Paraguay. Buenos Aires, Planeta. 2000 Miguel Ángel Cuarterolo y Abel Alexander. Soldados 1848-1927. Buenos Aires, Edivern. 2004

lunes, 9 de septiembre de 2024

Rosas y Darwin: Cruce de experiencias

 "Me dijo que era inhumano": el impensado encuentro entre Rosas y Charles Darwin durante la primera conquista del desierto


Desarrollada entre 1833 y principios de 1834, esta expedición militar de la que poco se habla fue más que un intento por ocupar la Patagonia.

Por Yasmin Ali || Canal 26


Rosas y Darwin

Es de público conocimiento la expedición militar a la Patagonia que emprendió Julio Argentino Roca entre 1878 y 1885, que años después pasaría a la historia como Conquista del Desierto y que al día de hoy genera debates enardecidos. Pero antes de ella existió una liderada por Juan Manuel de Rosas entre 1833 y principios de 1834 de la que poco se habla.

Luego de finalizar su primer mandato como gobernador de Buenos Aires, entre 1829 y 1832, el Restaurador de las Leyes había rechazado volver al poder porque se le había negado la suma del poder público y las facultades extraordinarias. Casi sabiendo que lo mejor era esperar a que se calmen las aguas, decidió emprender una travesía por el sur de la Provincia y parte de la Patagonia donde conoció ni más ni menos que a Charles Darwin.

Un inglés en la Patagonia

Darwin, quien por aquel entonces tenía 22 años, se emprendió en un viaje desde diciembre de 1831 a octubre de 1836 donde recorrió el mundo al bordo del Beagle, de la Marina Real Británica, capitaneado por Robert Fitz Roy. A comienzos de 1833 el barco lo dejó en la desembocadura del Río Negro, lo que hoy es parte de la Patagonia argentina.

Cabalgó desde Carmen de Patagones hasta el Río Colorado donde se encontró con nada más, y nada menos, que el campamento de Rosas. Aquel ejército que comandaba el oriundo de Buenos Aires tenía como objetivo despejar a los indios y asegurar la frontera. En 1839 el inglés publicó Viaje de un naturalista alrededor del mundo donde describió su primera impresión de lo que vio:

    "Seguramente los soldados de ningún otro ejército han tenido tal apariencia de bandidos y villanos".

Rosas deseaba conocerlo y él aceptó. Darwin diría sobre él: "Un hombre de un carácter extraordinario, que ejerce una notable influencia en este país, al que probablemente terminará gobernando. Ha obtenido una popularidad sin límites y, en consecuencia, un poder despótico".


Primera conquista del Desierto

El mismo Rosas también habló de aquella reunión: "Seguramente acostumbrado a sus costumbres europeas, le impresionó ver a soldados negros y mestizos, muchos mal vestidos, y no entendió a los indígenas que se bebían la sangre de las reses que se carneaban. Es la vida del desierto, míster Darwin, le expliqué. Tampoco le entró en la cabeza por qué degollábamos a los prisioneros, me dijo que era inhumano. Le aclaré que no siempre era así, y le conté de mi pacto con los tehuelches, a los que acordé pagarle por indio que pasasen a mejor vida".

Del encuentro el naturalista se llevó un pasaporte que le otorgó Rosas y que podía usar en los puestos militares del gobierno bonaerense. De esta forma logró cruzar las pampas en dirección al Río de la Plata.

Pasó unos días en Buenos Aires antes de viajar a Santa Fe y volvió navegando por el Paraná. Al regresar se encontró que los simpatizantes de Rosas habían sitiado la Provincia. Pero Darwin pudo pasar pasar cuando mencionó que había sido huésped del general. En los primeros días de diciembre emprendió un nuevo viaje rumbo a Puerto Deseado.


La campaña militar de Rosas

La primera conquista

Alan Moorehead, autor de Darwin: la expedición en el Beagle 1831-1836, menciona lo que fue esta expedición militar al sur y el encuentro entre ambos: "El general mismo era tan extravagante y aficionado a los caballos como sus hombres. Llevaba en su séquito una pareja de bufones para divertirse y tenía fama de ser muy peligroso cuando sonreía; en esos momentos era capaz de ordenar que un hombre fuese fusilado o estaqueado. Existía en las pampas una prueba de equitación. Se colocaba un hombre en un larguero encima de la entrada del corral y se hacía salir a un caballo salvaje, sin silla ni freno; el hombre caía en el lomo del animal y lo montaba hasta que se detenía. Rosas podía realizar tranquilamente esta hazaña. No obstante, era un hombre venerado y obedecido; estaba destinado a ser dictador de Argentina durante muchos años".

