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lunes, 17 de marzo de 2025

Biografía: Nicolás Mihanovich

Empresario Nicolás Mihanovich

Argentina en la Memoria


otografía que retrata al empresario croata-argentino Nicolás Mihanovich (1846-1929), quien fuera el empresario naviero más importante de la Argentina, dominando el mercado en el Río de la Plata entre las décadas de 1880 y 1920. En octubre de 1900, la revista Caras y Caretas decía sobre el retratado: "El señor Mihanovich, que vino a estas playas sin otro capital que su actividad y su inteligencia, es un caso elocuente que puede presentarse a nuestras generaciones nuevas para animarlas a la acción".



Mihanovich nació el 21 de enero de 1846 en el pueblo de Doli, entonces parte del Reino de Dalmacia dentro del Imperio Austríaco, en el seno de una familia de marineros. A temprana edad comenzó a navegar por los mares Mediterráneo y Negro. Luego extendió sus viajes al Océano Atlántico, y en 1864, a los veinte años de edad, llegó al Río de la Plata, desembarcando en Montevideo como tripulante de la embarcación británica “City of Sydney”. En un primer momento se instaló en el Alto Paraná (Paraguay) y se dedicó al transporte fluvial, trasladando a las tropas del Ejército Aliado que participaban en la guerra de la Triple Alianza.




Para 1868 había reunido el suficiente capital y había emprendido el viaje para regresar a su pueblo natal, pero al parar en una hostería de Buenos Aires, administrada también por un croata, fue convencido de quedarse en la ciudad. En Buenos Aires conoció y comenzó a trabajar para la empresa de un genovés llamado Juan Bautista Lavarello, quien también se dedicaba al transporte fluvial. En esos tiempos el Río de la Plata tenía una ribera de muy poca profundidad, y debido a ello las embarcaciones tenían que anclarse a más de 300 metros de la costa, y las tripulaciones y cargas tenían que ser acercadas a la ciudad en botes o en carros tirados por animales. De tal forma, Mihanovich y Lavarello consiguieron un acuerdo con el gobierno nacional y comenzaron a encargarse del traslado de los pasajeros en ese corto recorrido, en el momento de las oleadas de inmigrantes europeos que llegaban al país.



Lavarello había vendido su barco y comprado un remolcador y seis embarcaciones menores, para comenzar a trabajar en el trasbordo de pasajeros y cargas de los buques de ultramar que fondeban en Buenos Aires pero al poco tiempo de comenzar con el negocio de traslado de pasajeros, fallece el 23 de mayo de 1869 debido a un accidente en el río cerca de las costas del Uruguay. Debido a esto, la viuda de Lavarello, la también genovesa Catalina Balestra, queda viuda con cuatro niños y con la compañía de su marido a cargo.



Balestra acude a Mihanovich para que se hiciera cargo del negocio y acuerdan una sociedad. En julio de 1872, al poco tiempo de esto, Mihanovich y Balestra contraen matrimonio, y con los años tendrían juntos seis hijos propios, sumados a los cuatro que ella ya tenía con Lavarello. Hacia 1875, Mihanovich había comprado la empresa Matti y Piera (quedandose con sus tres remolcadores: el Kate, el Jenny y el Buenos Aires), había comprado otro remolcador, el Feliz Esperanza y un nuevo vapor, el Rivadavia. Además para ese entonces se había quedado con el negocio de trasbordo de pasajeros a Buenos Aires, ya que le ofrecía a las autoridades estatales un precio más bajo por cada pasajeros transportado, a lo que sus competidores no pudieron reaccionar. También en esos años, Mihanovich trajo a la Argentina a dos de sus hermanos: Bartolomé de catorce años y Miguel de doce años.



Con estos nuevas embarcaciones, Mihanovich reunió una pequeña flota. Para progresar, no obstante, necesitaba capital, por lo que asoció a otros dos croatas, Gerónimo Zuanich y Octavio Cosulich, para crear la Nicolás Mihanovich y Cía., empresa de la que poseía el 50% de las acciones. Instalaron las oficinas en un estudio alquilado en Cangallo y 25 de Mayo, y Elías Lavarello, su hijastro, fue designado contador de la naviera. Con esos aportes, la empresa se planteó nuevos desafíos y, coincidiendo con la campaña de Roca al Desierto, adquirió el primer vapor de importancia, el Toro, de 600 toneladas, para iniciar un tráfico costero. Con el Toro la empresa transportaba pertrechos, víveres y elementos varios, en principio hasta Bahía Blanca, alcanzando luego Carmen de Patagones, Viedma y Rawson. Para esos años, Mihanovich se había convertido en una de las personas más ricas de la Argentina y también era el hombre fuerte de la colectividad austrohúngara en el país, fundando en 1878 la Sociedad Yugoslava de Socorros Mutuos.




El primer servicio de pasajeros brindado por La Mihanovich con un pequeño vapor, entre Buenos Aires y el Uruguay (a Colonia y Carmelo), comenzó a funcionar con regularidad en 1887. En esos años gobernaba el país Miguel Juárez Celman y para el año 1889, una gran crisis sacudiría la economía argentina y sus empresas. En la debacle, numerosas empresas medianas debieron desprenderse de sus activos para evitar la quiebra o cubrir sus obligaciones. Mihanovich, cuya posición seguía siendo sólida, al ejercer, entre otras actividades, el monopolio del control sanitario de inmigrantes, adquirió una importante cantidad de embarcaciones por mucho menos que su valor real.




A la par de sus principales competidores, las mensajerías del francés Saturnino Ribes y Domingo Giuliani, Mihanovich encargó nuevas embarcaciones al astillero escocés A. J. Inglis, que botó con nombres significativos: Austria y Dalmacia. Y en pocos años, gracias a su astucia, logró desembarazarse de sus rivales. La pulseada con Ribes se jugó, básicamente, en aguas del Paraná, donde navegaban lujosos vapores fluviales. El negocio del transporte de pasajeros -así como el de cargas de productos del Norte y el Noreste (azúcar, yerba, algodón, tanino) consistía en coordinar el transporte fluvial hasta Buenos Aires con el ferroviario, hasta el ingenio, el quebrachal o la plantación. Una de las empresas pioneras fue la británica Platense Flotilla Co., de los armadores “Paddy” Henderson y William Denny, que sucumbió en poco tiempo y permitió a Mihanovich comprar a precio de remate una verdadera armada conformada por 118 barcos en arrendamiento, de los cuales 37 eran vapores a rueda y 22, vapores a hélice.



