lunes, 31 de diciembre de 2018

Fotos del día: Ametralladora ZB en manos japonesas

ZB japonesa 
Las tropas japonesas con una ametralladora ligera checoslovaca ZB-26 en China, circa 1937.


El operador, tal vez, está intentando liberar a mano un cartucho trabado mientras que el segundo le alcanza un cargador.

domingo, 30 de diciembre de 2018

Fusil militar: Minié (Francia)


Fusil Minié




Fusil Minié M1851 del Ejército francés

Fusil Minié Enfield Modelo 1853 del Ejército Británico

Fusil Minié Springfield Modelo 1861, el más usado durante la Guerra de Secesión

El Vereinsgewehr 1857 de Württemberg, Baden y Hesse

El fusil Lorenz austriáco


Tipo Fusil de avancarga
País de origen  Francia

Historia de servicio

Operadores  Francia
 Costa Rica
 Estados Unidos
 Estados Confederados de América
 Imperio austríaco
 Imperio del Brasil
 Imperio del Japón
 Perú
 Prusia
 Reino de las Dos Sicilias
 Reino Unido
Guerras Guerra de Crimea
Campaña Nacional de 1856-1857
Rebelión de los Cipayos
Rebelión Taiping
Segunda Guerra de la Independencia Italiana
Guerra austro-prusiana
Guerra de Secesión
Segunda intervención francesa en México
Guerra Boshin
Guerra del Pacífico
Guerra de la Triple Alianza

Historia de producción

Diseñador Claude-Étienne Minié
Diseñada 1849

Especificaciones

Peso 4,8 kg
Longitud del cañón 958 mm

Munición Bala Minié
Calibre 18 mm
Sistema de disparo Llave de percusión
Cadencia de tiro depende del usuario, aprox. 2-3 disparos/minuto
Alcance efectivo 550 m
Alcance máximo 918 m
Cargador baqueta


El fusil Minié era un fusil de avancarga francés de mediados del siglo XIX, cuyo diseño influyó el desarrollo de varios fusiles similares. Fue adoptado en 1849 tras la invención de la bala Minié en 1847 por el Capitán Claude-Étienne Minié de los Chasseurs d'Orléans del Ejército francés y Henri-Gustave Delvigne. La bala fue diseñada para permitir una rápida recarga del fusil, una innovación que difundió el empleo masivo de esta arma en combate. Fue desarrollado luego de las dificultades que tuvo el Ejército francés en el norte de África, donde habitualmente era atacado desde grandes distancias gracias a las espingardas artesanales, pero con cañones largos, de los argelinos.

Funcionamiento


Varios tipos de balas Minié.

Un diseño de bala Minié de Harpers Ferry, Virginia Occidental, 1855.

El fusil Minié empleaba una baqueta cóncava para atacar la bala sin dañar su forma.

Entrenando con el fusil Minié durante la Guerra de Secesión, 1863. La descripción dice: "Enseñando a los reclutas negros el empleo del fusil Minié".

Las grandes balas del fusil Minié producían enormes heridas.

El fusil Minié empleaba una bala cilindro-cónica de plomo blando, ligeramente más pequeña que el diámetro del cañón, con tres estrías externas llenas de grasa y una depresión cónica en su base. Al ser disparada, el gas en expansión presionaba con fuerza la base de la bala, deformándola para encajar en las estrías del ánima del cañón. Esto producía rotación para una mayor precisión, un mejor sello para una velocidad constante y un mayor alcance, además de eliminar los residuos en el cañón.

Antes de esta innovación, el mosquete era la única arma práctica. Las armas con ánima estriada habían sido empleadas desde el Renacimiento, pero necesitaban empujar a martillazos la munición dentro del cañón, produciendo considerables problemas de limpieza. El sistema de varilla (de breve existencia) empleaba una varilla dentro de la recámara, que deformaba la bala contra las paredes del cañón al ser atacada con la baqueta. Pero este sistema era muy problemático para limpiarse, especialmente con las pólvoras de la época.

El fusil Minié francés tenía una llave de percusión y pesaba 4,8 kg. Teniendo una precisión razonable hasta 550 m, estaba equipado con alza y punto de mira para apuntar efectivamente. Su bala podía penetrar 10 cm de madera de pino blanda a 918 m. La bala con base hueca tenía un calibre de 17,8 mm y pesaba 32,4 g.

Una prueba llevada a cabo en Vincennes en 1849, demostró que la bala era capaz de penetrar dos tablas de madera de álamo con un espesor de 16,93 mm cada una y separadas por 51 cm, a 14 m. Los soldados de la época esparcieron los rumores que la bala podía atravesar a un soldado y su mochila, además de matar a cualquiera que estuviera detrás de éste a 1.100 m e incluso matar a 15 personas puestas en fila.

Este fusil fue empleado de forma limitada en la Guerra de Crimea y fue la principal arma de Infantería en la Guerra de Secesión. El gran calibre de estas balas fácilmente deformables (13-18 mm) combinado con la alta velocidad de rotación producían terribles heridas.

Empleo


Soldado francés parado junto a su fusil Minié M1851.

El fusil Enfield Pattern 1851 Minié fue empleado por el Ejército británico desde 1851 hasta 1855. El sistema Minié además fue empleado por varios fabricantes de armas, tales como Springfield Armory (con su Springfield Modelo 1861, el fusil más empleado en la Guerra de Secesión) y la Royal Small Arms Factory de Enfield (con su Enfield Modelo 1853).

Los fusiles Minié también fueron ampliamente utilizados en Japón durante la Guerra Boshin (1868-1869), donde tuvieron un importante papel en inclinar la balanza en contra de las fuerzas del Shogunato Tokugawa en batallas tales como la de Toba-Fushimi.

Obsolescencia

El fusil Minié se volvió obsoleto en 1866, desde la Segunda Intervención Francesa en México, ya que el ejército francés, equipado con esta arma, empezó a tener desventajas contra los mexicanos (partidarios de Benito Juárez) que estaban equipándose con armas de repetición como las carabinas Winchester (llamadas carabinas Henry) y los fusiles Spencer, también de repetición. Estas armas eran adquiridas en Estados Unidos, y provocaron considerables bajas a los franceses. En la Batalla de Sadowa, los austríacos, equipados con este tipo de fusil, fueron derrotados por los prusianos que tenían fusiles de cerrojo Dreyse. En Francia, los fusiles Minié existentes fueron modificados para emplear un mecanismo de retrocarga que se parecía a una tabaquera, por lo que fueron conocidos como fusiles Tabatière. Al poco tiempo, el fusil de cerrojo Chassepot fue adoptado por el ejército francés.


Wikipedia

sábado, 29 de diciembre de 2018

Crisis del Beagle: Cómo lo vivió la sociedad argentina

En pie de guerra con Chile: ¿Cómo lo vivió la sociedad argentina?

Autor: Diego Istúriz | La Tercera




Cuatro historiadores argentinos rememoran los días más difíciles de un conflicto inesperado.

Primero reinó la indiferencia. Luego la incredulidad. Por último el temor. A fines de 1978, el clima social en Argentina fue cambiando a medida que la guerra con Chile por las tres islas (Nueva, Picton y Lennox) al sur del canal de Beagle iba convirtiéndose en una posibilidad concreta. Quienes vivieron aquellos días de tensión aseguran que la hipótesis del encuentro armado resultaba inadmisible para una parte mayoritaria de la población argentina.

 Sin embargo, el régimen militar de Jorge Rafael Videla no estaba dispuesto a aceptar el laudo británico de 1977 que reconocía la soberanía de Chile sobre el archipiélago. A partir de ese fallo, la tirantez entre ambos gobiernos comenzó a crecer, pese a los reiterados intentos por acercar posiciones. Así fue como el choque, lentamente, se convirtió en el único camino posible. Con las tropas listas y una fecha fijada para el ataque argentino, nada parecía evitar el peor final.

“No sé si existe en la historia el caso de otra guerra que haya sido cancelada a último minuto. Lo que sucedió fue verdaderamente milagroso. Quizás la creencias religiosas de Videla tuvieron peso cuando recibió la indicación del Vaticano para frenar sus planes”, recuerda el escritor e historiador Pacho O´Donnell, quien vivió el pleito desde España, exiliado. “Mientas tanto, la sociedad argentina se dividía entre el repudio a la batalla por unas islas que nadie conocía y el impulso de la glándula patriótica para defender el territorio nacional”, añade.

El historiador Luis Alberto Romero, nacido en Buenos Aires, reconstruye aquellas horas cargadas de incertidumbre. “A fines de 1978, el Beagle era un tema de conversación en las calles. No recuerdo haber escuchado algún comentario favorable ni brotes de entusiasmo nacionalista. Sólo había miedo ante la irresponsabilidad de los militares, sobre todo por la independencia de algunos jefes como el general Luciano Benjamín Menéndez. Por eso la mediación papal del 23 de diciembre fue recibida con gran alivio”, recuerda.

Una patrullera trasandina en el canal Beagle.

¿Por qué la disputa generó un rechazo casi absoluto, en contraste con el fervor popular de la guerra de Malvinas, en 1982? Romero explica que los argentinos tienen “una sensibilidad profunda sobre Malvinas y una idea más genérica sobre otras cuestiones limítrofes, las cuales parecen más técnicas que entrañables. Los sentimientos de hostilidad hacia Chile, a mi parecer, son mínimos e irrelevantes. La paranoia nacionalista de nuestra sociedad se concentra en Malvinas”.

El autor del libro De Chapultepec al Beagle: política exterior argentina 1945-1980, Archibaldo Lanús, considera que la pelea por las islas del Beagle no merecía llegar a tales extremos. Se trataba, según su perspectiva, de un problema acotado, sujeto a interpretaciones, mientras que “la sociedad estaba abiertamente en contra de una posible guerra con un pueblo hermano”. Lanús asegura que la cúpula del poder militar apeló a un problema externo para exaltar el patriotismo y reforzar su rol de liderazgo político.

El historiador Isidoro Ruiz Moreno agrega un matiz. A su entender existía un sector del pueblo argentino que aceptaba la hostilidad (él mismo tenía esa posición), no porque tuviera simpatía por la guerra, sino por considerar injusto el laudo arbitral de 1977 que confirmaba la soberanía de Chile sobre las islas.

Noviembre de 1984: la paz final

Luego de la mediación papal y del cese del periodo más álgido del conflicto, el poder militar en Argentina comenzó un proceso de severo desgaste que culminó en la derrota de Malvinas en manos de Gran Bretaña. La restauración democrática comenzaría en 1983 con la llegada Raúl Alfonsín, el mandatario que convocó un plebiscito nacional para que la sociedad se pronunciara sobre el Tratado de Paz y Amistad firmado ese año con Chile.

Augusto Pinochet con Rafael Videla, el 30 de enero de 1978.

Los resultados fueron abrumadores. La reprobación social de 1978 fue revalidada por el 80% de la ciudadanía argentina que votó a favor del tratado. Un sector de la oposición política (encabezada por el Partido Justicialista, que en aquel entonces enfrentaba al gobierno radical de Alfonsín) instó a votar en contra, pero más de 10 millones de argentinos fueron terminantes. Así fue como la discusión territorial fue definitivamente zanjada.

viernes, 28 de diciembre de 2018

PGM: Los protagonistas del cuento de Navidad se encuentra más tarde

Los protagonistas del cuento de Navidad de la II Guerra Mundial se reunieron 50 años más tarde


Javier Sanz —  Historias de la Historia



Hasta en mitad de un sangrienta guerra se puede producir el milagro de la Navidad. Tras el desembarco de Normandía, Operación Overlord, la ofensiva aliada sufrió un importante revés cuando las fuerzas aerotransportadas británicas intentaron tomar el puente de Arnhem (Holanda) un mes más tarde. Hitler decidió lanzar una ofensiva en el Frente Occidental para estabilizarlo y poder centrarse en el Oriental, donde el Ejército Rojo empujaba con mucha fuerza.