En otro párrafo agrega: "La táctica de su campaña contra los indios era muy simple. Rodeaba a los que estaban dispersos por la pampa, pequeñas tribus de un centenar de individuos que vivían cerca de las salinas o lagos salados y, cuando los que huían de él habían sido concentrados en un lugar, procuraba matarlos a todos. No había muchas posibilidades de que los indios huyesen al sur del río Negro, pues tenía un acuerdo con una tribu amiga, en virtud del cual se obligaban a asesinar a todos los fugitivos que se cruzasen en su camino. Estaban muy ansiosos por cumplir, decía Rosas, porque les había anunciado que mataría a uno de su propio pueblo por cada indio rebelde que se les escapara".



El origen de las especies de Darwin

"Durante la estancia de Darwin, el campamento era un continuo hervidero. A cada hora llegaban rumores de escaramuzas. Un día vino la noticia de que uno de los puestos de Rosas, en la carretera a Buenos Aires, había sido arrasado", agregó.

Lo cierto es que aquel encuentro pasó a la historia, así como sus protagonistas. El 24 de noviembre de 1859, Darwin publicó en la editorial John Murray de Londres su mítico libro El origen de las especies y Rosas volvió a gobernar en Buenos Aires hasta el 3 de febrero de 1852 cuando cayó en la batalla de Caseros.

domingo, 8 de septiembre de 2024

Guerras napoleónicas: Los ejércitos del reino de Hannover

El ejército de Hannover en Waterloo


Weapons and Warfare




El contingente hannoveriano del ejército de Wellington se integró plenamente en la estructura divisional británica; estaba compuesto por cinco brigadas de infantería, una brigada de caballería, dos baterías de artillería y un "cuerpo de reserva" que no estaba comprometido en la batalla.

Hannover había tenido una estrecha relación con Gran Bretaña desde el ascenso del elector de Hannover al trono británico como rey Jorge I en 1714, pero aunque esta conexión había ejercido cierta influencia en la política exterior británica y a pesar de compartir un gobernante, los estados y sus Los ejércitos habían seguido siendo entidades separadas. Las tropas hannoverianas habían luchado junto a los británicos en el siglo XVIII, como lo habían hecho bajo el mando de Marlborough incluso antes de la adhesión de Jorge I, pero la separación de los estados quedó demostrada por la salida de Hannover de la guerra contra Francia tras la retirada de Prusia en 1795, cuando la posición de Hannover se volvió militarmente insostenible. Al reanudarse la guerra entre Francia y Gran Bretaña tras la breve Paz de Amiens, Hannover fue ocupada por Napoleón y parcialmente incorporada a su Reino satélite de Westfalia. El estado de Hannover no se restableció hasta después de la derrota de Napoleón.

La contribución militar de Hannover a las Guerras Napoleónicas se mostró de manera más destacada en la Legión Alemana del Rey, la excelente formación hannoveriana del ejército británico. El ejército de Hannover, que en organización y uniforme se parecía mucho al británico, se había disuelto en 1803 y sólo resucitó durante la "Guerra de Liberación" contra Napoleón. Su infantería estaba compuesta por batallones regulares (Feld-Bataillone) y milicias (Landwehr), y desde febrero de 1815 cada "batallón de campo" estaba vinculado a tres batallones Landwehr en una estructura de regimiento, pero para el servicio de campo cada batallón seguía siendo una entidad independiente. La organización era básicamente británica, aunque con secciones de hostigadores entrenados (uno de cada doce hombres) en lugar de compañías de flanco al estilo británico; dos de los batallones regulares de Waterloo (Lüneburg y Grubenhagen) eran "batallones ligeros" y todo el personal estaba capacitado para ello. Los batallones Landwehr tenían cada uno cuatro compañías. Los uniformes eran en gran parte de estilo británico, en rojo (a excepción de los batallones ligeros vestidos de verde y el cuerpo Feldjäger), aunque es posible que la escasez inicial de equipo evidente cuando se organizó el ejército por primera vez en 1813 no se haya superado por completo, con el uso continuo de uniformes más antiguos y shakos tipo "estufa". Un ejemplo de la escasez inicial de equipo fue el de Battn. Bennigsen, rebautizado como Verden a principios de 1815, que al principio recibió shakos blancos fabricados como tocado tropical para el ejército británico en la India. Aunque los hannoverianos usaban la escarapela negra británica, los oficiales llevaban fajas amarillas en lugar del carmesí británico, y algunas tropas hannoverianas tenían mochilas británicas pintadas de amarillo.