La Platense había terminado en la bancarrota luego de competir con la empresa de Ribes de las formas más desleales. En 1910, La Nación comentaría aquella extraña situación, que se producía:



Después de algunas ventas y transacciones de las empresas fluviales, siempre tendientes a cerrarles el paso a los rivales, en 1896 Mihanovich entró en escena y adquirió a muy bajo costo La Platense Flotilla y el astillero Denny. Con una inversión de solo 92.000 libras dio un primer paso para ingresar en el trasporte fluvial, tarea que completó dos años después, cuando adquirió por 40.000 libras la flota de Giuliani. De ese modo, puso bajo bandera argentina toda la flota y ofreció a los tripulantes extranjeros continuar su labor en la nueva empresa, a la que convirtió en una sociedad colectiva. Los hermanos Elías, Luis y Juan Lavarello, y el resto de hijos e hijastros varones, se incorporaron en diversas funciones ejecutivas y de conducción. Para poner fin a una guerra inconveniente, Nicolás Mihanovich llegó a un entendimiento con Saturnino Ribes dividiendo los negocios: en adelante, él se reservaba el río Paraná, y las Mensajerías Fluviales del Plata tendrían la exclusividad sobre el Uruguay.



Un golpe de suerte sellaría entonces, y definitivamente, el futuro del croata. Poco después del “pacto”, Ribes falleció y sus herederos, en 1900, decidieron salir del negocio y vender la empresa. Mihanovich incorporó lo que constituía “una flota impresionante, de estupendos barcos de pasajeros”, de última generación. Aprovechando las disputas entre herederos, apuró la compra en 450.000 libras, la mitad de lo que la había valuado en vida su dueño. Completó la operación adquiriendo una serie de pequeñas empresas y unidades sueltas, y en poco tiempo se convirtió en el armador más poderoso de la Argentina, con el plus de ejercer, prácticamente, el monopolio del transporte fluvial.



Poco antes, había convertido su empresa en la Sociedad Anónima de Navegación Nicolás Mihanovich, a la que transfirió todo los bienes, equipos e inmuebles. Nicolás era presidente del nuevo consorcio; Elías Lavarello, su vicepresidente y el directorio se completaba con cuatro vocales: Juan y Luis Lavarello y Pedro y Nicolás Mihanovich (h). Carlos Lavarello asumió como jefe de los talleres de reparación, que eran tres: Riachuelo, Salto y Carmelo.



La primera década del nuevo siglo, en efecto, fue testigo de un impresionante desarrollo de la empresa, con la construcción de nuevos barcos en astilleros británicos, compras locales e internacionales. En un plano institucional y legal, el proceso fue acompañado por una nueva legislación que reservaba el cabotaje a los barcos de bandera nacional y, en 1905, a la fundación del Centro de Cabotaje Nacional que, con las sucesivas presidencias de don Nicolás y su hermano Miguel se convertiría en el Centro de Cabotaje y Marítimo Argentino. En 1910, con la decidida actuación del diputado Adolfo Saldías, se sancionó la ley de cabotaje 7049, que constituyó un hito de tenor proteccionista.



Al sancionarse la ley de cabotaje, el tráfico en el mar Argentino se incrementó y la empresa, dando especial importancia a ese sector, adquirió el carguero Centenario. En esas aguas existía una animada competencia: estaban los barcos de su hermano Miguel (que había constituido la empresa naviera "Sud América S.A."), los de la armadora alemana Hamburg Sud que representaba Antonio Delfino, la propia Armada Nacional (que recorría la costa con el Guardia Nacional, el Chaco y el Pampa) y La Anónima de José Menéndez Menéndez.



En 1908, la empresa ordenó la construcción de dos nuevos vapores de pasajeros, el Guarany y el Lambaré, con el objeto de mantener un servicio a Asunción incluso en épocas de bajante, y se consolidó el tramo “de la Costa Sud” con diversos barcos y cargueros (Sarmiento, Avellaneda, Pellegrini, Rawson), reforzando, además, el servicio de apoyo para la construcción de ferrocarriles en la Patagonia. En 1907 estableció un servicio de embarcaciones que remontaban el Río Paraná, llevando a visitantes a conocer las Cataratas del Iguazú. Dando comienzo con el turismo hacia esa zona del país. En 1909, la flota reunía 256 barcos y sumaba cerca de 70.000 toneladas.




Nicolás Mihanovich tenía iniciativas de otra índole. En 1905 mandó construir, por ejemplo, el Palace Hotel, levantado en Cangallo (actual Presidente Perón) y Leandro Alem. Era una lujosa y refinada residencia, con confitería en la terraza y salones plagados de mármoles y bronces, que alojaría nada menos que a la infanta Isabel de Borbón durante los festejos del Centenario. Los ingresos provenían de múltiples inversiones: intervino en la explotación del quebracho, en la producción y la exportación de cueros; participó en la fundación del frigorífico La Blanca; impulsó negocios con los ingenios azucareros salteños. También apoyó las nuevas colonias de inmigrantes, como la de los suizos, que fundaron Colonia Dalmacia en Formosa, en tierras de su hijo Pedro. En el campo social, continuó su gestión en la Mutual Austrohúngara y colaboró activamente con el recientemente fundado Patronato de la Infancia. Además fue director del Banco de Italia y del Río de la Plata, desde 1902 a 1915.





En 1909, la empresa se amplió bajo el nombre de “Sociedad Argentina de Navegación Mihanovich” para poder conseguir financiamiento de capitales extranjeros. Esta fue una compañía anglo-argentina con directorio en Londres y Buenos Aires, ambos presididos por Nicolás.



Por su trayectoria, el emperador austrohúngaro Francisco José I lo nombró cónsul honorario en 1899, al cual se sumó en 1913 el título de barón con derecho sucesorio. La Gran Guerra dejó a Mihanovich en una posición incómoda, debido a que su empresa jurídicamente era parte inglesa y a que él servía como diplomático de un país en guerra con el Reino Unido. Para empeorar la situación, habían muerto dos de sus hijos menores (Adolfo y Aquiles) por enfermedad y accidente, y también su esposa, Catalina; y dos hombres del equipo íntimo, Elías Lavarello y su hijo Bartolo, dejaron la empresa para instalarse en Génova, involucrados también en el negocio naviero.