El mes de diciembre de 1944, los alemanes lanzaron la ofensiva de las Árdenas (Bélgica). Los panzer sembraron el caos en las filas aliadas capturando a miles de prisioneros y dejando a muchas unidades aisladas en medio de los bosques. Tres soldados estadounidenses, uno de ellos herido, se encontraron perdidos en medio de un bosque que no conocían, con la nieve hasta las rodillas y sin apenas visibilidad por la niebla. Vagaron durante horas buscando a su Unidad pero lo único que encontraron fue una casita de cuento con la chimenea humeante… era la víspera de la Navidad. En la casa se encontraban un niño de 12 años, Fritz Vincken, y su madre preparando la cena. Les pidieron ayuda y la madre les dejó pasar ofreciéndoles comida y un fuego para calentarse, a sabiendas de que dar cobijo a los aliados estaba penado con el fusilamiento. Cuando la madre estaba curándole las heridas al soldado estadounidense, asaltaron la casa cuatro soldados alemanes. Todos cogieron las armas y comenzaron a gritar, durante unos instantes parecía que aquello sería una matanza a quemarropa… hasta que la madre se interpuso entre los dos grupos y les pidió que bajasen las armas. Hubo unos momentos de silencio e indecisión pero al final todos accedieron. Los alemanes no estaban mucho mejor que los estadounidenses y buscaban un refugio para pasar la gélida noche. Al final, todos compartieron la cena y el calor del hogar. A la mañana siguiente, cuando el herido ya estaba mucho mejor, los soldados alemanes les llevaron hasta las líneas de los aliados y se despidieron.



Tras la publicación de la historia de Fritz Vincken en una revista americana y un documental en televisión, la familia de un soldado americano que había luchado en las Árdenas se puso en contacto con el canal de TV… su padre llevaba años contando esa historia. En enero de 1996, Fritz se trasladó hasta Maryland para conocer a Ralph Blank. El encuentro fue muy emotivo…


Tu madre me salvó la vida – dijo Ralph


Ralph Blank y Fritz Vincken

Con vuestro permiso, el blog se va a tomar unas vacaciones hasta el 30 de diciembre -más o menos-.

jueves, 27 de diciembre de 2018

PGM: La tregua de Navidad de 1914

Villancicos, fútbol y chocolates: la historia de la tregua de Navidad entre ingleses y alemanes durante la Primera Guerra Mundial



Por Adrián Pignatelli |  Infobae


 


Cuando ese 24 de diciembre de 1914 la Compañía A del Primero de Norfolk llegó a la zona de trincheras, en Flandes, reinaba una extraña quietud. No hicieron más que alistarse, cuando del lado alemán el canto de villancicos rompió el silencio.

Los aliados entonces vieron, a través de la niebla que los separaban de las filas enemigas, que los alemanes se habían esforzado en decorar como pudieron, sus trincheras y habían armado precarios árboles de Navidad.

Habían recibido -gentileza del Káiser- raciones extra de salchichas, pan y licor. Por su parte, a los británicos les habían repartido pequeñas latas que contenían un paquete de cigarrillos, papel y lápiz, una tarjeta navideña y un retrato de la Princesa María.

Del lado británico también comenzaron a cantar, y así llegó la mañana del 25. Recién al mediodía la niebla reinante se esfumó, y fue cuando desde las trincheras alemanas se escuchó: "Vengan para acá, no les dispararemos".

Con recelo, unos pocos comenzaron a salir, y los alemanes hicieron lo mismo. Al principio sólo dos o tres se animaron y grande fue la sorpresa de los británicos cuando los alemanes, hablando en inglés, les deseaban una feliz navidad, a la par que estrechaban sus manos.

Cuando intuyeron que no había peligro, todos los soldados salieron y repitieron los saludos. Un soldado inglés, A. Wyatt se asombró que muchos soldados alemanes fueran personas mayores. "Pueden ser nuestros padres", escribiría a la familia.



Compartieron chocolates y cigarrillos. Los "tommys" y los "fritz" (cómo se los llamaban a los ingleses y alemanes, respectivamente) intercambiaron bebidas, cigarrillos, comida y hasta periódicos. Dicen que los alemanes buscaban pan blanco ya que el que consumían, el negro, era incomible.

En otro lugar, los británicos escucharon cómo un alemán cantaba, en perfecto británico, "Annie Laurie", una vieja canción escocesa. "¡Canta otra!", le pedían.

Aprovecharon a enterrar a sus muertos y se ayudaron mutuamente en esa triste tarea. Un capellán escocés rezó las honras fúnebres y hasta llegó a leer el salmo 23 –"El Señor es mi Pastor, nada me puede faltar…"-en inglés y en alemán.

De pronto, alguien apareció con una pelota de fútbol y terminaron jugando un partido en la misma tierra en la que se continuarían matando. Jugaron durante una hora, sin referí y con el suelo patinoso por el hielo. No recuerdan el resultado, aseguran que se respetaron las reglas, que no contaban los goles, pero que por un rato se olvidaron de la guerra.

La escena descrita no fue la única sino que, con matices, se repitió a lo largo del frente, algunas por horas y otras duraron hasta el Año Nuevo. En algunos casos, los partidos fueron jugados entre soldados de la misma nacionalidad y en otros casos no, en puntos como Ypres, St Yvon, Flandes, Armentiéres, Lille, Vimy, en un frente que prácticamente se estancaría hasta 1918.

Fue una tregua espontánea, no oficial, condenada por los altos mandos, que terminantemente prohibían confraternizar con el enemigo. Hasta el pedido del propio Papa Benedicto XV del 8 de diciembre de aplicar una tregua en Navidad no había sido tomada en cuenta. Historiadores relataron que los franceses llegaron a penar con el fusilamiento estos actos y que soldados alemanes fueron enviados castigados al frente oriental.

Esta tregua quedó simbolizada a través de un par de esculturas, una en Gran Bretaña , la que eterniza a dos soldados, uno inglés y otro alemán y en el medio, una pelota de fútbol. Se llama "All together now" y es obra de Andy Edwards de Stoke. Y otra fue inaugurada en Bélgica cuando se cumplió el centenario del inicio de la Gran Guerra.

En aquellos días, un soldado alemán escribiría a su familia: "Qué maravilloso y qué extraño al mismo tiempo. Al fin de cuentas, debajo de los uniformes éramos todos iguales".

miércoles, 26 de diciembre de 2018

Metralletas: Lanchesters en la Royal Navy

En la estación del Lejano Oriente con la ametralladora grande y resistente de la Royal Navy

En 1965, los navegantes del HMS 'Barrosa' empacaron las duras Lanchesters.





Matthew Moss | War is Boring


Las fotografías de esta historia fueron tomadas durante el despliegue de 1965-1966 en la estación de Extremo Oriente por el destructor de la Royal Navy HMS Barrosa.

Barrosa fue parte de un grupo de trabajo que apoyó las operaciones británicas en Borneo durante la confrontación entre Indonesia y Malasia, una guerra no declarada a lo largo de la frontera entre Indonesia y el este de Malasia que surgió de la oposición anterior a la creación de este último.

Los marineros tenían la tarea de llevar a cabo patrullas de detención y registro de embarcaciones locales que sospechaban que habían traficado con armas y equipo a los insurgentes respaldados por Indonesia. En la costa del norte de Borneo y en el oeste de Malasia, Barrosa detuvo embarcaciones en el mar, mientras que grupos de marineros usaban pequeñas embarcaciones para patrullar las aguas costeras.


Las fiestas de embarque del HMS Barrosa se preparan para buscar barcos nativos en busca de armas ilícitas. Tenga en cuenta el marinero que cubre la tripulación con su Lanchester. 

El arma principal de los marineros fue la Lanchester, una ametralladora de la época previa incluso a la Segunda Guerra Mundial. Producido por Sterling, el Lanchester fue una copia del MP 28 / II de Bergmann. Inicialmente, la Royal Air Force y la Royal Navy utilizaron el arma. La RAF finalmente pasó todas las 80,000 armas a la Armada.

El Lanchester fue nombrado por George Lanchester, el ingeniero que supervisó su producción. Era un arma grande, bien construida pero voluminosa. Caro de producir a £ 14 por arma, pronto fue superado por el más barato Sten.

A pesar de esto, el Lanchester sobrevivió al Sten en el servicio británico. La Royal Navy finalmente los declaró obsoletos en 1978.

martes, 25 de diciembre de 2018

Grecia antigua: Armamento y mando en combate

Homero: Armamento y mando




El artículo militar más distintivo e inusual mencionado en la Ilíada es el casco de colmillo de jabalí de los micénicos. Nunca se había visto nada parecido a nadie que viviera cuando se escribió la Ilíada en el siglo VIII; era un auténtico artefacto de la edad de bronce, descrito en la Ilíada tal como se habría visto en la edad de bronce, pero que ya no está disponible para que el poeta lo vea por sí mismo. Por lo tanto, la descripción del casco debe haber sido transmitida por tradición oral desde la edad de bronce. Se fabricó principalmente entre 1570 y 1430 aC, pero aún se usaba doscientos años después.

Los colmillos de los jabalíes no eran fáciles de conseguir, y muchos eran necesarios para hacer un solo casco; solo los aristócratas podían permitirse el lujo de ir a cazar jabalíes con la frecuencia suficiente para reunir el número de colmillos necesarios para hacer un casco. El casco de colmillo de un jabalí era un artículo muy caro y, una vez hecho, se convirtió en un tesoro familiar. Homero lo confirma; El casco de colmillo del jabalí que pertenece a Meriones fue robado de Boeotia por Autolycus, entregado por Autolycus a Amphidamas of Kythera, y luego por él a Molos, el padre de Meriones. Cuando Meriones se lo dio a Odiseo, era una reliquia invaluable. Solo unos pocos guerreros aristocráticos hubieran podido costear estos cascos; no fueron exportados, y debieron haber sido encargados por príncipes específicos, que probablemente debían suministrar los colmillos de trofeos ellos mismos. El casco se convirtió en un alarde visual de la destreza del portador como un cazador.

La moda para hacer los cascos de colmillo de jabalí había terminado mucho antes de la guerra de Troya, pero, sorprendentemente, todavía había algunos en circulación, doscientos años después. Para entonces, debían ser reliquias de valor incalculables, cuyos orígenes se habían perdido en el pasado mítico, y estos son exactamente los términos en los que Homero los describe.

El soldado de pie micénico no habría tenido nada tan elaborado como el casco de colmillo del jabalí, ni siquiera el casco de bronce en forma de cono que llevaban otros guerreros de élite. Los soldados más comunes en el momento de la Guerra de Troya probablemente llevaban simples cascos de cuero. Estos tenían una cresta prominente; estaban hechos de dos piezas de cuero cosidas para hacer que la quilla pasara por encima de la cabeza. Algunos cascos de cuero pueden haber tenido discos o placas de bronce cosidos: eso es lo que se nos muestra en el Jarrón de los Guerreros.

Los cascos de bronce con forma de cono o de bala estaban a veces decorados con plumas de pelo de caballo que brotaban de la corona. Una representación de marfil del casco de colmillo de un jabalí muestra que también tenía un zócalo para una pluma. Schliemann encontró los restos de dos cascos de bronce en Troya. Aunque sus partes inferiores se habían desintegrado, las crestas corroídas habían sobrevivido lo suficientemente bien como para que él pudiera reconstruirlas. Se hicieron en dos piezas, una fija permanentemente a la corona del casco, la otra, sosteniendo la pluma de pelo de caballo, unida a ella con un alfiler; El penacho era desmontable.



En la Ilíada, leemos sobre héroes en duelo con lanzas, y aunque las espadas estaban definitivamente en uso, todos los lanceros tendrían una espada corta a su lado para pelear mano a mano, la lanza de empuje todavía era el arma elegida. Algunas de estas lanzas con cabeza de bronce eran muy largas y debían requerir mucho entrenamiento y práctica para manejarlas con eficacia. A Héctor se le describe como empuñando una lanza con ‘once antebrazos largos’.

Homero nos da relativamente poco sobre tácticas o la naturaleza del comando. Los generales conferidos en diversos puntos durante la guerra. Se nos dice que al principio, los líderes troyanos se reunieron fuera de la casa de Priam para discutir la estrategia. Escuchamos que cuando los troyanos estaban en desorden, después de haber llegado a los barcos griegos, el troyano Polydamas persuadió a un Hector testarudo para que retrocediera:

Llama al mejor de nuestros capitanes aquí, este terreno seguro.

Entonces todos podemos caer y planear bien nuestras tácticas.

Héctor vio el sentido en esto, le dijo a Poliamas que reuniera a los capitanes:

Me dirijo a este nuevo asalto,

Pronto regresaré, una vez que les haya dado órdenes claras.