Un contingente hannoveriano, a veces denominado «cuerpo subsidiario de Hannover», había estado estacionado en los Países Bajos desde el fin de las hostilidades en 1814; pero el cuerpo de reserva de Landwehr había sido formado en Hannover poco antes del comienzo de la campaña de 1815 por el general von der Decken. Las fuerzas de Hannover estaban inicialmente bajo la superintendencia de Sir Charles Alten, quien sugirió al gobierno de Hannover que, debido a la inexperiencia de las unidades recién formadas, se debería permitir a los reclutas ofrecerse como voluntarios en la Legión Alemana del Rey, para fortalecer sus batallones. ; pero esta sugerencia fue rechazada. En cambio, los batallones de la KGL se reorganizaron en seis compañías cada uno, y los cuadros supernumerarios de oficiales y suboficiales fueron transferidos temporalmente al Landwehr para proporcionar un liderazgo experimentado a los jóvenes soldados. Los capitanes de la KGL ascendieron al rango de campo como parte de este proceso, y dos de los comandantes de brigada de Hannover también procedieron de la Legión. La conexión entre las formaciones británicas y hannoverianas se enfatizó por el hecho de que Wellington informó sobre las bajas hannoverianas junto con las pérdidas británicas, publicados juntos en la London Gazette, incluyendo los nombres de los oficiales, tal como se habían informado las pérdidas portuguesas durante la Guerra Peninsular cuando ellos también, formaban parte de un ejército conjunto.

Las brigadas hannoverianas se distribuyeron de la siguiente manera.

I Cuerpo: 3.a División: 1.a Brigada Hannoveriana

Comandada por el mayor general conde (Graf) Kielmansegge, miembro de una distinguida familia hannoveriana que tomó el mando de la división después de que Alten fuera herido, esta era la brigada hannoveriana más fuerte, compuesta por cinco batallones de campaña (York o el primer duque de York, Bremen, Verden y los batallones ligeros Lüneburg y Grubenhagen), y dos compañías del Field Jäger Corps, una unidad de francotiradores. La brigada estuvo muy involucrada durante la campaña: en Quatre Bras ocupó el extremo izquierdo de la posición, y en las disposiciones iniciales en Waterloo estuvo apostada al oeste de la carretera Charleroi-Bruselas, entre las brigadas de Ompteda y Colin Halkett. Dos batallones perdieron a sus comandantes en Waterloo: Grubenhagen (el teniente coronel von Wurmb, muerto) y Bremen (el teniente coronel Langrehr, herido de muerte).

II Cuerpo: 2.a División: 3.a Brigada Hannoveriana

Esta formación Landwehr estaba compuesta por Battns. Osnabrück, Quackenbrück (a veces denominados el segundo y tercer duque de York respectivamente), Bremervörde y Salzgitter, y estaba comandado por el teniente coronel Hugh (o Hew) Halkett de la séptima línea de battn., Legión alemana del rey. Hermano de Colin Halkett, comandante de la Quinta Brigada Británica, era un oficial experimentado de la Península que también había servido en el norte de Alemania y los Países Bajos en 1813-14. Inicialmente en Waterloo, la brigada ocupó una posición de reserva en el extremo derecho de la línea de Wellington, al norte de Hougoumont. En el avance final, un batallón apoyaba a Hougoumont, y Halkett ordenó a los demás avanzar, pero su mayor de brigada murió antes de que se pudiera dar la orden, por lo que Halkett y el Osnabrück Battn. avanzó solo. Halkett observó a un general francés, "tratando de animar a sus hombres a ponerse de pie" (en realidad era Cambronne), por lo que se abalanzó sobre el francés, quien se rindió, pero el caballo de Halkett cayó y cuando se levantó descubrió que Cambronne "había tomado permiso francés en la dirección de donde vino. Al instante lo alcancé, lo agarré por la aiguillette, lo puse a salvo y lo entregué a un sargento de Osnabrück para que lo entregara al duque; No pude prescindir de un oficial para este propósito, ya que muchos resultaron heridos.