En los dos primeros años de la contienda, por primera vez la empresa arrojó resultados negativos que motivaron serias disminuciones en los sueldos de los tripulantes, clausura de talleres y, a la vez, brindaron una oportunidad, ya que los países en conflicto pagaban por las embarcaciones precios muy superiores al valor real. Ambas cuestiones combinadas permitieron la recuperación financiera y, en 1916, el definitivo traspaso de la empresa a los capitales ingleses. The Argentine Navigation Company (Nicolás Mihanovich) Limited tenía, a fines de 1915, cerca de 5.000 empleados, muchos de ellos de origen dálmata, y una flota de 324 unidades, con 45 vapores de pasajeros y 27 vapores de carga, 70 remolcadores, lanchas, pontones y chatas, además de dos grúas flotantes y los talleres de reparación.



A la vez, Mihanovich extendía su imperio a los más diversos rubros, con participación accionaria en Campos y Quebrachales de Puerto Sastre, Grandes Molinos Porteños, Introductora de Productos Austrohúngaros, Banco de Italia y Río de la Plata, la Positiva, Frigorífico La Blanca y la Compañía de Seguros Riesgo y Vida, entre las más destacadas. En 1916, Mihanovich se retiró de la presidencia de ambos directorios de su empresa naviera, y a mediados de 1917 los Mihanovich y los Lavarello se desprendieron definitivamente de sus acciones, por un valor de 1.450.000 libras, siendo vendidas al argentino Alberto Dodero y al magnate británico Owen Phillips. La empresa fue, en adelante, enteramente inglesa, aunque durante años siguió llamándose The Argentine Navigation Company (Nicolás Mihanovich) Limited.



Una vez retirado, se distinguió también como filántropo. En su patria, modernizó su ciudad natal de Doli dotándola de servicios sanitarios, y de otras mejores edilicias, creando con su hermano Miguel allí una fundación. Mihanovich participó en todo tipo de obras sociales, formando parte del directorio del Patronato de la Infancia, de la Liga Argentina de la Tuberculosis, así como del centro naval, de la Sociedad de Educación Industrial y en el Edificio Otto Wulf, en el cual invirtió dinero. En 1925, participó de la colecta de la Unión Católica Popular Argentina, que llevó adelante una colecta para construir viviendas obreras. Resultado de ello es el Barrio Mihanovich, que se encuentra en Parque Avellaneda.



En 1925 financió la construcción del Edificio Mihanovich ubicado en el barrio de Retiro. Fue encargado a la compañía de dos compatriotas suyos, los Hermanos Bencich, la construcción de la torre que diseñaron los arquitectos Héctor Calvo, Arnoldo Jacobs y Rafael Giménez. Uno de sus últimos emprendimientos fue la financiación para la construcción del Edificio Bencich en el barrio de Retiro, cuyo arquitecto fue el reconocido Eduardo Le Monnier, que fuera terminado en 1929 pero que Nicolás no pudo llegar a verlo finalizado. Nicolás Mihanovich falleció en Buenos Aires, el 24 de junio de 1929, a los 83 años de edad.





jueves, 9 de noviembre de 2023

Polonia: El levantamiento el Gueto de Varsovia de 1943

Levantamiento del Gueto de Varsovia 1943

Weapons and Warfare




Parte de la Solución Final, el genocidio de los judíos de Europa en el Holocausto, implicó el establecimiento de guetos en los territorios ocupados por los alemanes en los que los judíos fueron confinados hasta que pudieran ser enviados a campos de concentración y exterminio. El gueto de Varsovia, dentro del antiguo barrio judío de la ciudad, fue cercado primero por alambre de púas y luego por un muro de ladrillos. Para el verano de 1942, alrededor de medio millón de judíos se apiñaban en los 840 acres del gueto. El hambre, las privaciones y las enfermedades epidémicas mataban a miles cada mes.

A partir del 22 de julio de 1942, 5.000 judíos por día fueron trasladados del gueto al campo de exterminio de Treblinka. En septiembre, solo quedaban unos 55.000 judíos en el gueto de Varsovia. Al darse cuenta de que su situación era desesperada, los que quedaron decidieron resistir. No tenían esperanza de una victoria militar, pero decidieron que era mejor luchar que someterse pasivamente al exterminio. Se formó la Organización de Lucha Judía (ydowska Organizacja Bojowa, OB) y tomó el control del gueto de forma encubierta. El 9 de enero de 1943, el jefe de las Schutzstaffel (SS), Heinrich Himmler, ordenó la deportación de 8.000 judíos. La orden se encontró con resistencia, ya que muchos se negaron a informar según lo ordenado, y los combatientes de ZOB comenzaron a disparar a las tropas alemanas. Bajo fuego, los procedimientos de deportación fueron cancelados y, muy alentados,

El 19 de abril de 1943, unas 3000 tropas alemanas bajo el mando del general de brigada de las SS Jürgen Stroop, incluidas 2600 tropas de las SS, así como soldados y policías del ejército regular, atacaron el gueto con tanques y otros vehículos blindados, así como con ametralladoras y artillería. Frente a ellos se encontraban unos 600 combatientes del ZOB y 400 de otro grupo, la Unión Militar Judía (ZZW). Desde posiciones bien preparadas, los judíos lucharon con una ametralladora, pistolas, granadas de mano y cócteles molotov. Los aproximadamente 600 combatientes activos de la ZOB, que tenían solo una ametralladora y 17 rifles entre ellos, pero muchos cócteles molotov, infligieron bajas significativas a unos 2.000 SS que se trasladaron metódicamente al gueto. A los combatientes de ZOB se unieron 400 más de Zydowski Zwiazek Wojskowy (ZZW), o “Unión Militar Judía”. La lucha feroz y despiadada continuó durante varias semanas. El 8 de mayo, el búnker del cuartel general de ZOB ubicado en Mila 18 cayó en manos de las SS. Al final, casi todos los miembros de la ZOB fueron asesinados, y ellos mismos mataron a unos 300 alemanes. Stroop se sorprendió por la ferocidad y la organización de la resistencia. Se vio obligado a luchar en las calles del gueto todos los días, y finalmente declaró seguro el gueto el 16 de mayo, aunque la resistencia continuó.