Aun así, lo que siguió parece poco más coordinado que lo que sucedió antes, ya que Héctor se ubicó entre los barcos en busca de sus capitanes y se detuvo para enfurecerse con su hermano París. La respuesta de París en efecto reafirma el espíritu de mando prevaleciente. Enfatizó que todos los troyanos estaban "justo detrás" de Héctor y que no los encontraría "cortos de coraje". No hay ninguna estrategia aquí, solo una inyección de adrenalina. Esto corre paralelo a las cuentas del comportamiento de Ramesses en la Batalla de Kadesh. En lugar de dar órdenes específicas y racionales, inspiró valor con el ejemplo y gritó aliento inspirador: "¡Anímense, mis soldados! ¡Ves mi victoria! Amon es mi protector y su mano está conmigo ".
Sin embargo, hay un indicio de que aunque los comandantes en jefe solo gritaban generalidades inspiradoras, los generales dieron instrucciones más específicas. En un momento dado, Agamenón recorrió a sus generales, dando una charla a ellos y a sus tropas, primero los dos Ajaxes, luego Néstor, y así sucesivamente. Después de que Agamenón había pasado, Néstor dio órdenes más específicas a sus unidades de combate, cada una de ellas bajo capitanes (Pelagón, Alastor, Chromius, Haemon y Bias), quienes eran responsables de cumplir las órdenes tácticas de Néstor.

El ataque de los troyanos a las naves hizo que Agamenón perdiera los nervios; Varios líderes resultaron heridos y se rompió el muro defensivo. Fue Néstor quien reunió a los generales griegos para discutir tácticas. Agamenón abogó por el retiro. Ulises cuestionó la calidad del liderazgo y le dijo a Agamenón sin rodeos: "Tú eres el desastre". Ojalá hubieras mandado a otro ejército ".

También escuchamos a través del Dolon scout Dolon que Hector, el comandante en jefe de Trojan, discutió los planes para la batalla del día siguiente durante las reuniones nocturnas. Los griegos celebraron reuniones similares; en algunos de ellos, Agamenón, el comandante en jefe griego, presentó ideas que los otros líderes griegos desaprobaron, y él estaba listo para dar marcha atrás. Estos "consejos nocturnos" son muy creíbles.

Sin embargo, Homero proporciona poca información sobre tácticas durante las batallas. Oímos de los dos ejércitos chocando y chocando; Oímos que los griegos a veces avanzan hacia las murallas de Troya y son golpeados de regreso a su campamento en otros. Mucho se deja a la fuerza bruta, el coraje y la oportunidad. Hay poca información sobre el comando, aparte del ocasional grito de aliento. Las élites guerreras se representan como si tomaran toda la iniciativa en la lucha cuerpo a cuerpo, pero no hay una descripción de generales u otros oficiales que den órdenes para que el resto de los guerreros avancen o retrocedan, o adopten una formación específica. El soldado general se describe como avanzando o retrocediendo, pero moviéndose como en una marea en lugar de instrucciones u órdenes de los oficiales. Si esta es la forma en que se lucharon las batallas, sin que se dieran órdenes una vez que se unieron, los comandantes estaban usando sus ejércitos como instrumentos contundentes, y, de ser así, podría explicar por qué los griegos tardaron mucho tiempo en alcanzar su objetivo. Parece que fue solo en los momentos de calma en la lucha que los comandantes pudieron conferir y decidieron los cambios de táctica.

Solo hay una ocasión, cuando las cosas iban muy mal para los griegos, cuando se tomó una decisión, evidentemente revolucionaria, de que los comandantes debían recorrer el campo de batalla y animar e inspirar a los guerreros en lugar de perderse de la mano. lucha. Esto es una mirada hacia adelante a un estilo posterior de comando; finalmente, los generales verían batallas desde puntos de vista para obtener una visión general y enviarían oficiales al campo de batalla con instrucciones.

Lo que Homero describe, las hazañas de un puñado de héroes, sería más apropiado para una incursión a pequeña escala en la que tal vez unos cien hombres podrían actuar de forma totalmente individual. Pero la gran cantidad de personas involucradas, los 130,000 guerreros micénicos implicados en la Ilíada, significa que los comandantes habrían sido empleados de manera mucho más útil para guiar y dirigir a sus tropas. Si, de hecho, una vez comenzada la batalla, hubiera un movimiento incoherente de lucha cuerpo a cuerpo, el estilo de lucha habría sido similar al que los romanos encontraron cuando invadieron Gran Bretaña; de hecho, puede ser que el uso de carros y gritos de insultos durante la revuelta de Boudiccan fuera una mirada retrospectiva a esta forma anterior de lucha de la edad de bronce. Sospecho que los héroes guerreros de hecho lideraron, alentaron y dirigieron a los de sus compatriotas que estaban al alcance del oído, de modo que hubiera habido parches de acción coordinada, oasis de acción intencional (o temeraria) dentro del combate general.

Lo que falta en el Ciclo Épico es cualquier crédito por los esfuerzos, las hazañas y los logros de la gran cantidad de soldados ordinarios involucrados. Los relatos oficiales egipcios de la Batalla de Kadesh elogiaron las hazañas heroicas de Ramsés, quienes superaron enormes probabilidades por sí solos. Fue Ramsés quien encargó la historia y estuvo en condiciones de inflar su contribución personal a la batalla, a menudo a expensas de la de sus propios ejércitos. Después de Troya, fueron los oficiales micénicos los que encargaron a los poetas y bardos, y este hecho sociopolítico es suficiente para explicar el muy alto perfil que los héroes principescos adquirieron en el registro del ciclo épico de la guerra. Los bardos simplemente se jactaban de sus patrocinadores e inevitablemente inflaban las partes que desempeñaban en las acciones individuales y el resultado de la batalla.

Weapons and Warfare

lunes, 24 de diciembre de 2018

Segunda guerra holando-británica y el rol de Escocia

Guerra contra los holandeses

Weapons and Warfare



Bruce Von Stetina - "El segundo día de la batalla de cuatro días de 1666" Batalla de la segunda guerra angloholandesa.

La consecuencia para Escocia de su participación en las Guerras Civiles fue una década de ocupación de los cromwellianos, un yugo que no se levantó hasta la Restauración de Carlos II en 1660. Los corsarios escoceses no estaban fuera del negocio, simplemente estaban descansando; El estallido de la Segunda Guerra Holandesa en marzo de 1665 fue para anunciar el comienzo de una verdadera edad de oro del saqueo. Los preparativos se habían iniciado en el otoño anterior, a medida que aumentaban las tensiones y se reclutaba a unos 500 escoceses para el servicio naval, muchos de los cuales perdieron la vida cuando Londres estalló en Gravesend. Desde el principio, los asaltantes holandeses estuvieron activos en el Mar del Norte y restringieron severamente la libre circulación de comerciantes. Se estableció una guarnición en Shetland para vigilar el Sound of Bressay, que ahora asume un mayor valor estratégico con la Royal Navy al mando de las rutas del Canal. A medida que se profundizaron las hostilidades, los corsarios escoceses, instigados por un enfoque "flexible" de las cortes del Almirantazgo, disfrutaron de una bonanza. Leith estaba llena de premios. Las "lanchas flotantes" holandesas, los "hukers" y los mercaderes holandeses, los antiguos cazaban en las rutas marítimas de Noruega, donde cargaban con madera.

Una de las "estrellas" en ascenso de la industria del corsario fue William Hamilton de Dundee, maestro de los Rothes de 22 armas. Recogió no menos de 22 premios, el más valioso de los cuales, Charity, cargado de pieles, obtuvo unos £ 4,000 escoceses, una suma muy apreciable. Irónicamente, el brote de peste que afectó a Londres en los últimos meses de 1665 y cerró el puerto, vinculado a una peste similar que se extendió por Flandes, agudizó el hambre de los dueños y amos escoceses. Hamilton comenzó su primer crucero en marzo de 1666 y disfrutó de una serie de éxitos inmediatos. Su segundo crucero comenzó en junio, cuando consiguió diez premios más, incluida la recuperación de una fragata escocesa Morton de Wemyss, que el enemigo había tomado anteriormente. A fines de junio o principios de julio, Rothes estaba navegando como parte de un escuadrón de cuatro escoceses y se involucró en una acción brusca contra una flotilla holandesa superior, cuatro de los cuales fueron capturados y el resto fue visto con pérdidas. Hamilton fue reportado muerto pero, de hecho, sobrevivió. Muy agraviado por las depredaciones de los escoceses, los holandeses enviaron a tres hombres de guerra para bloquear el Forth. Hamilton se unió a John Brown de Leith y John Aitchison de Pittenweem, cuando se embarcó para montar un desafío. Se produjo una acción más enérgica y, aunque los corsarios escoceses dieron buena cuenta de sí mismos, los holandeses demostraron ser demasiado fuertes para vencerlos.

Esto fue solo un comienzo. Los holandeses se vieron gravemente afectados por la audacia de los corsarios y su comercio se vio muy afectado. En consecuencia, el 29/30 de abril de 1667 montaron una redada en vigor contra el Forth. Una veintena de velas entraron en Leith Road la noche del 30; tres hombres de guerra ingleses estaban a menos de dos millas, pero permanecieron inactivos ". . . Los capitanes están penosamente borrachos. . . 'Burntisland fue bombardeado, pero los fuertes respondieron con un fuerte fuego y los atacantes no pudieron obtener ninguna ventaja. Los locales volaron a las armas y surgió el regimiento de Dalziell. Los magistrados de Leith hundieron uno de los premios de Hamilton como un barco de bloque y montaron armas, suficientes para frustrar el intento del enemigo de enviar una nave de fuego. Los atacantes no lograron nada y, a principios de mayo, Hamilton estaba de nuevo activo, eliminando un buque de guerra de 30 cañones. Rothes no fue de ninguna manera el único corsario activo. Gideon Murray, quien fue el capitán del

Thistle of Leith, de 16 cañones, obtuvo 17 premios; John Brown, también de Leith con Lamb (16 cañones), anotó hasta diez. Otros que lograron capturas notables fueron James Bennet (Barbara), William Gedd (Good Fortune), James Alexander (Lesley), George Cheyne y Andrew Smeaton.

Tan pronto como partieron los holandeses, se produjo una nueva alarma, el 29 de mayo, cuando el sonido de los disparos navales disparó la alarma y los ciudadanos de Leith se apresuraron nuevamente a las armas, se hundió una nueva nave de bloqueo y las armas fueron tripuladas. Afortunadamente, este fue un pánico totalmente falso. Los recién llegados eran un escuadrón inglés bajo el mando de Sir Jeremy Smith, que descargaron su artillería para mantener la estación en la niebla. Las naves de Smith ya se habían encontrado con un convoy enemigo y se habían llevado 14 premios y seguían aumentando su puntuación de la manera más impresionante. El auge en la construcción de buques de guerra trajo un beneficio adicional, creando un mercado para la madera. El omnipresente Pett compró pino del norte de Escocia, y un empresario emprendedor de Edimburgo, Patrick Lyell, se estableció como corredor de la madera y los cordajes tomados como carga de premio. Cuando el Tratado de Breda, sellado el 21 de julio de 1667, puso fin a las hostilidades, se terminó la bonanza, pero los corsarios escoceses traían premios hasta prácticamente el momento de la firma. El Capitán Archer del Joseph de 6 cañones de Newcastle upon Tyne, que viajaba bajo una comisión escocesa, trajo una serie de grandes premios, ¡y el Capitán Wood de Berwick anotó ocho!

La paz resultó ser un interludio. La rivalidad entre Inglaterra y las Provincias Unidas era demasiado convincente. En abril de 1672, los tambores sonaban de nuevo, y el rey necesitaba marineros escoceses una vez más. El duque de Lennox, en su calidad de almirante de Escocia, estaba facultado para emitir cartas de marca. No había escasez de compradores y, dentro de una semana, se estaban habilitando una cantidad de alcaparras. Tan popular era la noción de corsario que muchos marineros de Newcastle se apresuraban al norte para buscar comisiones fuera de Escocia. Sobrevive un registro fascinante, que detalla la adquisición y el equipamiento de Lyon, de Dundee, capitaneado por Thomas Lyell y con el Conde de Kinghorn como principal accionista. La compraron en Leith por unas £ 2,700. Cinco de sus grandes armas fueron compradas por una suma adicional de £ 496, y los propietarios incurrieron en el gasto adicional de acondicionamiento, nuevas velas de lona y tachuelas, aparejos y cordeles, un nuevo barco y reparaciones de la bomba. Se tuvo que contratar una tripulación y los víveres: carne de res, cerdo, galletas, pescado seco, cerveza y sal. El capitán disfrutó de algunos suministros adicionales de licor y tabaco. El artillero maestro, sus necesidades más prácticas, necesitaba pólvora y tiro, papel para cartuchos, esponjas, un nuevo cucharón de cobre. También se compraron pistolas giratorias y una cantidad de armas pequeñas. Los costos totales superaron los £ 6,000 escoceses, un desembolso sustancial, y Lyon no partió en su primer crucero hasta el 10 de junio.
Como inversión, pronto demostró su valía y regresó con dos preciosos premios, motivo de cierta celebración, a pesar de que los asuntos tortuosos y costosos de los procedimientos judiciales se avecinaban. La guerra fue el presagio de una cosecha madura para la corte del Almirantazgo, y Susan Mowat calcula que los rendimientos durante 1672 fueron realmente atractivos, con el Juez Almirante recogiendo unos £ 12,000 escoceses, un dividendo muy aceptable para uno que no se había aventurado ni de cuello ni ¡bolso! Para los propietarios de Lyon, su segundo crucero, que comenzó el 11 de septiembre, fue sustancialmente menos gratificante. Ella había sufrido algunos daños menores en su viaje inicial, pero ahora estaba atravesada por la tormenta y encallada en la costa de Escandinavia. Su rescate y reparación fueron prolongados, y finalmente llegó cojeando a su casa sin nada que mostrar para su crucero, aparte de los costos significativos. Fue vendida en el curso del verano siguiente con una pérdida considerable. El corsario fue, en todos los sentidos, una empresa de alto riesgo.