4.a División: 6.a Brigada Hannoveriana

Esta brigada estaba con Colville en Hal y, por lo tanto, no participó en la Batalla de Waterloo; estaba compuesto por los batallones de campaña Lauenberg y Calenburg, y los batallones Landwehr. Bentheim, Hoya y Nienburg. Su comandante, el general de división Sir James Lyon, era el oficial británico de mayor rango del contingente hannoveriano; había comandado a los hannoverianos en la campaña de 1813, especialmente en Goehrde. Provenía de una familia antigua y había nacido a bordo de un barco, en medio del Atlántico, cuando su madre regresaba a casa después de que su padre, el capitán James Lyon del 35.º, hubiera sido herido de muerte en Bunker's Hill. Sir James tuvo la inusual distinción de haber servido en la Batalla del Glorioso Primero de Junio ​​(1794) cuando un destacamento de su regimiento (25º) servía como infante de marina a bordo de la flota británica; también había comandado el 97.º en la Península.

Reserva: 5.a División: 5.a Brigada Hannoveriana

Comandada por el coronel von Vincke, esta brigada de cuatro batallones Landwehr (Gifhorn, Hameln, Hildesheim, Peine) estaba apostada en el extremo izquierdo de la línea de Wellington en Waterloo y no estaba muy comprometida.

6.a División: 4.a Brigada Hannoveriana

Otra brigada de Landwehr (Battns. Lüneburg, Münden, Osterode y Verden), estaba comprometida en Quatre Bras, inicialmente desplegada detrás de la línea principal británica; en Waterloo estaba en el ala izquierda y no estaba muy comprometido. Su comandante era el teniente coronel Charles Best del octavo batallón de línea KGL.

Cuerpo de Reserva de Hannover

Utilizada como guarnición en varios lugares de la retaguardia del área de campaña, esta formación estaba dirigida por el teniente general conde (Graf) F von der Decken y estaba compuesta por cuatro brigadas: 1.ª (teniente coronel von Bennigsen): Field-Battn. Hoya, Battns Landwehr. Bremerlehe y Mölln; 2do (Coronel von Beaulieu): Landwehr Battns. Ahlefeldt, Nordheim y Springe; 3.º (Teniente coronel von Bodecken): Landwehr Battns. Celle, Ottendorf y Ratzeburg; 4to (Teniente Coronel von Wissel): Landwehr Battns. Diepholz, Hannover, Neustadt y Uelzen.

Caballería

La brigada de caballería de Hannover, comandada por el coronel HSGF von Estorff, estaba compuesta por los regimientos de húsares del Príncipe Regente o de Lüneburg; Bremen y Verden; y el del duque de Cumberland. Su uniforme era de estilo húsar británico, el primero azul con revestimientos y pellizas escarlata, los otros dos verdes con revestimientos escarlata y pellizas escarlata y verde respectivamente; el duque de Cumberland llevaba shakos y los demás busbies. Estorff no estaba presente en Waterloo y dos regimientos estaban con la fuerza destacada en Hal; sólo el del duque de Cumberland estaba en Waterloo, un regimiento de voluntarios comandado por el teniente coronel Adolphus von Hacke (o 'Hake') y que lleva el nombre del quinto hijo del rey Jorge III, que se convertiría en rey de Hannover en 1837. El regimiento estaba en reserva en Waterloo cuando Uxbridge notó que comenzaban a moverse hacia la retaguardia sin órdenes. Envió a su ADC Sir Horace Seymour para detenerlos; Seymour recordó cómo von Hacke "me dijo que no tenía confianza en sus hombres, que eran voluntarios y que sus caballos eran de su propiedad". Seymour describió cómo 'en la exigencia del momento agarré las riendas del caballo del coronel y comenté lo que pensaba de su conducta; pero todo fue en vano» y el regimiento se alejó trotando del campo de batalla. Posteriormente, Hacke fue sometido a un consejo de guerra y el regimiento se dividió entre varios cuerpos aliados para realizar tareas de escolta para la comisaría; Mercer, de la Royal Horse Artillery, registró que "siendo todos caballeros en Hannover, es fácil imaginar que están bastante furiosos por esta degradación... Todos están sorprendentemente malhumorados y bruscos con todos...".

