viernes, 16 de noviembre de 2018

PGM: La industrialización de las matanzas

La ‘Gran Guerra’: una barbarie industrializada que cambió el siglo XX

France 24



  © data.culture.gouv.fr | Fábrica de proyectiles de artllería en Saint-Etienne, Francia, en 1916.

Texto por Tristan Ustyanowski


De 1914 a 1918, Europa fue el escenario de una guerra mundial marcada por una escala de violencia nunca vista, hecha posible por los adelantos tecnológicos de la industria militar. Un conflicto que cobró la vida de millones y barrió ciudades enteras.

Se encontraban en pie de guerra mucho antes de entrar en acción. Las potencias europeas preparaban tanto a sus tropas como a la población para entrar en conflicto. En 1914, la configuración de los dos bloques, conformados por Francia, Rusia e Reino Unido por un lado –la Triple Entente- y los imperios germánico y austrohúngaro e Italia –la Gran Alianza- por otro.

 Era un mundo todavía repartido entre imperios y en el cual las fronteras impuestas a finales del siglo XIX se veían fragilizadas por las diferentes reivindicaciones que surgían entre los pueblos. La primera guerra de los Balcanes, entre 1912 y 1913, que dejó medio millón de muertos, había dejado vislumbrar el polvorín sobre el cual se encontraba el viejo continente y la peligrosa mezcla de rivalidades regionales e industrialización.

Fue de hecho en esa región que se produjo la chispa. El 28 de junio de 1914 el asesinato del heredero al trono del Imperio austrohúngaro en Sarajevo, destapó tensiones que fueron amplificadas por las alianzas vigentes y los antagonistas.

En vísperas del estallido de las hostilidades, Europa se encontraba en plena segunda revolución industrial. Las sucesivas innovaciones técnicas hacían surgir cada vez más fábricas en las ciudades, cuya productividad se disparó hasta niveles nunca vistos. Una evolución aprovechada en cada nación a favor de la carrera armamentista en curso.

Modernizar la maquinaria industrial para alimentar la guerra

“La única manera de abolir la guerra entre los pueblos, es aboliendo la guerra económica”, decía Jean Jaurès, diputado y socialista francés, quien trató a toda costa de impedir la guerra. Postura por la cual fue asesinado por un nacionalista el 31 de julio de 1914, en pleno recrudecimiento de tensiones a nivel internacional. El día después, Francia decretó la movilización de sus tropas y el 4 de agosto, junto a Reino Unido, declaró la guerra a Alemania que acaba de invadir a Bélgica.

Una cadena imparable de reacciones que se explica por las coaliciones geopolíticas, pero también por los viejos rencores entre dirigentes. En 1871, Alemania había arrancado a Francia los departamentos de Alsacia y Lorena tras vencer a las tropas imperiales de Napoleón III.

En los años siguientes, las autoridades francesas se empeñaron a alimentar el espíritu de venganza en contra del vecino germánico. Bajo la promesa de recuperar a la región perdida, una intensa propaganda ganó a todos los estratos de la sociedad, incluso a los científicos e intelectuales. “La lucha iniciada contra Alemania es la propia lucha de la civilización contra la barbarie, todos lo sienten, pero nuestra academia tiene una autoridad particular para decirlo”, dijo el filósofo francés Henri Bergson en agosto de 1914 frente a la Academia de Ciencias Morales y Políticas. “Cumple un simple deber científico al señalar la brutalidad y el cinismo de Alemania, su desprecio de cualquier justicia y verdad, en una regresión al estado salvaje”, añadió.

Un discurso dominante impulsado desde las altas esferas del Estado con el fin de preparar el terreno para un enfrentamiento inevitable con el « enemigo », cuya derrota era considerada evidente frente a la potencia nacional, presumida en todos los aparatos de propaganda. Una potencia impulsada por la fuerza industrial que debía que llevar el país a una pronta victoria.


Submarino alemán, al momento de rendirse, en 1918. © Bibliotheque nationale de France




Soldados franceses, en 1914. © Bibliotheque nationale de France




Soldados franceses con máscaras para protegerse de los gases tóxicos en las trincheras, en 1917. © Bibliotheque nationale de France




Tanques franceses de la marca Renault, en 1918. © Bibliotheque nationale de France



Ametralladora en acción, en 1915. © Bibliotheque nationale de France




Submarino alemán, al momento de rendirse, en 1918. © Bibliotheque nationale de France




Soldados franceses, en 1914. © Bibliotheque nationale de France

En el momento de la movilización de las tropas, muchos soldados pensaban regresar a sus hogares antes de la Navidad de 1914. Una ilusión compartida por los dirigentes de ambos bandos, convencidos de tener una superioridad aplastante sobre el otro.

En agosto, al estallar la guerra, el ejército francés demandaba una producción diaria de 10.000 proyectiles de artillería. A finales de septiembre, exigía diez veces más. Después de unos enfrentamientos que se inscribían en una clásica guerra de movimientos, el frente se estancó. Al tiempo que los combates se intensificaban cada vez más y requerían más recursos, los protagonistas se disparaban entre sí desde distancias muy cortas, a veces metros, desde unas trincheras que se convirtieron en las tumbas de millones de combatientes.

Con el fin de alimentar la maquinaria, aceleraron la producción. En Francia, más de 15.000 empresas se pusieron al servicio de la defensa nacional mientras que las autoridades planteaban una reorganización casi total de la economía debido a la ocupación alemana. Al volver inaccesibles las fábricas y yacimientos del norte y este del país, las tropas imperiales alemanas privaron a Francia del 75 % de su carbón y del 63 % de su acero.