Otro inversionista en este juego de altas apuestas fue el mismo Lennox. El Lord Almirante era dueño de su propia fragata, Speedwell, y su capitán era el experimentado Richard Borthwick, uno que había aprendido su oficio en el conflicto anterior. Somos afortunados en que una cantidad de su teniente, la correspondencia de Charles Whittington, sobrevive. Speedwell zarpó de Harwich el 27 de abril, navegando con otra fragata, Portland. El duque de Lennox estaba a bordo del otro barco, pero los barcos pronto se separaron y Speedwell dio caza a una flotilla de botes. Como registra Whittington:

Nos separamos de ellos en el extremo este del Dogger [Banco], persiguiendo a un dogger en la noche, y a la mañana siguiente vimos remolcar grandes botes, que perdimos en la niebla. Al día siguiente vimos diez botes voladores desde St. Tuball, los cuales perseguimos hasta el jueves, viernes y sábado, y tomamos seis. . .

Este fue un comienzo muy alentador; Mientras navegaba desde Leith en junio, la fragata se llevó dos premios más. A fines del verano, estaba activa frente a la costa holandesa, tomando un banco de embarcaciones pequeñas y llevando a otros a tierra. Esto fue después de que ella causó un poco de molestia en Newcastle, donde su pandilla de prensa había estado activa. A pesar de que golpeó la costa holandesa, causó mucha alarma y provocó la furia impotente de la milicia, el empeoramiento del clima y la presencia de varios hombres de guerra holandeses le negaron capturas valiosas. Speedwell emprendió un nuevo crucero en el otoño, sufriendo mucho por el mal tiempo, como reflejan las cartas de Whittington. Mientras golpeaba las duras aguas del Mar del Norte, perdió a su dueño. Lennox se había caído por la borda y se había ahogado. El tiempo de Speedwell como corsario escocés estaba por terminar. La muerte del duque causó una pausa, ya que las comisiones que había emitido ahora habían caducado y tuvieron que ser validadas temporalmente por el Lord Canciller. En marzo de 1673, el hermano del rey, James, duque de York, el futuro James II, fue nombrado Alto Almirante, aunque esto no despejó de inmediato el retraso. Los días de Halcyon estaban llegando a su fin. Se tomaron muchos premios, pero la facilidad de acomodación de la ley escocesa se había ajustado para reflejar el examen más detenido de la práctica inglesa. Más y más casos fueron "manchados": los capitanes no lograron establecer su caso y los buques capturados no recibieron premios legales.

Si los corsarios, a fines del siglo xvn, estaban disfrutando de una especie de auge comercial, el resto del país no. Los tiempos eran difíciles; Escocia seguía siendo una pequeña nación en los márgenes de Europa. La restauración y la amenaza a la independencia religiosa habían provocado una reacción de los miembros más extremistas de Kirk. En primer lugar, el abortivo Pentland Rising de 1666, luego la serie de disturbios y represión centrada en el sudoeste y conocida como "el momento de la muerte". Después de los nuevos trastornos políticos de la "Revolución Gloriosa", con una economía más pequeña y exportaciones limitadas, las desventajas exacerbadas por una serie de malas cosechas en la década de 1690, prevaleció un clima de recesión e incertidumbre en Escocia. Incluso los corsarios encontraron la guerra con Francia después de 1689 no mucho para su gusto. Algunos premios se tendrían en la costa oeste, pero los días de gloria habían desaparecido. Una de las soluciones propuestas fue la defendida por William Paterson, fundador del Banco de Inglaterra: la creación de una colonia comercial en el istmo de Panamá.

domingo, 23 de diciembre de 2018

La guerra en la Antigüedad: Armas y estrategias

Guerra en eras prehistóricas a 600 A.C.




Los principales elementos de la guerra fueron básicamente los mismos en 3500 b. do. mi. como lo fueron en 600 c. e., aunque el tamaño de los ejércitos y el alcance de las guerras aumentaron significativamente con el tiempo. Las técnicas y las tecnologías pueden haber mejorado, pero todas las guerras involucraban a los combatientes en la lucha cuerpo a cuerpo, generalmente con espadas y lanzas, y luchas a larga distancia usando arcos y flechas, en la guerra de asedio y en combates de caballería. La siguiente es una breve lista de algunas técnicas y tecnologías de guerra que mostraron avances en el período.



Caballería. El caballo entró en el campo de batalla tirando de carros cuando los indoeuropeos se mudaron de su tierra natal en la encrucijada de Europa y Asia Central. Fue una innovación notable. Se sabía que Sumer había utilizado carros tirados por burros un poco antes (3000 aC), pero los hititas indoeuropeos (1400 aC) llevaban carros de caballos en el corazón de Sumer sin ningún desafío.

El siguiente avance después de la caballería se convirtió en un componente importante en la guerra fue la invención del estribo por los nómadas de Asia alrededor de 300 b. do. mi. Casi al mismo tiempo, los nómadas hunos clavaron una herradura de metal en las pezuñas de sus animales. Con estos inventos, los caballos podían ir más lejos y más rápido y los jinetes obtenían un control total sobre sus monturas.

India fue la primera tierra en usar elefantes en la batalla. Alejandro Magno se encontró por primera vez con el elefante de guerra en la India. Más tarde los romanos los apreciaron mucho. Pero los elefantes no se adaptaron bien al frío. Cuando Hannibal invadió Italia, solo un elefante sobrevivió a la marcha a través de los Alpes.





Infantería y armas de hierro.
El caballo no hizo a la infantería obsoleta. Las mejoras en proporcionar protección para los soldados de infantería vinieron con el uso del escudo de Sumer (2500 a. C. e.). En los días de Alejandro Magno, toda una compañía de guerreros marchaba hacia la batalla unidos por escudos para formar una pared móvil. Esta formación se denomina "falange". Los soldados ciudadanos comunes podían aprender la coordinación y la disciplina involucradas con la falange, y este esprit de corps continuó en la vida cívica y la interacción social. En la antigua Grecia, una dinámica de gobierno participativo surgió de esta expectativa de responsabilidad en el campo de batalla. Cuando se combinó con las nuevas oportunidades de Atenas en el mar, la aristocracia basada en la caballería dio paso a la democracia basada en la infantería y la armada. La armadura corporal individual, utilizada con el escudo, protege a los soldados en la batalla. Por 250 b. do. mi. los chinos habían desarrollado una armadura corporal hecha de placas de metal. La idea de "caballeros en armadura brillante" haciendo batalla campal es una fantasía de la Edad Media, ya que el hierro era simplemente demasiado pesado y valioso para el uso a gran escala. Los partos (c 250 d e) afirmaron que sus caballos comían alfalfa de la montaña iraní y eran lo suficientemente fuertes como para llevar a sus guerreros con armadura completa (aunque la mayoría no eran de hierro).

Los invasores hititas inauguraron la Edad de Hierro con armas de hierro reemplazando a las de bronce. Por 1000 b. do. mi. el hierro era común para las armas en todo el mundo mediterráneo y se extendió a China después de 500 b. do. mi. Incluso los celtas se habían convertido en expertos en la fundición y usaron hierro forjado en el campo de batalla en 750 b. do. mi.



Asedios y Arqueros. Los asirios, los guerreros más temidos del Cercano Oriente, se destacaron en tecnologías y organizaciones de guerra (extensa policía secreta, propaganda), creando un imperio unido y duradero en las ciudades estado de Mesopotamia. Cuando avanzaron contra las murallas y las puertas de las ciudades, los asirios usaron arietes y máquinas de asedio que infundieron terror en los corazones de los habitantes. Cuando sus soldados marcharon fuera de las murallas de la ciudad antes de la batalla, los asirios corretearían alrededor con sus plataformas de arqueros impulsadas por cuadrigas y cortarían a sus desafortunados oponentes. Durante 500 años las técnicas de sitiar las ciudades no cambiaron mucho, hasta que los romanos inventaron la catapulta en 500 b. do. e., que arrojó piedras y bolas de fuego llameantes contra las defensas de sus enemigos.

El arco y la flecha se encontraban entre las primeras armas primitivas utilizadas en todo el mundo. Para los griegos de la Ilíada, el arco y la flecha eran despreciados y considerados afeminados en comparación con el combate cuerpo a cuerpo, la verdadera prueba de los héroes. Los persas de Jerjes (490 aC e) y los romanos de Marco Aurelio (170 aC) utilizaron arqueros con gran ventaja, ya que sus flechas ennegrecían los cielos antes de la carga de su infantería y caballería. Los chinos encontraron formas de perfeccionar el objetivo y el poder con la ballesta; más tarde, el arco compuesto se originó entre las tribus nómadas de las estepas asiáticas. Ambos eran más precisos y poderosos que el simple arco.




Marinas. En el siglo XIV b. do. e., los aqueos (griegos) y otros se llevaron al mar. Por 1200 b. do. mi. se libró la primera batalla naval conocida: los Pueblos del Mar Mediterráneo contra los egipcios. Asiria e India tuvieron naves de navegación marítima a principios del 700 s b. do. mi. Además de los fenicios y posiblemente los etruscos, los atenienses fueron uno de los primeros estados en convertir a los navegantes en su sostén. De ellos, el uso de la nave trirreme (una nave con tres filas de remos) adquirió una importancia decisiva en la guerra. Atenas sobrevivió controlando los mares. Las armadas se volvieron cada vez más importantes a medida que las civilizaciones aumentaban sus contactos comerciales y sociales. Sin embargo, en su mayor parte, los buques fueron utilizados para el transporte de carga, incursiones y exploración. En la guerra, tenían un papel limitado. Por lo tanto, los nativos de Oceanía utilizaron su marinería en lugares colonizadores como Hawai y las Islas de Pascua, y los fenicios exploraron Gran Bretaña y rodearon el Cuerno de África.


Weapons and Warfare

sábado, 22 de diciembre de 2018

Imperialismo: La RAF controlando las colonias desde el aire

Bombardeo aéreo de la RAF y vigilancia de las colonias

Weapons and Warfare



1920: este avión Bristol F2b aparece en una foto de una redada en el Jelal Khel durante la "Guerra de Pink" en la frontera noroeste de la India en 1925. El conflicto recibió su nombre por el Comandante del Ala Richard Pink, que comandaba la Fuerza Aérea Real. Campaña de bombardeo y ametrallado aire-tierra.

El bombardeo aéreo, el lanzamiento de bombas en objetivos terrestres por parte de aviones militares, fue una de las innovaciones militares más significativas del siglo XX y una que Gran Bretaña utilizó contra enemigos externos y rebelión interna dentro del imperio. Se puede usar para apoyar directamente a las tropas en el campo de batalla (táctico) o para destruir los recursos industriales, militares y económicos enemigos a grandes distancias (estratégico). El bombardeo aéreo puede usarse para atacar directamente a un enemigo real o para disuadir a un enemigo potencial al aumentar la posibilidad de traer destrucción, como fue el caso durante la Guerra Fría.

El primer caso de bombardeo aéreo ocurrió en el norte de África en 1911, cuando Italia luchó contra el Imperio Otomano y atacó los baluartes otomanos en Libia. Tres años más tarde, el inicio de la Primera Guerra Mundial creó oportunidades para que los aviones apoyen las acciones militares. En septiembre de 1914, las armas aéreas de Gran Bretaña, el Royal Flying Corps y el Royal Naval Air Service, habían ampliado sus actividades de deberes de observación a atacar objetivos terrestres utilizando bombas lanzadas desde aviones.

El bombardeo jugó un papel cada vez más importante en el esfuerzo de la guerra hasta 1918. El bombardeo táctico fue parte del apoyo dado a las tropas terrestres en las batallas de Somme (1916), Messines, Ypres y Cambrai (1917), y en la ofensiva final, comenzando con La batalla de Amiens (1918). Además del apoyo aéreo táctico, los británicos trabajaron para desarrollar un programa de bombardeo estratégico contra ciudades alemanas, en parte como represalia por las incursiones de zepelines alemanes en Londres antes de la guerra.