Artillería

Dos compañías de artillería de infantería de Hannover sirvieron en el ejército, las de los capitanes von Rettberg (adjunta a la 4.ª División) y Braun (5.ª División); estaban constituidos al estilo británico, el primero con cinco cañones de 9 libras y un obús de 5½ pulgadas, el segundo con cinco cañones de 6 libras y un obús. La empresa de Braun sirvió en Quatre Bras y ambas en Waterloo. La artillería de Hannover vestía un uniforme como el de la Artillería Real británica, del mismo color, pero con la distinción habitual de Hannover de fajas amarillas para los oficiales.




sábado, 7 de septiembre de 2024

Mortero de sitio: Karl-Gerät de 600 mm

 

Karl-Gerät: un mortero de asedio de 600 mm

Entre 1941 y 1945, Alemania operó algunos de los morteros de asedio móviles más grandes de la historia. Conocidas como Karl-Gerät, estas monstruosas máquinas podían lanzar proyectiles que pesaban tanto como un Range Rover Sport a una distancia de 4 kilómetros.

Aunque técnicamente eran autopropulsados, difícilmente podían considerarse móviles con una velocidad máxima de aproximadamente 4 mph.

El Karl-Gerät por sí solo necesitaba una tripulación enorme para funcionar, pero también requirió un proceso de instalación intensivo en mano de obra, un equipo de logística y baterías antiaéreas.

Sin embargo, una vez preparados, estos morteros podrían derribar edificios enteros y derribar incluso las fortificaciones más resistentes.

El monstruoso Karl-Gerät hoy. Imagen de Alan Wilson CC BY-SA 2.0.

Fondo

En la década de 1930, las líneas fortificadas como la Línea Maginot y la Línea Siegfried todavía tenían un gran valor estratégico. Antes de que la Segunda Guerra Mundial demostrara que este tipo de defensas eran obsoletas, los militares invirtieron grandes recursos en formas de combatirlas.

El fabricante de armamento alemán Rheinmetall elaboró ??un concepto inicial en 1936 para una pieza de artillería de gran tamaño que podría usarse contra este tipo de fortificaciones.

Para empezar, Rheinmetall propuso un arma que se transportaría en piezas mediante vehículos de orugas y se ensamblaría en un lugar de disparo adecuado.

Había muchos problemas obvios con esto, como su complejidad y vulnerabilidad al ataque, por lo que se solicitó a Rheinmetall una pieza de artillería autopropulsada.

La Línea Maginot era una gran fortificación construida para disuadir a Alemania de invadir Francia. Imagen de Morten Jensen CC BY 2.0.

El desarrollo continuó durante el resto de la década de 1930, con la participación intensa del general de artillería Karl Becker. Sus contribuciones llevaron al vehículo a recibir su apodo.

Se realizó una maqueta y se utilizó un Neubaufahrzeug para probar la movilidad del vehículo previsto.

En 1940 se habían realizado pruebas de incendio y había comenzado la construcción. Como sólo se planeó un lote muy pequeño, cada uno se construyó a mano entre 1940 y 1942.

Su naturaleza artesanal hacía que cada Karl-Gerät fuera ligeramente diferente del anterior. Se construyeron siete en total y recibieron los nombres “Adam” (rebautizado como “Baldur”), “Eva” (rebautizado como “Wotan”), “Thor”, “Odin”, “Loki” y “Ziu”. El séptimo vehículo fue retenido para pruebas y nunca recibió nombre.

El Karl-Gerät también era conocido como Mörser Karl.

Karl Gerät

Al estilo típico de la ingeniería alemana de la Segunda Guerra Mundial, el Karl-Gerät fue un caso de "hazlo a lo grande o vete a casa".

Para soportar un arma tan grande, el chasis del Karl-Gerät tenía que ser igualmente masivo. Medía 11,15 m (36 pies 7 pulgadas) de largo, 3,16 m (10 pies 4 pulgadas) de ancho y más de 4 metros de alto.

En la parte superior de este gran casco estaba el mortero, que tenía 600 mm de diámetro. Esto podría disparar un proyectil perforador de hormigón pesado que pesaba 2.170 kg o un proyectil perforador de hormigón ligero que pesaba 1.700 kg.

La tripulación carga un proyectil de 600 mm en el Karl-Gerät "Ziu".

El pesado proyectil podría alcanzar objetivos a 4.300 metros de distancia y atravesar al menos 2,5 metros (8,2 pies) de hormigón o dejar un cráter de 5 metros de profundidad y 15 metros de ancho.