El Ejército Nacional Polaco y otros combatientes de la resistencia polaca intentaron sin éxito romper los muros del gueto con la esperanza de proporcionar una ruta de salida para los judíos. Aquellos combatientes judíos que no murieron en combate se suicidaron o fueron capturados; sin embargo, 50 combatientes de la ZOB escaparon por las alcantarillas. El levantamiento mató a 14.000 judíos, muchos de ellos víctimas de incendios provocados. Siete mil supervivientes fueron asesinados en Treblinka. Otros fueron enviados al campo de Majdanek, donde corrieron la misma suerte. Las bajas alemanas no se calcularon oficialmente, pero probablemente incluyeron 400 muertos y 1000 heridos.

El levantamiento de Varsovia enfureció a Hitler, aunque no fue el único que ocurrió en los guetos judíos. Se convirtió en un símbolo permanente de resistencia para los judíos de todo el mundo, plasmado en el lema de lucha “¡Nunca más!”.

Jürgen Stroop

(1895 - 1952) SS-Gruppenführer und Generalleutnant der Waffen-SS und Polizei: [Cambió su nombre de Josef, 05.1941, en recuerdo de su hijo fallecido.] Nacido: 26. 09. 1895 en Detmold / Lippe Ahorcado: 6. 03 1952 en el antiguo emplazamiento del gueto de Varsovia, después de la sentencia de muerte de un tribunal polaco.

SSPF “Warschau”: 19.04.1943 – 13.09.1943[Nombrado para suceder al SS-Oberf. Dr. Ferdinand von Sammern-Frankenegg, que había fracasado en los intentos iniciales de sofocar el levantamiento de los rebeldes de ZOB en Varsovia. Entre el 19 de abril de 1943 y el 16 de mayo de 1943, Stroop lideró una fuerza mixta de unidades de entrenamiento/reemplazo de las Waffen-SS, fuerzas policiales alemanas y polacas, ingenieros del ejército alemán y varias unidades de guardia letonas, ucranianas y lituanas en la aniquilación de Varsovia. Ghetto. Al cerrar su “gran operación”, el propio Stroop empujó el émbolo que detonó cargas explosivas dentro de la sinagoga central de Varsovia. Informó sobre esta operación en una serie de mensajes de teletipo diarios al HSSPF “Ost” en Cracovia, SS-OGruf.u.Gen.d.Pol. Friedrich-Wilhelm Krüger; estos mensajes finalmente se compilaron en un informe completo, junto con docenas de fotos, titulado “Es gibt keinen jüdischen Wohnbezirk~ in Warschau mehr! ” (“El Barrio Judío de Varsovia ya no existe”). Pudo informar lo siguiente el 16 de mayo de 1943: “180 judíos, bandidos e infrahumanos fueron destruidos. ¡El barrio judío de Varsovia ya no existe! La gran operación terminó a las 20:15 horas cuando la sinagoga de Varsovia fue volada”. El “Informe Stroop” fue utilizado como prueba por la acusación en el Tribunal Militar Internacional de Nuremberg, y llevó al acusado Generaloberst Alfred Jodl a decir con desdén: “¡Los sucios y arrogantes cerdos de las SS! Imagínese escribir un informe jactancioso de 75 páginas sobre una pequeña expedición asesina, cuando una gran campaña librada por soldados contra un ejército bien armado toma solo unas pocas páginas”.] La gran operación terminó a las 20:15 horas cuando la sinagoga de Varsovia fue volada”. El “Informe Stroop” fue utilizado como prueba por la acusación en el Tribunal Militar Internacional de Nuremberg, y llevó al acusado Generaloberst Alfred Jodl a decir con desdén: “¡Los sucios y arrogantes cerdos de las SS! Imagínese escribir un informe jactancioso de 75 páginas sobre una pequeña expedición asesina, cuando una gran campaña librada por soldados contra un ejército bien armado toma solo unas pocas páginas”.] La gran operación terminó a las 20:15 horas cuando la sinagoga de Varsovia fue volada”. El “Informe Stroop” fue utilizado como prueba por la acusación en el Tribunal Militar Internacional de Nuremberg, y llevó al acusado Generaloberst Alfred Jodl a decir con desdén: “¡Los sucios y arrogantes cerdos de las SS! Imagínese escribir un informe jactancioso de 75 páginas sobre una pequeña expedición asesina, cuando una gran campaña librada por soldados contra un ejército bien armado toma solo unas pocas páginas”.]

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Unidades alemanas en la lucha en el gueto de Varsovia SS-Gruppenführer und Generalleutnant der Polizei Jürgen Stroop era SSPF para Varsovia en ese momento y nada que ver con las Waffen-SS. Estaba a cargo de todas las tropas de las SS y de seguridad, incluidas algunas tropas de las Waffen-SS, en el Distrito de Varsovia, que formaba parte del Generalgouvernement. Fue vice Ferdinand Sammern-Frankenegg en 1943.

La fuerza alemana estaba compuesta por unos 2100 hombres bajo el mando del General Stroop, que eran un grupo ad hoc de

228 policía de seguridad alemán

381 Batallón de reserva de entrenamiento Panzer-Grenadier

355 milicianos lituanos

Batallón de reserva de caballería 440 SS

78 zapadores

24 artilleros AA ligeros

2 carros blindados

355 bombero lituano

363 policías polacos

166 bombero polaco

Las fuerzas utilizadas en la liquidación del Gueto fueron las siguientes:

Waffen SS:

* SS-Panzer-Grenadier-Ausbildungs- und Ersatz-Bataillon 3 Warschau (SS-Pz. Gren. Ausb. u. Ers. Btl. 3/SS Panzer Grenadier Training and Reserve Battalion Nr. 3, Varsovia); 4 oficiales/440 hombres

* SS-Kavallerie-Ausbildungs- und Ersatz-Abteilung Warschau (SS-Kav.-Ausb.-u. Ers.-Abt./SS Batallón de Reserva y Entrenamiento de Caballería, Varsovia); 5 oficiales/381 hombres

Ordnungspolizei:

* I. Btl./SS-Polizei-Regiment 22 (I./SS-Pol.-Rgt. 22) (Regimiento de Policía de las SS No. 22, 1er Batallón)

*III. Btl./SS-Polizei-Regiment 22 (III./SS-Pol.-Rgt. 22) (Regimiento de Policía de las SS No. 22, 3er Batallón)

* Technische Nothilfe (Cuerpo Técnico de Emergencia); 1 oficial/6 hombres

* polnische Polizei (Policía polaca); 4 oficial/363 hombres

* polnische Feuerlöschpolizei (Cuerpo de Bomberos Polaco); 166 hombres

Sicherheitspolizei (Policía de Seguridad): 3 oficiales/32 hombres

Wehrmacht:

* Leichte Flakalarmbatterie III/8 Warschau (Batería de alarma antiaérea ligera No. III/8, Varsovia)

* Pionierkommando der Eisenbahn; 2 oficiales / 22 hombres Panzerzug-Ersatz-Abteilung Rembertow (Detalle de ingenieros del Batallón de reserva del tren blindado ferroviario Rembertow); 2 oficiales/42 hombres Reserva-Pionier-Bataillon 14 Gora-Kalwaria (Batallón de Ingenieros de Reserva No. 14, Gora-Kalwaria); 1 oficial/34 hombres

Fremdvölkische Wachmannschaften (Unidades de la Guardia Étnica Extranjera):

* Un (1) Bataillon Trawnikimänner (1 batallón de hombres del campo de entrenamiento de Trawniki; 2 oficiales/335 hombres

Fuente: Es gibt keinen jüdischen Wohnbezirk- in Warschau mehr (“¡El barrio judío de Varsovia ya no existe!” Informe de Jürgen Stroop sobre la “Gettoaktion” en Varsovia)

Lectura adicional: Gutman, Israel. Resistencia: El levantamiento del gueto de Varsovia. Nueva York: Mariner Books, 1998; Kurzmann, Dan. La batalla más valiente: los veintiocho días del levantamiento del gueto de Varsovia. Nueva York: Da Capo, 1993.

miércoles, 8 de noviembre de 2023

SGM: Un ángel en manos de asesinos

Asesinos de la peor calaña



Istvan Reiner, un niño de 4 años, posa para un retrato. Fue asesinado poco después de que se tomara esta foto en el campo de concentración de Auschwitz.

No se sabe mucho sobre Reiner, excepto que fue enviado con su abuela a Auschwitz poco después de que se tomara esta fotografía y fue gaseado en la cámara de gas.

Las mujeres y los niños solían ser gaseados al llegar al campamento. A los hombres a veces se les evitaba realizar trabajos físicos, como trabajos industriales, mineros o agrícolas. Las víctimas fueron conducidas a cámaras de gas y se les dijo que se iban a duchar. En cambio, se despojó a la gente de sus ropas y artículos y se metió en habitaciones donde se liberó gas venenoso, matando a todos los que estaban dentro. Luego, los cuerpos fueron incinerados y, a veces, las cenizas se usaron como fertilizante para cultivos consumidos por humanos.

Reiner es solo un ejemplo de los cientos de miles de niños que fueron asesinados durante este tiempo de la historia.

lunes, 2 de octubre de 2023

Judaísmo: La secta esenia

 La secta Esenia



Los esenios (del griego «εσσηνοι», «εσσαιοι» u «οσσαιοι»; essenoi, essaioi, ossaioi) eran los miembros de una secta judía, establecida probablemente desde mediados del siglo II a. C. tras la Revuelta Macabea, y cuya existencia hasta el siglo I a. C. está documentada por distintas fuentes. Sus antecedentes inmediatos podrían estar en el movimiento hasideo, de la época de la dominación seléucida (198 a 142 a. C.).

Nombre

Sobre el origen de la palabra «esenio» se han tejido varias hipótesis: puede provenir del vocablo griego «ὅσιος» (ossios: ‘santo’, ossa: ‘santos’), o ser una referencia al griego hasidei (‘piadosos’), en arameo hesé. Escritos árabes se refieren a ellos como magaritas (‘de las cuevas’). Se ha propuesto que el nombre proviene del hebreo asaim (עשים), esto es "hacedores", ya que ellos decían "si la Toráh lo dice, lo hacemos", del verbo hacer=laasot (לעשות), y del plural en masculino=im (ים), que en griego era «εσσηνοι» (essenoi), «εσσαιοι» (essaioi) u «οσσαιοι» (ossaioi). Se sostiene también que el nombre proviene de la palabra siriaca "Asaya", médicos; en griego, terapeutas; porque su único ministerio, para el público, era el de curar las enfermedades físicas y morales. "Estudiaban con gran cuidado, dice Josefo, ciertos escritos de medicina que trataban de las virtudes ocultas de las plantas y de los minerales" (referencia: Edouard Schuré. Los grandes iniciados. pag. 318).

Documentos

Durante mucho tiempo fueron conocidos solo por las referencias de autores antiguos, tales como Plinio el Viejo, ​ Flavio Josefo,​ Filón, Dión Crisóstomo, Hipólito de Ostia y Epifanio de Constancia, aunque para algunos estudiosos, los esenios eran un grupo de ascetas que vivían aislados en comunidades separadas. Probablemente la mayoría de los varios miles de miembros del credo vivían en pueblos y ciudades​ y una importante comunidad esenia vivía en Jerusalén,​ en cuyas murallas se encontraba la «puerta de los esenios», que ha sido encontrada ya por los arqueólogos.​

La Comunidad




Qumrán.


Tras la Revuelta Macabea (166-159 a. C.), que habían apoyado pero cuyos resultados finales no compartieron, se retiraron al desierto para «preparar el camino del Señor», bajo el mando de un nuevo líder, el Maestro de Justicia.

Si alguien deseaba ser miembro de la comunidad (yahad) debía ser instruido, aceptado y luego pasar tres años de prueba para ingresar definitivamente. A los que hacían el juramento y entraban en la comunidad se les exigía una vida entera de estudio de la Ley, humildad y disciplina. No volvían a jurar, pues estaban obligados a decir siempre la verdad. Sus bienes pasaban a ser parte de toda la comunidad y, al igual que los frutos del trabajo personal, se distribuían según las necesidades de cada uno, dejando una parte para auxiliar a pobres, viudas, huérfanos, mujeres solteras de edad, desempleados, forasteros y esclavos fugitivos que, sin ser integrantes de la comunidad, requirieran ayuda. Se imponía también la observancia de un estricto código de disciplina, cuya base era la corrección fraterna mutua. ​ Por lo general, las mujeres eran aceptadas dentro de la comunidad, y los hombres practicaban el celibato toda su vida, aunque según Josefo, una parte de los esenios sí permitían el matrimonio​ y entre las normas de Qumrán se reconoce claramente la opción de casarse, pero se exige monogamia estricta para todas las personas, incluso los reyes.