Al final de la guerra, la Royal Air Force (RAF, formada en abril de 1918 a partir del antiguo Royal Flying Corps) justificó su existencia continua desarrollando la práctica de la vigilancia aérea en algunas partes del imperio. La vigilancia aérea se diseñó como un medio para mantener el orden en las colonias y territorios obligatorios sin desplegar grandes fuerzas terrestres. Si una tribu nativa se negara a pagar sus impuestos u otra autoridad británica desafiada, se enviaría un mensaje por vía aérea aconsejándoles que cumplan con las demandas británicas. Si no cumplían, una unidad de la RAF volaría al área y lanzaría bombas hasta que aceptaran los términos. Aunque el método era barato y hacía cumplir la obediencia, no era efectivo para crear un profundo afecto por el gobierno británico. La vigilancia aérea, a veces mediante bombardeos y otras veces simplemente como amenaza de bombardeo, se empleó por primera vez en Mesopotamia (Irak) después de la revuelta de 1920, y posteriormente se empleó en Somalia, Palestina e India. Incluso hubo una sugerencia de Winston Churchill (1874-1965) de que se usara contra los rebeldes en Irlanda.



Quizás el efecto más significativo del componente de bombardeo de la policía aérea fue que dio forma al pensamiento de lo que se convirtió en un grupo altamente influyente de oficiales de la RAF. Estos hombres creyeron en la efectividad de los bombardeos, y sus opiniones llegaron a dominar el pensamiento defensivo de Gran Bretaña en los años entre las guerras mundiales. "El bombardero siempre sobrevivirá", una frase utilizada por el primer ministro británico, Stanley Baldwin (1867-1947), en 1932 se convirtió en una verdad aceptada. Esa idea, además del deseo de Gran Bretaña de mantener bajos los créditos de defensa y de poder golpear a un enemigo estratégicamente desde una gran distancia, dio forma a lo que se convertiría en la ofensiva de bombardeo de Gran Bretaña en la Segunda Guerra Mundial.

La ofensiva de bombardeo de Gran Bretaña en la Segunda Guerra Mundial fue planeada y dirigida por el Comando de Bombarderos de la RAF, que planificó y ejecutó la campaña de bombardeo y determinó sus objetivos. El Comando de Bombarderos decidió las redadas nocturnas en el área con el objetivo de destruir las capacidades industriales de Alemania y desmoralizar a la población civil. Los principales objetivos fueron los centros industriales en el valle del Ruhr, así como ciudades como Hamburgo, Dresde y Berlín. El Comando Bombardero también se usó a principios de 1944 para brindar apoyo táctico antes de la invasión de Normandía. La campaña de bombardeos aéreos fue un componente importante de la ofensiva británica en la cuerda de la UE, pero no estuvo exenta de controversia. Bomberos del Comando Bombardero sufrieron casi 60 por ciento de bajas (muertos, heridos y capturados). Al mismo tiempo, aunque la campaña lastimó demostrablemente el esfuerzo industrial alemán, nunca se acordó en qué medida lo hizo. De manera similar, a pesar de los cientos de miles de muertes de civiles, el bombardeo de Alemania no destruyó la moral de los civiles, al igual que el bombardeo alemán de Gran Bretaña no había logrado quebrar la resolución civil antes en la guerra.

El bombardeo aéreo continuó siendo una práctica militar británica después de la Segunda Guerra Mundial, pero hubo algunos cambios. La RAF, aunque ya no dependía de flotas de bombarderos, mantuvo la capacidad de lanzar bombas nucleares en caso de una guerra importante con la Unión Soviética. Ese rol fue eventualmente tomado de la RAF cuando, en 1968, los submarinos de misiles de la Royal Navy fueron designados para entregar armas nucleares en caso de una guerra. Sin embargo, la RAF y los aviones de la Royal Navy continuaron utilizando el bombardeo táctico durante el período de posguerra y hasta el siglo XXI. Las unidades de la RAF y la Royal Navy lanzaron bombas en apoyo de las tropas terrestres durante la Guerra de Corea (1950-1953), la Guerra de las Malvinas (1982), las Guerras del Golfo Pérsicas (de 1991 a 2003) y en Afganistán (2002-2014). El bombardeo también se usó (aunque en una escala limitada) para mantener el orden en Malaya contra los rebeldes comunistas y contra la rebelión de Mau Mau en Kenia.

Royal Air Force

La Royal Air Force es el brazo aéreo del ejército británico. Fundada durante la Primera Guerra Mundial, jugó un papel importante en la vigilancia de colonias y en la supresión de movimientos de dependencia en el Imperio Británico del siglo XX.

El vuelo más pesado que el aire tenía solo 11 años cuando, en 1914, comenzó la Primera Guerra Mundial. Al principio los aviones se usaban para observar tropas enemigas y encontrar objetivos. Estos aviones necesitaban protección, por lo que se desarrollaron aviones de combate para protegerlos. A medida que avanzaba la guerra, se introdujeron bombarderos para atacar objetivos militares y civiles. En el apogeo de la guerra, en 1917, una comisión hizo recomendaciones sobre la mejor manera de utilizar la fuerza aérea de Gran Bretaña. Como resultado de esas recomendaciones, se creó una fuerza armada separada, en dependencia de la Armada y el Ejército: el vicio de Royal Naval Air Ser se separó de la Royal Navy y el Royal Flying Corps (RFC) del Ejército para formar La Royal Air Force (RAF).

Con el final de la Primera Guerra Mundial, había preocupación dentro de la RAF de que su existencia podría llegar a su fin si se volvía a atraer a los servicios más antiguos. En este punto, se creó una nueva misión militar que, junto con un rol de administración civil acompañante, garantizó que la RAF sobreviviría.

El imperio británico en 1919 incluía tanto posesiones absolutas como mandatos de la Liga de Naciones. El imperio estaba en su mayor extensión, y Gran Bretaña, agobiada por la deuda de guerra, buscaba una manera barata de mantener el orden en sus posesiones. La RAF se hizo cargo de sí misma ofreciendo un régimen económico de vigilancia aérea y administración territorial: primero en Mesopotamia (Irak), ahora un mandato de la Liga de Naciones y luego en Somalia, Afganistán, la frontera noroeste de India y Palestina. También hubo una propuesta, finalmente descartada, de emplear los mismos medios para mantener la paz en Irlanda.

La RAF, en común con las otras fuerzas armadas británicas, enfrentó serios recortes presupuestarios en las décadas de 1920 y 1930. Pero cuando los planificadores militares comenzaron a prepararse para otra guerra europea, llegaron a ver el bombardeo aéreo no solo como un arma estratégica potencialmente decisiva, sino también como una estrategia rentable. Por lo tanto, la RAF podría ser una fuerza estratégica importante que no requeriría el enorme desembolso en fondos requeridos por el ejército o la marina. Tales cálculos ayudaron a asegurar la existencia de la RAF.

Afortunadamente para la RAF, y para Gran Bretaña, las restricciones de obtención de brotes en tiempo de paz no impidieron el desarrollo de aviones que eventualmente tendrían un impacto significativo en la guerra. Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial en septiembre de 1939, la RAF se expandió rápidamente. Una gran parte de su exitosa expansión fue la incorporación de segmentos de las fuerzas aéreas de la Commonwealth, como la Royal Canadian Air Force y la Royal Australian Air Force. Lotes adicionales y personal de apoyo vinieron de las naciones conquistadas por los alemanes, incluidos miembros de las fuerzas aéreas francesas, belgas, noruegas, polacas y checoslovacas.

Después de la conquista alemana de Francia, la RAF fue el único medio de defensa contra la ofensiva aérea alemana de 1940, conocida como la Batalla de Gran Bretaña. Simultáneamente, la RAF comenzó a lanzar una campaña de bombardeos que eventualmente creció a misiones con 1,000 aviones. En las últimas etapas de la guerra, la RAF llevó a cabo una campaña de bombardeos en el área por la noche. Aunque la destrucción causada por estas redadas fue significativa, especialmente en Hamburgo y Dresde, el esfuerzo ha sido criticado desde el final de la guerra por no haber sido un factor crítico en el daño a la producción de guerra alemana. En otros lugares, las unidades de la RAF se desplegaron en el norte de África, Italia y Asia (principalmente Birmania).

Con el fin de la guerra en Europa en mayo de 1945, los objetivos de la RAF cambiaron al Pacífico. La RAF organizó lo que se conocía como Tiger Force, que se basaría en la isla de Okinawa, que habría llevado a cabo ataques aéreos masivos contra ciudades japonesas. Sin embargo, la rendición japonesa puso fin a ese plan.

La RAF ahora redujo sus números, pero siguió teniendo un papel importante en la defensa de Gran Bretaña y su imperio que ahora se está reduciendo. Desde 1947 hasta 1968, la RAF tenía la responsabilidad de entregar la capacidad nuclear de Gran Bretaña en caso de una guerra con la Unión Soviética. Después de 1968, el rol nuclear estratégico cambió a los submarinos de misiles de la Royal Navy, aunque la RAF continuó su capacidad táctica nuclear para apoyar a las tropas de tierra de la OTAN.

Dentro del imperio, la RAF desempeñó un papel importante en la represión de la Rebelión de Mau Mau en Kenia de 1952 a 1960 y en la lucha contra las guerrillas comunistas en Malaya de 1947 a 1960. En otras partes, la RAF participó en la Guerra de Corea bajo los auspicios de las Naciones Unidas y apoyó a las fuerzas terrestres francesas y británicas durante la crisis de Suez de 1956. Desde 1945 hasta 1967, la RAF mantuvo una base aérea en Aden en la Península Arábiga y apoyó las operaciones del ejército británico en esa área. En 1982, la RAF estaba entre las fuerzas británicas que recapturaron las Islas Falkland de Argentina. La RAF participó en los ejercicios de la OTAN en la década de 1950 hasta la década de 1990 y se desplegó en el Golfo Pérsico en la primera y segunda Guerra del Golfo y en la guerra liderada por los Estados Unidos en Afganistán.

Policía imperial

La policía imperial tenía poco que ver con la policía, ya que ahora se entiende en general en el mundo occidental. La tarea asignada a los policías coloniales era esencialmente imponer y mantener el dominio extranjero sobre los pueblos del imperio, con el objetivo de proteger los intereses de la metrópoli en el país y en el extranjero. Esto generalmente involucraba, potencialmente o en realidad, una gran cantidad de compulsión forzosa. Los agentes de la colonia eran "soldados civiles", agentes estatales de control socioracial que imponían modos de comportamiento y creencias occidentales en sujetos imperiales.

Los policías se distinguían de otros funcionarios estatales por su capacidad autorizada para coaccionar a civiles. Pero en Inglaterra, desde 1829 en adelante, buscaron cada vez más aceptación por parte de la población. Bajo esta "nueva policía", se suponía que la vigilancia policial por parte de los agentes de consentimiento en Inglaterra protegía en lugar de oprimir al público. Centrándose en suprimir el comportamiento que se considera antisocial, y basando sus métodos en un análisis intensivo de la sociedad, buscaron principalmente prevenir los delitos, con la detección de delincuentes como respaldo. Cuando era necesario detener o forzar, se esperaba que usaran una fuerza mínima. El objetivo era lograr una sociedad en la que la mayoría de las personas se vigilaran, al menos la mayor parte del tiempo; La disciplina estatal debería aplicarse solo a individuos recalcitrantes en lugar de a colectividades.
Este estado de cosas deseado, la vigilancia estatal basada en el consentimiento junto con la autovigilancia masiva, también fue un objetivo final en las colonias. Pero se basó en un alto grado de aceptación de la autoridad, que no se produjo. Dado que las autoridades coloniales intentaron explotar los recursos humanos y naturales indígenas, la resistencia popular a ellos fue endémica (aunque algunos indígenas acogieron con satisfacción aspectos de la cultura occidental). Los pueblos colonizados, a su vez, estaban sujetos a la supresión, la represión y, a menudo, a la disciplina violenta en masa. En tales circunstancias, los preceptos de la "nueva policía" que se habían establecido en Gran Bretaña generalmente solo podían seguir siendo una aspiración lejana en las colonias.

