El busto de Eva Perón oculto en las Sierras
Sierra de la VentanaPor Sergio Marto
Hace pocos días atrás, dábamos a conocer la historia bélica que se vivió en nuestras sierras durante los días del golpe de estado de 1955, y que tuvo como protagonista principal a la localidad de Villa Ventana.
A raíz de esa nota, algunos lectores de la región me han estado haciendo llegar datos y anécdotas de gran valor histórico, que van completando como piezas faltantes de un rompecabezas, los hechos que efectivamente tuvieron lugar en las Sierras de la Ventana.
Si no tuviste oportunidad de leer esa nota, te dejo aquí el enlace: La batalla en Villa Ventana por la revolución del 55.
Así fue que Juan Carlos, nos aportaba su recuerdo de cuando tenía 7 años y vivía en Saldungaray, y que en esos complejos días de setiembre, la escuela N°2 había sido acondicionada como Hospital de Emergencia. Juan Carlos nos relata que tiene muy presente haber visto 3 o 4 personas pintando una cruz roja en el techo de la escuela, para que fuera identificada desde el aire como Hospital y así evitar que fuera bombardeada. También que varias señoras se habían ofrecido como enfermeras voluntarias, ya que allí fueron atendidos algunos de los heridos durante el enfrentamiento producido el 18 de setiembre de 1955 en Villa Ventana, entre las fuerzas leales a Perón y la aviación naval de Puerto Belgrano (sublevados).
Por su parte, Ricardo Olivera nos cuenta que tenía 6 años y que los soldados tomaron Sierra de la Ventana bajando por la Villa San Bernardo (actualmente barrio). Recuerda que vivía en esa época en la esquina de avenida Tres picos y Cruz del Sur, y haber visto pasar los aviones. También que en la noche se refugiaban en una estancia cercana, por qué decían que la aviación naval iba a bombardear Sierra de la Ventana.
Clelia Salerno recuerda que todos los vecinos de ese momento: De la Torre, Trespalacios y Shulter de Villa Ventana, se refugiaron 3 días en la casa de su abuelo Ramón Salerno (al fondo de la villa). Eran un total de 25 personas, entre grandes y chicos. Dice: “se carneaba ovejas de la familia para darle de comer a todos. Los aviones cada 40 minutos pasaban en vuelo rasante y combatían en la entrada a Villa Ventana”.
Pero dentro de toda la historia vivida en esos 3 días y que contáramos en nuestra nota especial de Sierrasdelaventana.com.ar hubo una parte que le llamo la atención a muchos de nuestros lectores, vinculada a los sucesos que se produjeron en torno al busto de Eva Perón en la localidad de Sierra de la Ventana.
Para quienes no la leyeron, narrábamos que ese 17 de septiembre en Sierra de la Ventana, un grupo de antiperonista ató con alambre de púas el busto de Eva Perón en la plaza frente al Puente Negro, para luego arrastrarlo con un tractor por las calles de la localidad, y destrozarle el rostro a la figura (parte de la nariz, un ojo y su pómulo derecho) con una llave metálica.
Por la tarde el busto de Eva Perón terminó en el fondo de la fuente de la plaza, y cuando se calmaron las cosas por la noche, tres vecinos peronistas: Mario Grenz, Enrique Morón y Manuel Bidegaray, recuperaron el busto y a caballo fueron a esconderlo en una cueva sobre las sierras del Pillahuincó.
El busto de Eva Perón oculto en una cueva en el año 1981.
Aquí es donde les presentamos un reciente aporte de Osvaldo Fernández, un médico Veterinario que vivió en nuestra localidad y actualmente lo hace en la zona de Frapal con un pequeño emprendimiento “Olivos de Frapal”. Osvaldo nos aporta imágenes inéditas sacadas por el mismo en el año 1981, del busto de Eva Perón oculto en una cueva en las Sierras, y nos comenta que fue llevado hasta una cueva en el Cordón Esmeralda (detrás de El Pinar / Ruta 76), por el señor Bidegaray, y no en el cordón Pillahuinco como teníamos registrado inicialmente.
Osvaldo también nos cuenta que el Señor René Grancetti relataba el intento de derrumbar el puente ferroviario que cruza de Villa La Arcadia a Sierra de la Ventana (El Puente Negro), por aviones de la Armada. Dice: René guardaba un trozo de riel que había perforado el techo de su casa al fondo de la confitería Cashuati.
Para finalizar, quiero agradecer estos aportes a nuestros lectores y vecinos, ya que representan una enorme contribución al acervo histórico y tradición oral de la región, e invitar a quienes estén leyendo estas líneas y tengan algún recuerdo relacionado con estos y otros hechos, a compartírnoslos dejando su comentario (abajo).