Administraban la interpretación última de la Ley que había sido revelada a su fundador, a quien se hace referencia en sus escritos como el Maestro de Justicia. Este personaje, del que se especula más gracias a los manuscritos del Mar Muerto, actuó hacia el 150 a. C. y se habría opuesto al ordenamiento como Sumo Sacerdote de Jonatán Macabeo, hermano de Judas Macabeo, al considerar que había abandonado la fidelidad a Dios. Es probable que este rechazo se debiera a que el líder opositor haya sido un sacerdote sadoquita, quien consideraba ilegítimo al pontificado asmoneo. Sus seguidores marcharon a Qumrán, sitio que los integrantes de la comunidad llamaron Damasco. La arqueología muestra que la ocupación de Qumrán fue intensa del 103 al 76 a. C., durante los reinados de Aristóbulo I y Alejandro Janeo, quienes persiguieron cruelmente a sus opositores.

El esenismo no se limitó a Qumrán. Se sabe que en el siglo I en Jerusalén había un barrio esenio. Muchos esenios ―unos 4000, según Flavio Josefo―, vivían en las ciudades, de una forma particular, pacifista, en comunidad de bienes, manifestando su doctrina. Según este autor, parte de los esenios no se casaban, pero otros por el contrario sí lo hacían. Entre estos últimos estaban los de Qumrán, que debían contraer matrimonio a la edad de 20 años.

La comunidad de Qumrán se autosostenía con los trabajos agrícolas. En las ruinas es notable el número de depósitos de agua. Estos eran imprescindibles para las necesidades físicas de la comunidad en medio del desierto, pero también desempeñaban una parte importante de su ritual, que incluía numerosos lavados. Algunos han supuesto que, como los terapeutas egipcios, dentro de sus leyes y deberes los esenios eran vegetarianos, pero no hay absolutamente nada que indique tal cosa en los rollos de Qumrán.

Se ha especulado con que Jesús de Nazaret y Juan el Bautista tenían relación con ellos o incluso pertenecían al credo:

Parece que Juan el Bautista y tal vez también Jesús y su familia fueron cercanos a esta comunidad. En cualquier caso, en los manuscritos de Qumrán hay múltiples puntos de contacto con el mensaje cristiano. No puede descartarse que Juan el Bautista viviera un tiempo en esta comunidad y haya recibido en ella, en parte, su formación religiosa.

Entre ellos se ha querido ver el germen del cristianismo y Ernest Renán llegó a escribir que «el cristianismo fue en gran medida el esenismo triunfante». Quienes niegan la relación entre Jesús y los esenios citan una referencia en el evangelio de Juan 10:22-23, donde se habla de que Jesús asistió a la Fiesta de la Dedicación (o Jánuca), de la cual se cree que los esenios no participaban, por considerar dicha fiesta ilegal, ya que no era ordenada por la Tanaj. Sin embargo, Jesús estaba en Jerusalén desde dos meses antes, cuando había ido a la Fiesta de las Tiendas (Juan 7:2-10).

Respecto a si Jesús perteneció a la congregación de los esenios o compartió sus puntos de vista, se sabe por los evangelios sinópticos que es posible que Jesús haya celebrado la Pésaj (Pascua judía) en la fecha indicada en el calendario seguido en Qumrán, ya que los mismos indican claramente que la última cena fue una celebración de Pascua (Mateo 26:17-19, Marcos 14:12-16, Lucas 22:7-15) y además que la unción de Betania ocurrió dos días antes de la fiesta de los panes sin levadura y la Pascua (Marcos 14:1-9), mientras que el evangelio de Juan indica que la unción de Betania fue seis días antes de la Pascua (Juan 12:1) y Jesús murió el día anterior a la Pascua oficial (Juan 18:28). ​ La Biblia, sin embargo, no menciona el término «esenio»; tampoco se ha encontrado una fuente histórica en hebreo o arameo que designe a alguna comunidad o credo con el nombre griego de «esenios», y los rollos de Qumrán usan designaciones como «comunidad de los santos», «congregación de los pobres» y «asamblea de los numerosos».

Controversias

En el siglo XIX, los esenios fueron popularizados por los escritos del espiritista Allán Kardec (1804-1869) y la teósofa Madame Blavatsky (1831-1891), así como a inicios del siglo XX los escritos de Josefa Luque (1893-1965).

Estudios divulgados entre 1995 y 2009, particularmente los relacionados con el profesor Norman Golb (de la Universidad de Chicago)​ y la Dra. Rachel Elior (de la Universidad Hebrea de Jerusalén), sugieren que los manuscritos del Mar Muerto (o rollos de Qumrán) no fueron escritos por los esenios, sino por sacerdotes saduceos expulsados del templo de Jerusalén. Para Elior, los saduceos, un credo descendiente del sumo sacerdote Sadoc que ungió a Salomón como rey, son los verdaderos autores de los rollos de Qumrán, los mismos que pertenecieron al Templo y se trasladaron al Mar Muerto con la intención de protegerlos. Rachel Elior también afirma que los Esenios fueron introducidos por el historiador Flavio Josefo, mientras que no existe mención alguna de los Esenios en los manuscritos del Mar Muerto; a la vez que no se encuentra testimonio histórico de los Esenios en fuentes hebreas o arameas. Considera atípico que personas que hubiesen coexistido en vida comunitaria de manera parca y frugal ―contrario a la ley de la Torá― no aparezcan mencionados en fuentes hebreas o griegas.

La autoría saducea de los rollos del Mar Muerto ha sido refutada por varios expertos, ya que las reglas de Qumran y el Documento de Damasco exigen explícitamente la comunidad de bienes como requisito de ingreso, lo cual era opuesto a las prácticas saduceas. Los qumranitas se designaban como «los pobres», mientras los saduceos pertenecían a la crema de la sociedad rica y aristocrática. ​ Aunque los autores de los rollos encontrados reclaman su origen sacerdotal y por tanto un origen común con los saduceos, también denuncian que el Templo fue contaminado por la corrupción de los sacerdotes que quedaron allí, por lo cual es imposible que fueran estos últimos al huir quienes hubieran preservado los rollos. Durante los años de control saduceo del Templo (del 134 al 76 a. C.), bajo los reinados de Juan Hircano, Aristóbulo I y Alejandro Janneo, los autores de los rollos fueron severamente perseguidos; por lo tanto es claro que no eran saduceos, sino sus contradictores.​ La angelología,​ así como la insistencia de los diversos rollos en seguir el calendario solar del Libro de los jubileos y del Primer libro de Henoc, excluyen también la posibilidad de una autoría saducea.