En la mayoría de las colonias, la mayor parte del tiempo, la función policial era similar al control militar (y, en realidad, a veces con o con soldados). La principal excepción fue en las colonias de asentamientos donde los preceptos policiales ingleses se adoptaron cada vez más a medida que la frontera se retiraba. Sin embargo, incluso aquí, las fuerzas policiales mantuvieron una capacidad altamente coercitiva en caso de que fuera necesaria una "pacificación" adicional de los indígenas u otros. Y aunque el orden público en general había mejorado a principios del siglo XX, esto era relativo y desigual entre las colonias (ya menudo dentro de ellas). La mejora también podría ser temporal. De hecho, después de la Segunda Guerra Mundial, la vigilancia policial basada en el conflicto a menudo se intensificó en medio de los crecientes desafíos al estado de los movimientos que exigen la descolonización.

El espíritu de la policía colonial era, por lo tanto, por la naturaleza misma de la ocupación imperial, diferente de los objetivos basados ​​en el consentimiento desarrollados por primera vez en la Policía Metropolitana de Londres. Más bien, reflejó (y fue guiado por) la vigilancia policial en la "colonia" más cercana a Gran Bretaña, Irlanda. Aunque todos los policías tenían el poder de obligar y coaccionar, los de la (Real) Policía de Irlanda (RIC) eran mucho más abiertamente coercitivos que sus contrapartes ingleses, encargados de controlar a un pueblo generalmente hostil a la ocupación británica. Las prácticas coloniales no solo reflejaban el sistema irlandés, sino que a menudo lo superaban en su violencia, producto de la magnitud de la tarea de ocupar territorios y contener a sus pueblos.

Sin embargo, existían muchas características compartidas por los modelos de policía ingleses e irlandeses / coloniales (incluido el objetivo final de asegurar una sociedad caracterizada por la paz y el buen orden), y los límites entre ellos eran porosos. En particular, ambos sistemas se basaban en patrullas que realizaban una vigilancia profunda de la población y, cuando era necesario, en una obediencia convincente. Los agentes de rango y archivo en ambos modelos eran, además, de origen humilde, no solo más baratos y fáciles de entrenar, sino que también tenían un profundo conocimiento de los comportamientos y creencias de aquellos sectores de la sociedad en los que la policía se centraba más.

Pero hubo grandes diferencias en el principio operacional entre los modelos. La organización, el espíritu y las operaciones de la policía irlandesa / colonial eran paramilitares (a veces militares) por naturaleza. En contraste, el sistema inglés adoptó cada vez más un enfoque de "policía similar", con agentes que operan dentro y con el apoyo general de sus comunidades. Aunque la mayoría de los policías coloniales de rango superior eran británicos, la gran mayoría de los policías de rango eran indígenas, y en ese sentido se podría decir que encajan en la categoría de "policía similar". Pero esencialmente, los patrulleros coloniales se caracterizaron por el principio de "desconocimiento de la policía". Fueron reclutados fuera de las comunidades que vigilaban, una política basada en personas externas que en general están mucho más preparadas que las internas para ejercer una disciplina severa sobre quienes las rodean. Los extraños agentes de policía generalmente vivían en cuarteles fortificados, patrullaban en grupos pesadamente armados y eran muy disciplinados, listos para obedecer órdenes e infligir violencia sin vacilación. Las patrullas coloniales solían descender sobre tribus que desafiaban a las autoridades, arrasaban sus aldeas y mutilaban y mataban. Procedentes de otras comunidades, tribus, pueblos o colonias, podrían ser incapaces de hablar el idioma de aquellos a quienes disciplinaban.

La policía colonial era un instrumento contundente de control social y racial, a menudo prestaba poca atención a la ley, y mucho menos a los "derechos humanos". En la medida en que estaba involucrado en el control del delito, este era el delito definido por las autoridades y sistemas coloniales. Estos fueron generalmente flexibles al permitir que la policía (y el poder judicial) reprimieran cualquier actividad que se considere contraria a los intereses de la seguridad del Estado y el orden colonial. Muchas de las acciones disciplinarias del estado colonial, en cualquier caso, se llevaron a cabo con poca o ninguna referencia a las leyes formales, de las cuales los agentes (a veces analfabetos) sabían poco. Tenían un trabajo que hacer, que por su propia naturaleza a menudo se realizaba con fuerza y ​​brutalidad; La violencia era endémica en la policía colonial.

viernes, 21 de diciembre de 2018

SGM: Los movimientos hacia el Cáucaso

El camino hacia el Cáucaso

Weapons and Warfare



Stalingrado se convirtió en un símbolo de la resistencia rusa, de la capacidad alemana. También tuvo un importante significado estratégico. Si los alemanes hubieran atravesado el Volga, se habrían cortado a través de las líneas de comunicación rusas, para el petróleo y para el transporte. Stalingrado no fue una búsqueda completamente fácil por parte de Hitler, pero se convirtió en una enorme importancia psicológica. Ambos bandos en este horroroso combate cofre a cofre no pudieron ser desbloqueados. Por un lado, parecía que había que destruirlo y el otro se convirtió en vencedor. Tenía la calidad de una lucha titánica, la importancia política que tanto Hitler como Stalin atribuían a Stalingrado era inmensamente significativa.



Pasos exploratorios: Julio de 1940 - Septiembre de 1942

Para Hitler, el petróleo del Cáucaso siempre había sido uno de los principales atractivos de Rusia. Mencionó la necesidad de apoderarse de los campos petroleros de Bakú el 31 de julio de 1940, durante una de las discusiones iniciales de su plan para invadir la Unión Soviética. En la primavera de 1941, el Alto Mando de las Fuerzas Armadas activó el llamado Cáucaso del Destacamento de Petróleo con el propósito de apoderarse de los campos petroleros. En ese momento, los alemanes esperaban que su avance hacia el Cáucaso fuera tan rápido que los rusos no pudieran dañar severamente los pozos de petróleo, y las tablas de organización y equipo del destacamento de petróleo se establecieron en consecuencia.

El siguiente paso en esta dirección fue la preparación de la Directiva No. 32, distribuida por el Alto Mando de las Fuerzas Armadas entre los tres servicios el 11 de junio de 1941-11 días antes del inicio de la Operación BARBAROSSA. Esta directiva contemplaba un viaje desde el Cáucaso a través de Irán como parte del plan para la continuación de las operaciones contra el Imperio Británico luego de la derrota de los soviéticos. En ese momento, las fuerzas expedicionarias alemanas debían activarse en el Cáucaso y enviarse a través de Turquía y Siria a Palestina y a través de Irak a Basora. La misma directiva también visualizó el uso del movimiento de liberación árabe contra los británicos en el Medio Oriente, y se designó al Personal Especial F para iniciar y coordinar las actividades militares y subversivas correspondientes.

Unos días después, el 16 de junio de 1941, la contrainteligencia alemana presentó al Alto Mando de las Fuerzas Armadas un plan para asegurar los campos petroleros del Cáucaso tan pronto como se manifestara la desintegración interna de la Unión Soviética. Un núcleo de 100 georgianos, entrenados por agentes de contrainteligencia alemanes en sabotaje y tácticas de revuelta, existía en Rumania. Estos georgianos tendrían que ser llevados a los campos petrolíferos por transporte marítimo o aéreo tan pronto como las fuerzas terrestres alemanas se acercaran a la región del Cáucaso. En una vena algo optimista, el plan previó el empleo de los georgianos en dos o tres semanas después del Día D.

El 24 de julio de 1941, la División de Operaciones del Ejército redactó un memorando sobre la conducción de las operaciones después de la conclusión de la Operación BARBAROSSA. Con respecto al Cáucaso, se anticipó que los británicos tomarían y bloquearían esta área tan pronto como los alemanes se acercaran al Mar de Azov. Se creía que las primeras concentraciones de tropas británicas tenían lugar a lo largo de la frontera norte y este de Irak. Debido a las dificultades del terreno, una ofensiva alemana desde las laderas del sur del Cáucaso a través de Irán hacia Irak no pudo ejecutarse antes de la primavera de 1942. Mientras tanto, se recopilaron datos sobre el Cáucaso; se elaboró ​​una lista de turistas alemanes, que habían escalado las montañas del Cáucaso durante los últimos años y conocían el terreno y las condiciones meteorológicas, y se examinaron cuidadosamente los libros que trataban los mismos temas.

A principios de agosto, el personal de operaciones navales de Alemania presentó una estimación de la probable reacción de la flota soviética del Mar Negro en caso de una penetración alemana en el Cáucaso. Se creía que la flota podía obstaculizar seriamente las operaciones manteniendo el camino costero y el ferrocarril entre Tuapse y Sukhumi bajo fuego. Entre los barcos soviéticos adecuados para tales operaciones había un acorazado, seis cruceros y 15 modernos más cinco destructores obsoletos. En el área del Mar Negro, la Marina alemana no tenía unidades capaces de detener o perturbar los movimientos de la flota soviética. Las baterías costeras serían de uso limitado; incluso si llevaban a los barcos soviéticos más lejos de la costa, estos últimos seguirían estando al alcance de la costa. La protección de la fuerza aérea era el único medio eficaz de salvaguardar el tráfico costero.

A fines de septiembre, los informes de los agentes y las interceptaciones de radio indicaban que los rusos tenían de cinco a seis divisiones en el Cáucaso y tres en Irán. Se estimó que las tropas británicas que ingresan a la Unión Soviética tardarían tres semanas en llegar de Irán al Cáucaso y cuatro semanas a Crimea.

EL PRIMER PLAN PARA UNA OPERACIÓN DEL CAUCASO: OCTUBRE DE 1941

En octubre de 1941, la División de Operaciones del Alto Mando del Ejército elaboró ​​el primer plan detallado para una operación en el Cáucaso. El alcance de la ofensiva se limitó a apoderarse de los recursos petroleros del Cáucaso y llegar a los pasos fronterizos iraníes e iraquíes para un posible avance hacia Bagdad. [Vea el mapa de referencia general del área del Cáucaso arriba.] La operación debía ejecutarse en seis fases separadas, que se extiende desde noviembre de 1941 hasta septiembre de 1942. Estas fases se describen a continuación:
  1. La incautación de los accesos al norte del Cáucaso, a partir de noviembre de 1941;
  2. Una serie de ataques preliminares que llevaron a la incautación de áreas de salto favorables para mayo de 1942;
  3. Lanzamiento de la ofensiva en las montañas del Cáucaso en dos etapas diferentes en junio de 1942;
  4. El avance a través de Transcaucasia hacia las fronteras turcas e iraníes;
  5. La incautación de áreas favorables de desempate dentro de Irán; y
  6. Captura de la frontera que pasa a Irak. Las tres últimas fases se desarrollarían en el período comprendido entre julio y principios de septiembre de 1942.
La viabilidad de toda la ofensiva dependería del curso tomado por las operaciones actuales en el teatro ruso. La segunda y tercera fases solo podrían ejecutarse si las tropas alemanas alcanzaran el Volga inferior durante el invierno de 1941-42. El alcance de los ataques preliminares que se lanzarán durante la segunda fase dependería del plan general adoptado para la ofensiva en todo el Cáucaso. Este último podría iniciarse a través de las dos carreteras que siguen las costas del Mar Negro y Caspio, respectivamente, y sobre la carretera de montaña que conduce a Tiflis. Los caminos interiores cruzaron las montañas a lo largo de más de 10,000 pies de altura. Estos caminos solo podían ser negociados por divisiones de montaña. El movimiento a lo largo de la carretera costera del Caspio sería más fácil porque solo unos pocos destructores rusos anticuados podrían interferir.

Durante la primera etapa de la ofensiva propiamente dicha, se emplearían dos cuerpos motorizados y dos montañeses, conduciendo hacia Sukhumi y Kutaisi en el oeste, Tiflis en el centro y Bakú en el este, respectivamente. Tan pronto como cualquiera de estas fuerzas logró un gran avance, un cuerpo motorizado adicional que se mantenía en reserva era avanzar y lanzar la persecución. El compromiso de esta fuerza de reserva determinaría dónde se ubicaría el punto de mayor esfuerzo durante la segunda etapa de la ofensiva.

El empleo de dos cuerpos en el oeste durante la primera etapa sería necesario debido a la vulnerabilidad de las líneas de comunicación a lo largo del Mar Negro. Además, en el oeste fue la única apertura para lanzar una unidad envolvente, ya que las condiciones desfavorables del terreno impidieron cualquier maniobra de este tipo en otros lugares. Durante la segunda etapa de la ofensiva, los cuerpos de reserva tendrían que explotar la penetración en las montañas, que podría empujar a través de la carretera costera del Mar Negro a Batumi y de allí a través de Tiflis a Baku; o a través de las montañas a Tiflis y de allí a Batumi o Baku; o a lo largo de la costa del Caspio hasta Bakú y de allí, si es necesario, a Tiflis.