El arma tenía una elevación vertical de 0 a 70 grados y un recorrido horizontal de sólo 4 grados en cada lado. Sin embargo, esto podría aumentarse girando todo el chasis.

Tres vehículos (designados Karl-Gerät 041) estaban equipados con un mortero más pequeño de 540 mm que tenía mayor alcance. A pesar de pesar menos, los proyectiles de estos morteros podían penetrar 3,5 metros (11,5 pies) de hormigón.

Un proyectil de dos toneladas de un Karl-Gerät alcanza el edificio Prudential en Varsovia.

Todo el Karl-Gerät pesaba 140 toneladas, lo que lo convertía en la pieza de artillería autopropulsada más pesada de la guerra. Su peso estaba soportado por una suspensión de barra de torsión.

Según el ejemplo exacto, estaban propulsados ??por un motor de gasolina MB 503 A o un motor diésel MB507. Estos motores proporcionaban más de 500 caballos de fuerza, pero sólo podían llevar a la bestia de 140 toneladas a una velocidad máxima de aproximadamente 4 mph.

La gran máquina sólo estaba cubierta por suficiente armadura para proteger a su tripulación del fuego de armas pequeñas, y ciertamente no estaba a la altura de la tarea de defenderse contra ningún armamento antitanque.

Tripulación junto al enorme cañón de 600 mm del Karl-Gerät.

El Karl-Gerät era lento, pesado y vulnerable y necesitaba enormes cantidades de apoyo para moverse y operar.

Nunca se pretendió que fuera una máquina verdaderamente móvil, sino que debía ser transportada y ensamblada antes de aplastar cualquier cosa que estuviera a su alcance. Y esto es lo que Karl-Gerät hizo bien.

Una pesadilla logística

Si bien el Karl-Gerät era técnicamente artillería móvil, su capacidad para moverse por sus propios medios era poco más que una conveniencia.

Era tan lento y pesado que conducir este artilugio a más de unos pocos kilómetros seguidos era simplemente poco práctico. Para desplazarlo entre posiciones de tiro más alejadas, el Karl-Gerät fue transportado en tren.

El vehículo tuvo que ser preparado para el transporte, lo que implicó ser parcialmente desmontado con la ayuda de una grúa de 39 toneladas. Luego, el chasis y sus siete cargas se cargaron en un tren que lo trasladaría al siguiente lugar de tiro.

Karl-Gerät durante su transporte ferroviario.

Incluso después de llegar a este lugar, no se trataba simplemente de descargar el Karl-Gerät y empezar a disparar.

Su enorme longitud y su gran peso lo convertían en una pesadilla en terrenos blandos y fácilmente podía atascarse o desviarse al girar.

Por eso, antes de que llegara el Karl-Gerät, había que nivelar con precisión su posición de disparo y rellenar los puntos blandos o los agujeros.

Dependiendo de la situación, la zona también estaría equipada con líneas de comunicación y protegida por defensas antiaéreas.

En el lugar, el mortero iría acompañado de dos o tres Munitionsschleppers hechos a medida, que significa "transportadores de municiones".

Un Munitionsschlepper construido a partir del chasis de un Panzer IV junto a un mortero de 540 mm.

Se trataba de cascos de Panzer IV muy modificados cuyas torretas fueron reemplazadas por una superestructura capaz de transportar cuatro proyectiles para el Karl-Gerät.

Toda la operación requirió cientos de hombres para ejecutarla.

Sólo cuando la zona estuvo preparada y el Karl-Gerät listo se pudo disparar el arma. La velocidad de disparo fue de aproximadamente un disparo cada diez minutos.

Los seis morteros operativos Karl-Gerät se utilizaron en algunas ocasiones a lo largo de la guerra, y sus acciones más notables tuvieron lugar en la Batalla de Sebastopol y en el Levantamiento de Varsovia.

El único Karl-Gerät superviviente, "Ziu", que aparece como "Adam".

Al final de la guerra, las seis máquinas habían sido capturadas o destruidas. Eva, Loki y el séptimo mortero experimental Karl-Gerät fueron capturados por Estados Unidos. El ejemplo experimental fue enviado a los EE. UU. y lamentablemente desechado.

Odín y Ziu fueron capturados por los soviéticos, pero el paradero de Thor y Adam sigue siendo un misterio.

Ziu es el único superviviente y se puede ver en exhibición en el museo de tanques Kubinka en Rusia.