Según The Interpreter’s Dictionary of the Bible, los esenios eran aún más exclusivos que los fariseos y «a veces podían ser más farisaicos que estos mismos». Sin embargo, mientras los fariseos, para salvar una propiedad, permitían que en sábado se sacara de un pozo a una res accidentada («vosotros» Mateo 12:11), pero se oponían a curar a las personas en sábado, los esenios en cambio se oponían a rescatar una vaca de un pozo el sábado, pero a la vez si se trataba del accidente de una persona un sábado, exigían quitarse las ropas y rescatar con ellas a quien fuera que hubiera caído al agua, inmediatamente, el mismo sábado.​ (Documento de Damasco XI:12-15).

miércoles, 28 de junio de 2023

Nazismo: ¿Qué pasó con los soldados judíos de la PGM?

¿Qué pasó con los soldados judíos que sirvieron en el ejército alemán en la Primera Guerra Mundial?



Clare Fitzgerald, War History Online
 
 

Crédito de la foto: Autor desconocido / Centro de Historia Judía, Nueva York / Wikimedia Commons / Sin restricciones

Antes de la Segunda Guerra Mundial, los soldados judíos lucharon activamente en el ejército alemán. Esto incluyó la Primera Guerra Mundial y una serie de conflictos librados por los prusianos a lo largo del siglo XIX. El siguiente es un vistazo a lo que les sucedió a estos veteranos durante la Segunda Guerra Mundial y cómo su servicio militar anterior no siempre los protegió de las creencias y políticas antisemitas del Führer.

Servicio de soldados alemanes judíos antes de las guerras mundiales

Willi Ermann, un soldado judío alemán que sirvió en la Primera Guerra Mundial. Más tarde perdió la vida en Auschwitz durante la Segunda Guerra Mundial. (Crédito de la foto: Wikimedia Commons / Dominio público)

Antes de las Guerras Mundiales, los soldados judíos sirvieron en el ejército prusiano en varios conflictos, el primero de los cuales fue la Campaña Alemana de 1813 , más conocida como las Guerras de Liberación. Frente al líder francés Napoleón Bonaparte , la guerra de un año puso fin al poder general del Primer Imperio Francés.

Esta victoria fue seguida por el servicio en el ejército prusiano durante la Segunda Guerra de Schleswig (1864), la Guerra Austro-Prusiana (1866) y la Guerra Franco-Prusiana (1870-1871). Este último condujo al establecimiento del Imperio alemán, bajo el cual los soldados judíos que habían servido no tenían los mismos derechos. Se les excluyó de los rangos oficiales y gubernamentales, con las únicas excepciones en países como el Reino de Baviera y Hamburgo.

Entre 1880 y 1910, se estima que 30.000 soldados alemanes judíos sirvieron en el ejército prusiano, el más alto de los cuales era Meno Burg, que había alcanzado el rango de Judenmajor (judío mayor).

Los soldados alemanes judíos se distinguen durante la Primera Guerra Mundial
Soldados judíos durante una celebración de Hanukkah en Polonia, 1916. (Crédito de la foto: Autor desconocido / Wikimedia Commons / Dominio público)

El estallido de la Primera Guerra Mundial señaló a los soldados alemanes judíos la oportunidad de ser tratados igual que los no judíos del país. También sintieron que la lucha en el Frente Oriental les permitiría liberar a los judíos de Europa del Este de la persecución que enfrentaban.

Al comienzo del conflicto, unos 12.000 soldados judíos se ofrecieron como voluntarios para servir en el Ejército Imperial Alemán, un número que se disparó a 100.000 al final de la guerra. De eso, 70.000 lucharon en el frente, y 3.000 fueron ascendidos a rangos de oficiales, que solo se les permitió mantener en las reservas. Se estima que 12.000 soldados judíos alemanes murieron en acción (KIA).

En octubre de 1916, se implementaron las medidas antisemitas Judenzählung , alegando que la población judía del país estaba tratando de evitar el servicio militar. Esto molestó a los que se habían alistado, de los cuales muchos se distinguían . Esto incluyó a Wilhelm Frankl, un ganador de Pour le Mérite acreditado con 20 victorias aéreas, y Fritz Beckhardt, un as aéreo que anotó 17 muertes. La Luftwaffe borró este último de los libros de historia, para apoyar su argumento de que los judíos son cobardes.

Recibió la Cruz de Hierro de Segunda y Primera Clase, así como la Orden de la Casa Real de Hohenzollern, Beckhardt fue felicitado dos veces por el emperador alemán Wilhelm II por su éxito en el aire. Acusado de tener relaciones con una mujer no judía durante el período de entreguerras, cumplió una condena de más de un año en Buchenwald. Tras su liberación, él y su esposa escaparon a Portugal, antes de establecerse en el Reino Unido.

Ascenso del NSDAP durante el período de entreguerras

 Soldados judíos durante un servicio de Yom Kippur en Bélgica, 1915. (Crédito de la foto: History & Art Images / Getty Images)

Tras la conclusión de la Primera Guerra Mundial, muchos soldados alemanes judíos creían que su servicio había demostrado su patriotismo. Muchos fueron tenidos en alta estima y aceptados como miembros de organizaciones de veteranos, incluida la Reichsbund jüdischer Frontsoldaten (Federación de soldados judíos de primera línea del Reich), dedicada a promover los sacrificios realizados por los judíos alemanes durante la guerra.

Tras el surgimiento del Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (NSDAP) en 1933, los veteranos judíos fueron protegidos contra ciertas medidas, ya que el presidente alemán Paul von Hindenburg había intervenido en su nombre. Sin embargo, esto cambió después de su muerte en 1935.

Después de los eventos de la Kristallnacht tres años después, varias organizaciones les dijeron a los veteranos judíos que emigraran de Alemania, lo que provocó que casi 40,000 lo hicieran. Los que quedaron tuvieron que lidiar con los intentos del NSDAP de borrar los esfuerzos de los soldados alemanes judíos durante la Primera Guerra Mundial, para que pudieran ser tratados como cualquier otro ciudadano judío.

Las políticas antisemitas implementadas por el NSDAP fueron apoyadas en gran medida debido a lo que se conoció como el "mito de la puñalada por la espalda", que afirmaba que Alemania no había perdido la Primera Guerra Mundial en el campo de batalla, sino porque de ciertos grupos de ciudadanos en el frente interno. Esto incluía judíos, socialistas y políticos republicanos.