Mientras la ofensiva estaba en curso, los contingentes navales alemanes tendrían que proteger a Novorossiysk y Tuapse tomando las baterías costeras capturadas. Además, algunos submarinos tendrían que mantener a la flota rusa del Mar Negro bajo control, y la Marina también tendría que disponer del espacio de envío necesario para llevar suministros desde Novorossiysk a Batumi una vez que la flota rusa hubiera sido eliminada.

La Luftwaffe tendría que proteger y apoyar a las fuerzas terrestres; combatir la armada roja y sus puertos; cometer tropas aerotransportadas para capturar las principales ciudades; Usa bombarderos en picado contra las fortificaciones del pase. y preparar aviones de transporte para el suministro aéreo.

Este plan recibió la aprobación general en una conferencia exploratoria celebrada en la sede del Alto Mando del Ejército a solicitud de la División de Operaciones el 24 de octubre de 1941. Un ataque en todo el Cáucaso se consideró la solución más rápida para los problemas de Oriente Medio de Alemania. El efecto de tal ofensiva induciría a Turquía a unirse a los Poderes del Eje. Además, las fuerzas británicas que de otro modo se opondrían a Rommel en el norte de África estarían atadas en Irán.

Una ofensiva lanzada en la primavera de 1942 primero conduciría a la incautación de los campos petrolíferos del Cáucaso, luego abriría los pases de Irán a Irak y finalmente permitiría la captura de los campos petroleros iraquíes en el otoño de 1942, cuando el clima favoreció Compromiso de grandes fuerzas de tierra. El requisito previo esencial para tales operaciones de gran alcance fue la incautación de la orilla oeste del bajo Volga de Stalingrado a Astrakhan. Esta realización implicaba que si, por ejemplo, los alemanes no lograban capturar Stalingrado, sería necesaria una reevaluación completa de los planes para una ofensiva contra el Cáucaso.

Entre los preparativos esenciales para una operación en el Cáucaso discutidos en esta conferencia estuvieron la producción de mapas militares y ropa tropical, así como la activación y el equipo de tropas especiales de montaña.

PLANIFICACIÓN DEL CAUCASO: NOVIEMBRE DE 1941.

En una conversación con el mariscal de campo von Brauchitsch el 7 de noviembre, Hitler mencionó que la incautación de los campos petroleros tendría que retrasarse hasta el año siguiente. Este retraso en realidad había sido anticipado por la División de Operaciones del Alto Mando del Ejército. Sin embargo, el Führer planteó un nuevo punto cuando agregó que no tenía intención de ir más allá de la frontera rusa. El alcance de la ofensiva se limitó así al Cáucaso; este cambio en los planes probablemente se debió a la desaceleración en el avance de 1941 causado por la temporada fangosa.
Según toda la inteligencia disponible, el Ejército Rojo tenía la intención de oponer resistencia en el Cáucaso. Para el 9 de noviembre, las unidades de intercepción alemanas habían identificado 5 cuarteles generales del ejército en esa área. De ser exacta, esta información implicaría la presencia de al menos 15 divisiones, mientras que antes de ese tiempo se había asumido la presencia de solo 5. Parecía improbable que los rusos trasladaran fuerzas considerables a través de su frontera hacia Irán. Y parecía aún más improbable que los británicos enviaran fuerzas fuertes hacia el norte hacia el Cáucaso. Por el momento, la situación en el Cáucaso seguía siendo oscura.

En una conversación con el general Halder el 19 de noviembre, Hitler declaró que el primer objetivo para 1942 sería el Cáucaso. Una ofensiva lanzada con este propósito en marzo-abril de 1942 llevaría a las fuerzas alemanas a la frontera soviética con Irán. Dependiendo de la situación a fines de 1941, las ofensivas en el centro podrían luego lanzarse más allá de Moscú hacia Vologda o Gorki para fines de mayo de 1942. Otros objetivos para 1942 aún no podrían ser designados.

Su alcance dependería principalmente de la capacidad de los ferrocarriles. La cuestión de si posteriormente se construiría un muro defensivo que separa a la Rusia asiática de la europea continuaría abierta.

Hitler reveló así una serie de datos interesantes. Incluso hasta el 19 de noviembre, parecía convencido de que los alemanes podrían capturar Moscú antes de finales de 1941. Además, parecía creer que la ofensiva del Cáucaso en un terreno montañoso difícil podría ejecutarse con éxito en unas pocas semanas en abril y mayo. , como una especie de interludio del sur antes de otra ofensiva más al norte. Tres días después, el 22 de noviembre de 1941, Halder ordenó una división de infantería ligera organizada para la operación del Cáucaso y el personal de las montañas se retiró del combate. Hasta 16 días antes del cambio de marea frente a Moscú, la atmósfera en el cuartel general del Alto Mando del Ejército parecía definitivamente optimista.

EFECTOS DE LA PREPARACIÓN DE MOSCÚ: ENERO DE 1942

Una orden fechada el 10 de enero de 1942, originada en la Oficina de Economía de las Fuerzas Armadas y la Rama de la Organización del Personal de Operaciones de las Fuerzas Armadas y firmada por Hitler, reveló las limitaciones materiales recientemente impuestas, si no el cambio en el alcance, de las operaciones de 1942.

En el párrafo introductorio, Hitler declaró que los planes estratégicos a largo plazo se mantuvieron sin cambios; La Armada y la Luftwaffe se ampliarían para el enfrentamiento con las potencias anglosajonas. Sin embargo, hasta nuevo aviso, las operaciones programadas para 1942 no permitirían una reducción de armamentos destinados al Ejército. Por el contrario, el Ejército tendría que recibir incluso más que su parte ordinaria de mano de obra y armamento para poder cumplir su misión para 1942.

En efecto, el Ejército debía tener la máxima prioridad en la producción de armamento. Dondequiera que se desarrollara la escasez de materias primas, la Armada y la Luftwaffe tendrían que tomar los cortes. Se recomendó una mayor estandarización, la introducción de más sustitutos y un mayor uso de municiones capturadas como medios para superar los cuellos de botella en la producción.

Las fuerzas de tierra debían estar listas para el compromiso ofensivo antes del 1 de mayo de 1942; Los suministros para al menos cuatro meses de operaciones continuas tendrían que acumularse para ese momento. Las unidades que participan en la ofensiva deberían contar con tropas de suministro y servicio, así como vehículos motorizados, mientras que las que se cometen en la Costa Atlántica no necesitarán muchos camiones. Los suministros de municiones para todas las armas utilizadas en el teatro ruso deberían acumularse hasta un mes de gastos además de la carga básica.

La Marina debía concentrarse en la construcción y mantenimiento de submarinos. La Luftwaffe continuaría con sus programas actuales, a excepción de una reducción temporal de sus planes de municiones y de producción de bombas.

Entre los programas económico-militares, el petróleo tenía prioridad. El transporte ferroviario, la señal y otros programas debían llevarse a cabo siguiendo las mismas líneas que antes, mientras que la salida del vehículo motorizado debía aumentarse. Los requerimientos de personal militar debían ser coordinados con los industriales.

Quizás la nota más llamativa en este orden fue su tono pesimista. Escrito en un momento en que los alemanes estaban tratando desesperadamente de contener la marea rusa al oeste de Moscú, la orden mostraba las muchas debilidades en la máquina de guerra alemana que se había manifestado después de menos de siete meses de lucha en Rusia. Durante las siguientes semanas, la planificación de la ofensiva de verano llegó a un punto muerto, probablemente debido a la lucha de vida o muerte que se desató en el frente del Centro del Grupo de Ejércitos.

LOS PRIMEROS PEDIDOS PREPARATORIOS: FEBRERO DE 1942

Con el grave peligro pasado en el frente, los planificadores militares pudieron perseguir más activamente los preparativos para una ofensiva de verano. El 12 de febrero de 1942, la División de Operaciones del Alto Mando del Ejército emitió una directiva para la conducción de las operaciones después del final del invierno. Una declaración introductoria anticipó que la ofensiva rusa de invierno no lograría destruir a las tropas alemanas y su equipo. Durante las próximas semanas, los alemanes tendrían que consolidar sus líneas, eliminar a las fuerzas rusas que habían penetrado en sus áreas de retaguardia y, en general, intentar tomar la iniciativa. Al mismo tiempo, tendrían que prepararse para el período fangoso después del deshielo primaveral.

Luego, la directiva entró en gran detalle al describir los diferentes aspectos de la temporada fangosa y las contramedidas a tomar. El Alto Mando del Ejército tenía la intención de utilizar esta probable pausa en las operaciones para rehabilitar y reagrupar sus fuerzas.



  • El Grupo de Ejércitos del Sur debía mantener sus posiciones y hacer los preparativos para la ofensiva planeada. Primero, habría que eliminar la penetración rusa al oeste de Izyum, luego recobrarse la Península Kerch y apoderarse de Sebastopol, para que las fuerzas estacionadas en Crimea estuvieran disponibles para el empleo en otros lugares.
  • El Grupo de Ejército del Centro debía apoderarse de Ostashkov y acortar su línea frontal eliminando varias abolladuras y penetraciones.
  • El Grupo de Ejércitos Norte debía mantener sus líneas cerca de Kholm, Staraya Russa y al norte del Lago Ilmen.

Después del final de la temporada fangosa, los tres grupos del ejército debían mejorar sus líneas de frente y establecer posiciones defensivas continuas, de ser posible. Debido a la precaria situación de la oferta, parecía dudoso que se pudieran tener más puntos fuertes aislados en ciertos sectores del frente. Las reservas blindadas y motorizadas deberían ser ensambladas en áreas accesibles.
Las unidades retiradas de la línea del frente para rehabilitación tendrían que entrenar a sus reemplazos recién llegados sobre la base de la experiencia pasada en combate. Debido a la escasez de equipos, solo un cierto número de divisiones podrían ser totalmente rehabilitadas. Los seleccionados para este propósito fueron las divisiones blindadas y motorizadas, así como las tropas del ejército y el cuerpo del Grupo de Ejércitos del Sur, y tres divisiones blindadas y tres de infantería motorizada, así como algunas de las tropas del ejército y el cuerpo de los Grupos de Ejércitos Centro y Norte. En el proceso de rehabilitación, cada división blindada debía tener tres batallones de tanques, y cada división de infantería motorizada uno. Las divisiones blindadas de los Grupos de Ejércitos Centro y Norte que no se rehabilitarían tendrían que transferir algunos de sus cuadros al sur. Tres divisiones blindadas y seis de infantería del Army Group Center debían trasladarse a Europa occidental sin su equipo. Allí debían ser completamente rehabilitados y reequipados. Las divisiones blindadas y de infantería motorizada que permanecen en el Grupo de Ejércitos Centro y Norte tendrían que rehabilitarse en la línea sin recibir ningún equipo nuevo. Las divisiones blindadas en esta categoría probablemente tendrían un solo batallón de tanques. Aproximadamente 500,000 reemplazos llegarían al teatro a fines de abril de 1942.

Se establecería un área especial de rehabilitación para el Grupo de Ejércitos Sur cerca de Dnieperopetrovsk, mientras que para el Grupo de Ejércitos se podrían establecer áreas similares cerca de Orsha, Minsk, Gomel y Bryansk. Esas pocas unidades del Grupo de Ejércitos Norte que se rehabilitarían probablemente serían transferidas a la Zona del Interior. La rehabilitación debía comenzar a mediados de marzo a más tardar. Después de la temporada fangosa, las unidades totalmente rehabilitadas del Centro del Grupo de Ejércitos serían transferidas al Grupo de Ejércitos del Sur.

Las exigencias de los últimos meses han llevado al compromiso de un gran número de especialistas técnicos como soldados de infantería. La situación general del personal y la escasez de hombres técnicamente capacitados hicieron imperativo devolver a todos los especialistas a su asignación apropiada o usarlos como cuadros para las unidades recién activadas. La futura eficiencia de combate del Ejército dependería de la aplicación efectiva de esta política.

La alta tasa de desgaste de material y la capacidad limitada de la industria del armamento fueron razones de peso para mantener las pérdidas de armas y equipo al mínimo.

En la orden de implementación a los grupos y ejércitos del ejército, la División de Organización del Alto Mando del Ejército ordenó el 18 de febrero que las divisiones móviles que debían ser totalmente rehabilitadas recibirían entre el 50 y el 60 por ciento de su asignación de vehículos motorizados prescrita y las divisiones de infantería. al 50 por ciento. Cada compañía de infantería iba a recibir cuatro rifles automáticos y cuatro carabinas con miras telescópicas; Se introducirían granadas de rifle perforantes. Todas las oficinas centrales interesadas debían presentar informes bimensuales sobre la escasez de mano de obra y equipo, así como sobre la capacitación y rehabilitación actuales de las unidades.