Represión de los soldados alemanes judíos durante la Segunda Guerra Mundial

Soldados alemanes judíos durante un servicio al aire libre para Yom Kippur, Primera Guerra Mundial. (Crédito de la foto:
Centro de Historia Judía, Nueva York / Wikimedia Commons / Sin restricciones)

Tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial , los veteranos judíos creían que su servicio en el ejército los protegería contra el aumento de la represión en todo el país. Sin embargo, en 1940, se aprobó una ley que establecía que los judíos y aquellos con dos abuelos judíos debían ser expulsados ​​de las fuerzas armadas.

Eso no quiere decir que los soldados judíos no lucharon en el ejército alemán durante el conflicto. Algunos fueron reclutados, mientras que otros sirvieron voluntariamente en honor a sus padres que se alistaron durante la Primera Guerra Mundial. Muchos de estos hombres sintieron que las Leyes de Nuremberg no se aplicaban a ellos, y algunos llegaron incluso a falsificar sus documentos para poder servir. Incluso hubo un puñado de soldados que creían que su servicio salvaría la vida de sus familiares, lo que resultó no ser el caso.

En 1942, Theresienstadt se estableció para albergar a los veteranos judíos, lo que permitió que el ejército alemán los sacara de la sociedad. Como dijo Bryan Riggs a Los Angeles Times : “Cuando los transportes llegaron a recogerlos para su deportación, salieron uniformados con sus medallas”.

También hubo momentos en que el propio Führer hizo excepciones para permitir que los soldados judíos alemanes sirvieran. En un documento personal que data de 1944, 77 oficiales de alto rango “de raza judía mezclada o casados ​​con un judío” fueron declarados de sangre alemana. Si bien el líder del país despreciaba a la población judía de Alemania, se dio cuenta de que necesitaba militares experimentados para servir como soldados y comandantes.

Hugo Gutman

Hugo Gutmann, 1918. (Crédito de la foto: Ministerio de Guerra de Baviera / Archivo del Estado de Baviera / Wikimedia Commons / Dominio público)

Hugo Gutmann fue un oficial militar judío que sirvió en el ejército bávaro durante la Primera Guerra Mundial. Fue transferido a las reservas en 1904 y recordó cuando estalló el conflicto, ascendiendo finalmente al rango de teniente. Gutmann también fue nombrado comandante de compañía y ayudante interino del batallón de artillería del Regimiento "Lista". Era un soldado muy condecorado, habiendo recibido la Cruz de Hierro de Segunda y Primera Clase en 1914 y 2015, respectivamente.

Mientras ocupaba este cargo, Gutmann se desempeñó como superior directo del futuro Führer, llegando incluso a recomendarlo para la Primera Clase de la Cruz de Hierro, que recibió en agosto de 1918. Después de la Primera Guerra Mundial, fue desmovilizado del ejército y se desempeñó como teniente de reserva. . Sin embargo, en 1935, bajo las Leyes de Nuremberg recientemente aprobadas, el soldado perdió su ciudadanía alemana y sus roles de veterano en el Ejército, debido a su fe judía.

Unos años más tarde, Gutmann fue arrestado por la Gestapo, pero liberado después de que las SS se enteraran de sus antecedentes militares. Posteriormente, él y su familia abandonaron Alemania y emigraron a Bélgica, antes de mudarse a los Estados Unidos antes de la invasión alemana de los Países Bajos . Vivió en Estados Unidos hasta su muerte en junio de 1962, trabajando como vendedor de máquinas de escribir.

Berthold Guthmann


Berthold Guthmann con su hermana Anna y su hermano Eduard.
(Crédito de la foto: Autor desconocido / Wikimedia Commons / Dominio público)

Berthold Guthmann era un soldado judío que se ofreció como voluntario para servir como parte del Ejército Imperial Alemán al estallar la Primera Guerra Mundial, junto con sus dos hermanos. Posteriormente se unió al Schutzstaffel 3 del Luftstreitkräfte (Servicio Aéreo Imperial Alemán) como artillero y observador, y fue galardonado con la Cruz de Hierro de Segunda Clase por sus acciones en combate.

Después de la guerra, Guthmann se convirtió en abogado de una gran comunidad judía. En 1938, poco después de los eventos de la Kristallnacht , fue arrestado y enviado a Buchenwald por un breve período de tiempo. Cuando los judíos que vivían en Wiesbaden, Hesse fueron deportados a Theresienstadt, la suya fue una de las tres familias que inicialmente se salvaron. Sin embargo, fueron deportados a fines de 1942 y Guthmann fue ejecutado en Auschwitz casi inmediatamente después de su llegada.

Mientras que su hijo, Paul, fue asesinado en Mauthausen, la esposa y la hija de Guthmann sobrevivieron, y esta última emigró a los EE. UU. después del final de la Segunda Guerra Mundial. El veterano de la Primera Guerra Mundial no fue el único que perdió la vida en un campo de concentración, siendo otros Siegfried Klein y Martin Salomonski.

Leo Baeck
Leo Baeck, 1951. (Crédito de la foto: ullstein bild / Getty Images)

Sirviendo como capellán en el Ejército Imperial Alemán durante la Primera Guerra Mundial, Leo Baeck fue un defensor del pueblo judío y su fe. Cuando el NSDAP llegó al poder en 1933, se convirtió en presidente de la Reichsvertretung der Deutschen Juden (Representación del Reich de judíos alemanes), que se convirtió en la Reichsvereinigung (Asociación de judíos del Reich en Alemania) controlada por el gobierno después de la Kristallnacht .

En enero de 1943, Baeck fue deportado a Theresienstadt, a pesar de los intentos de varias instituciones estadounidenses de ayudarlo a escapar de Alemania. El rabino rechazó todas las ofertas, no queriendo abandonar su comunidad. En el campamento, se convirtió en el "jefe honorario" del Consejo de Ancianos, lo que le brindó protección contra los transportes, así como entregas de correo más frecuentes y mejor comida y alojamiento.

Baeck sobrevivió a su encarcelamiento y se mudó al Reino Unido, donde se desempeñó como presidente de la Unión Mundial para el Judaísmo Progresista y el primer presidente internacional del Instituto Leo Baeck. Falleció el 2 de noviembre de 1956.