El elemento sorpresa fue esencial para el éxito de la ofensiva de verano. El 12 de febrero, Keitel emitió la primera directiva para engañar a los rusos sobre las futuras intenciones alemanas. Los siguientes agentes de contrainteligencia alemanes jugaron la siguiente información en manos de la inteligencia soviética:

Al final de la temporada fangosa, los líderes militares alemanes intentaron lanzar una nueva ofensiva contra Moscú. Para este propósito, querían concentrar fuerzas fuertes moviendo las divisiones recién activadas al teatro ruso e intercambiando las que estaban cansadas de la batalla en el Este por nuevas del Oeste. Después de la captura de Moscú, los alemanes planearon avanzar al Volga medio y apoderarse de las instalaciones industriales en esa región.

La asamblea de fuerzas iba a tener lugar en secreto. Para este propósito, la capacidad de los ferrocarriles debía aumentarse antes de que las divisiones fueran transferidas desde el Oeste. Mientras tanto, las fuerzas alemanas y aliadas lanzaron un importante ataque engañoso en dirección a Rostov.

En cuanto a Leningrado, la opinión predominante fue que esta ciudad perecería sola tan pronto como el hielo en el lago Ladoga se hubiera derretido. Entonces los rusos tendrían que desmontar el ferrocarril y los habitantes volverían a estar aislados. Atacar en esta zona parecía innecesario.

Además, las tropas alemanas que estaban destinadas al teatro ruso y actualmente estacionadas en Occidente debían ser engañadas por la emisión de mapas militares y datos geográficos pertenecientes al área de Moscú. A las unidades que ya estaban en el teatro no se les daría ninguna información engañosa hasta que se hubieran concluido las batallas defensivas actuales. La misma directiva también solicitó al Ejército y a la Luftwaffe que presentaran sugerencias para otras medidas engañosas. Se hizo mucho hincapié en el mantenimiento del secreto.

EL PAPEL DE LA ARMADA: FEBRERO DE 1942

La principal preocupación de la Marina alemana en el área del Mar Negro era el transporte de suministros para el Ejército. Las dificultades fueron causadas por la escasez de espacio de envío y la ausencia de escoltas y buques de combate. Las medidas tomadas para mejorar la posición alemana en el Mar Negro incluyeron el traslado de barcos PT, barcos antisubmarinos italianos, submarinos pequeños y embarcaciones de desembarco; También se estaban colocando campos de minas. Se habían emitido órdenes para acelerar estas medidas y apoyar al Ejército mediante el suministro de suministros. Las fuerzas navales rusas en el Mar Negro tendrían que ser atacadas y destruidas. El grado de éxito obtenido determinaría el resultado de la guerra en el área del Mar Negro. Se llamó la atención sobre el hecho de que con el tiempo sería necesario ocupar todas las bases y puertos rusos del Mar Negro.

Por otro lado, el resto de la flota báltica rusa estacionada en y alrededor de Leningrado no tenía valor estratégico ni táctico. Las municiones y los suministros de combustible eran extremadamente bajos. Cerca de 12 de los barredores de minas de alta velocidad habían sido hundidos hasta el momento, de modo que solo quedaban cuatro o cinco. Alrededor de 65 de los 100 submarinos habían sido hundidos por los alemanes.

LA ESTIMACIÓN DE INTELIGENCIA: 20 DE FEBRERO DE 1942

En un resumen fechado el 20 de febrero de 1942, la División de Inteligencia del Este del Alto Mando del Ejército declaró que los rusos anticipaban una ofensiva alemana dirigida contra el Cáucaso y los pozos petroleros en esa área. Como contramedida, el Ejército Rojo tendría la opción de echar a perder la ofensiva y la retirada estratégica. Asumiendo que los rusos atacarían, se estimaba que su ofensiva tendría lugar en el sur. Allí podrían interferir con los preparativos de ataque alemanes, volver a ocupar áreas económicamente valiosas y aterrizar muy atrás de las líneas alemanas a lo largo de la costa del Mar Negro. Si fueran lo suficientemente fuertes, los soviéticos también intentarían atar a las fuerzas alemanas mediante una serie de ataques locales en los sectores de Moscú y Leningrado.

Numerosos informes de agentes alemanes en territorio controlado por los soviéticos indicaron que el Ejército Rojo había estado planeando la recuperación de Ucrania durante algún tiempo. Lo antes posible, el ataque ruso podría tener lugar inmediatamente después de la temporada fangosa, i. mi. A principios de mayo.

Las fuerzas rusas identificadas frente al Grupo de Ejércitos Sur consistían en 83 divisiones de infantería y 12 brigadas de infantería, así como 20 divisiones de caballería y 19 brigadas blindadas, más un número desconocido de unidades recientemente organizadas.

La interferencia de las fuerzas británicas parecía poco probable. Este último se trasladaría al área del Cáucaso solo si sus líneas de suministro pudieran asegurarse de manera adecuada, un proceso que consume tiempo y que ni siquiera se había iniciado. Por otro lado, el material de préstamo y arrendamiento estaba llegando en cantidades considerables; los primeros aviones de combate de los EE.UU. se habían encontrado a lo largo del frente del Sexto Ejército alemán.

PREOCUPACIONES DE HITLER: ANTES DE MARZO DE 1942

El 5 de marzo, una orden firmada por Keitel resumió las diversas instrucciones emitidas por Hitler a los servicios durante las últimas semanas. En la parte general de esta orden, se recordó al Ejército y a la Luftwaffe que los ataques prematuros realizados sin concentrar suficientes fuerzas habían fallado en varias ocasiones. Los esfuerzos para detener las penetraciones rusas en todo el frente habían llevado a un compromiso y disipación poco sistemáticos de las fuerzas terrestres. Los rusos tendrían que ser detenidos allí donde amenazaban comunicaciones vitales. En el caso de un avance soviético, se reunirían unidades de fuerza completa junto con el saliente y la brecha se cerraría una vez que el grueso de las fuerzas rusas hubiera pasado.

Se permitían rectificaciones menores de las líneas de defensa siempre que no se abandonaran instalaciones importantes. No se lanzaron ataques locales, cuyos resultados estaban fuera de proporción con las pérdidas. El apoyo de la Luftwaffe se solicitaría solo para operaciones esenciales, como destruir concentraciones de armaduras soviéticas antes de un ataque. Muchos ataques rusos podrían demorarse o debilitarse por completo más allá de la reparación interrumpiendo las líneas de comunicación soviéticas. Para lograr un mayor efecto, las bombas más pesadas disponibles se usarían para ataques aéreos. Dado que había una escasez de artillería a lo largo de muchos tramos del apoyo aéreo efectivo frontal para operaciones ofensivas era esencial. Debido a la emergencia actual, el transporte aéreo era tan escaso que no se podían realizar operaciones adicionales de transporte aéreo durante el período fangoso.

En la segunda parte de la orden, la misión de cada grupo del ejército para el futuro inmediato se expuso de la siguiente manera:

A. Grupo de Ejército del Sur 

  1. Si la Crimea se tomara con un mínimo de retraso, la Península Kerch tendría que ser capturada antes de comenzar el sitio de Sebastopol. Los puertos rusos y la flota del Mar Negro tendrían que ser neutralizados desde el aire antes de que se iniciaran las operaciones en tierra en Crimea.
  2. El siguiente paso fue eliminar el saliente de Izyum dejando primero que los soviéticos agotaran su poder ofensivo en esa área y luego cortando el saliente mediante embates dirigidos desde los hombros. Las divisiones blindadas del Primer Ejército Panzer debían llevar a cabo estos empujes y, por lo tanto, tenían la máxima prioridad en las entregas de tanques y vehículos motorizados.

B. Grupo de Ejércitos del Centro 

Todas las fuerzas disponibles en el área del Centro del Grupo de Ejércitos se reunirían para un Noveno Ejército en dirección a Ostashkov. Este impulso se llevaría a cabo antes del período fangoso de la primavera. Las líneas de comunicación que habían sido interrumpidas con frecuencia tendrían que ser aseguradas.

C. Grupo de Ejércitos del Norte

Las operaciones de transporte aéreo que se habían iniciado para poner la situación bajo control debían acelerarse. Se debían subir más refuerzos para permitir la consolidación de la situación en Demyansk y evitar un encierro a lo largo del Volkhov. Eventualmente, el Décimo Sexto Ejército atacaría desde el área de Staraya Russa en un movimiento que debía coordinarse con el Noveno Ejército hacia Ostashkov. El VIII Cuerpo Aéreo debía apoyar esta operación, así como la maniobra Volkhov.

Otra directiva, firmada por Hitler el 14 de marzo, abordó el problema de la asistencia aliada a la Unión Soviética. Declaró que los esfuerzos británicos y estadounidenses para reforzar el poder de resistencia de Rusia durante los meses decisivos de 1942 deberían ser frenados. Para este propósito, los alemanes tendrían que reforzar sus defensas costeras en Noruega para evitar los desembarques de los aliados a lo largo de la costa ártica, particularmente en el área de la mina de níquel Petsamo, en el norte de Finlandia. Además, la Marina tendría que intensificar las operaciones submarinas contra los convoyes que cruzan el Océano Ártico. La Luftwaffe debía reforzar sus unidades de reconocimiento y bombarderos de largo alcance en el extremo norte y transferir la mayor parte de sus aviones de torpedos a esa área. Las unidades voladoras debían mantener los puertos rusos a lo largo de la costa de Murmansk bajo un ataque constante, aumentar sus actividades de reconocimiento e interceptar convoyes. La cooperación estrecha entre servicios era esencial.


LA SITUACIÓN: FIN DE MARZO DE 1942.

La situación general se mantuvo estática durante el mes de marzo. Los rusos mostraron signos de agotamiento, mientras que los alemanes fueron incapaces de lanzar ningún contraataque importante. Como dos boxeadores aturdidos, los oponentes se miraron cautelosamente, ninguno de ellos lo suficientemente fuerte como para asestar un golpe de gracia. La debilidad de los rusos se manifestó a través de una serie de incidentes. En el área alrededor de Velizh, por ejemplo, los alemanes capturaron rifles, cuyas colillas no estaban terminadas, lo que indica que las armas se habían entregado antes de que estuvieran listas. La escasez de armas de infantería, aunque no era nada nuevo, parecía más aguda que nunca. Los prisioneros rusos declararon que se estaban utilizando rifles de madera para entrenar reclutas en la Zona del Interior. En otro caso, las divisiones de caballería rusas frente al grupo del Ejército del Sur eran tan escasas de caballos (su fuerza se había reducido a aproximadamente 60 caballos por regimiento) que los hombres tenían que ser empleados como infantería.

La verdadera condición de las fuerzas alemanas se pudo recopilar de un informe de estado del 30 de marzo de 1942. De un total de 162 divisiones de combate en el teatro ruso, solo ocho estaban disponibles de inmediato para cualquier misión, tres fueron capaces de misiones ofensivas después de un descanso período, 47 estaban disponibles para misiones ofensivas limitadas, 73 eran completamente adecuadas para misiones defensivas, 29 solo eran capaces de misiones defensivas limitadas y dos no eran adecuadas para un compromiso inmediato. Las 16 divisiones blindadas en el teatro tenían un total de 140 tanques reparables, es decir, menos que el complemento normal de una división. Debido a la escasez de vehículos motorizados y motores principales, pocas divisiones tenían más del 20% de movilidad. Los pocos tanques disponibles y cañones autopropulsados ​​se distribuyeron entre varias divisiones blindadas e de infantería.

En estas condiciones, la llegada de la temporada fangosa a fines de marzo, que prácticamente impuso una tregua en los combates, fue un alivio para los dos protagonistas. Aunque el barro fue menos severo que durante el otoño anterior, no obstaculizó las operaciones durante algún tiempo.

Durante marzo, el Grupo del Sur del Sur no participó en ninguna lucha a gran escala, y Bock, que había asumido el mando del grupo del ejército después de la repentina muerte de Reichenau el 17 de enero de 1942, utilizó esta calma para reforzar el muro alrededor de la brecha rusa cerca de Izyum.

En el área del Centro del Grupo de Ejércitos continuaron los intensos combates en la retaguardia de los Ejércitos Cuarto y Noveno. Los rusos hicieron todo lo posible para suministrar sus fuerzas detrás del frente alemán, y ejercieron una presión constante sobre la única línea de suministro del Grupo de Ejércitos, el ferrocarril Smolensk-Vyazma-Rzhev. Los esfuerzos alemanes para mantener esta ruta abierta fueron impedidos por una escasez de tropas. Además, en el área de Vitebsk-Velikiye Luki había una amenaza latente que los alemanes no pudieron eliminar. Pero tuvieron la suerte de que los rusos en esta región habían