Lluvia de bombas responsables de una asombrosa cantidad de muertes y desapariciones

A marchas forzadas, la nación gala reorganizaba su industria, pero también la modernizaba. Una innovación técnica pensada en función de la guerra, nutrida por la competencia entre contrincantes, que representó un salto sin precedentes, en desmedro de los soldados, arrasados por cientos de miles precisamente gracias a este progreso armamentístico.

En primera línea, los soldados enfrentaban aguaceros de bombas. Se estima que murieron entre 8,5 y 10 millones de militares durante la Primera Guerra Mundial. Dentro de este balance trágico, millones de desaparecidos o cuerpos que nunca pudieron ser identificados debido a la intensidad de estos combates marcados por estas nuevas armas. En el Osario de Douaumont, en el noreste de Francia, se encuentran los restos de 130.000 personas sin identidad, tanto franceses como alemanes, caídos en la batalla de Verdún.

Verdún fue el infierno en la tierra. Símbolo de la barbaridad de este conflicto, los diez meses de combates dejaron más de 300.000 muertos, causados en su gran mayoría por la artillería. En los momentos más caóticos, un proyectil caía cada tres segundos. En total, más de 53 millones fueron disparados en este campo de batalla convertido en cementerio. La ofensiva alemana fue detenida, pero nadie ganó realmente esta batalla trágica.

El avance tecnológico no se limitó al campo de las municiones. Al iniciar las hostilidades, el mariscal Ferdinand Foch, un emblemático comandante de las fuerzas armadas francesas, consideraba los aviones como un deporte. Cuatro años más tarde, los aparatos bombardeaban a París, junto a cañones de alcance cada vez mayor y los zepelines.

Aunque los combates más violentos ocurrieron en Francia, cabe recordar que el conflicto fue planetario. En los mares y océanos, los submarinos sembraban el terror. La armada alemana no dudaba en atacar barcos civiles. Una guerra marítima muy avanzada para esta época, que los Aliados se tardaron en contrarrestar.

Ametralladoras, lanzallamas, granadas e incluso gases tóxicos, como el “gas mostaza”, fueron nuevos elementos que hicieron más cruentos los combates y aún más insoportables las condiciones de los soldados en las trincheras. Un verdadero giro industrial, que masificó la tecnología de la muerte a una escala sin precedentes y preparó el terreno para las atrocidades de la Segunda Guerra Mundial.

En 1917, agotados, aniquilados, los motines florecieron entre los batallones de soldados. La revolución en curso en Rusia estaba en las mentes, pero la ‘carnicería’ a la cual les mandaban los generales también. Unos 600 combatientes franceses fueron fusilados por “desobediencia militar”. Refiriéndose a los dirigentes los amotinados cantaban en sus trincheras: “Si para ellos la vida es rosa, para nosotros no es lo mismo. En lugar de esconderse de todas estas emboscadas, que vengan a las trincheras, para defender sus bienes, pues nosotros no tenemos nada.”

La ‘Gran Guerra’ no solo fue una gran carnicería. Pese a que los franceses estaban convencidos de que sería la “última de las últimas” solo fue el preludio de otra gran confrontación, mucho más extensa y costosa en vidas militares y civiles: al firmarse el armisticio, con las humillantes condiciones impuestas a Alemania, se puso la semilla de la próxima gran conflagración mundial. Veintiún años después, cuando Hitler desató la Segunda Guerra, la industrialización de la muerte había llegado a su apogeo.

jueves, 15 de noviembre de 2018

El libro que sacudió el imperio colonial africano de Francia

El libro que sacudió el imperio colonial africano de Francia


Por Charu Sudan Kasturi | OZY




Por que deberias interesarte

El primer libro de un autor negro que ganó el premio literario más prestigioso de Francia también obligó al país a enfrentar su brutal registro colonial.


República Centroafricana
Ubicación 6.611111 ° N, 20.939444 ° E
Población 4,659,080
Idiomas Sango, Francés
PBI per cápita $ 681
Capital Bangui

En seis rondas de votaciones, la Académie Goncourt de París no pudo decidir la mejor novela francesa de 1921. Luego, el 14 de diciembre, un voto decisivo emitido por el presidente de la organización rompió el punto muerto y sacudió al mundo francófono: el Prix Goncourt, el de Francia. El premio literario más importante fue para René Maran, un administrador colonial de Guyana Francesa en Ubangui-Shari, lo que hoy es la República Centroafricana. Maran fue el primer ganador negro del premio de entonces 18 años de edad. Pero a medida que se agitaban los derechos civiles y los movimientos anticoloniales, fue el contenido de la novela de Maran el que realmente provocó temblores en ambos lados del Atlántico.

"Construyes tu reino sobre cadáveres", escribió Maran en el prefacio del libro, Batouala. "Usted está viviendo una mentira. Todo lo que tocas lo consumes ”.

Una acusación grave del colonialismo francés en África central, el libro fue un relato interno que obligó a Francia a enfrentar la realidad de su misión "civilizacional", así como el Corazón de la Oscuridad de Joseph Conrad había levantado el velo sobre la brutalidad belga en el Congo dos décadas antes . El parlamento francés debatió el libro, algunos acusaron a Maran de difamación y otros argumentaron que había expuesto la explotación. Varios escritores franceses criticaron a la Académie Goncourt, y algunos predijeron que Batouala pronto sería olvidado.

Ellos estaban equivocados. La propia carrera de Maran como administrador colonial terminó poco después, y frente a las amenazas de retribución, regresó a París en 1923. Pero se convirtió en el "punto de referencia africano" para los escritores del Renacimiento de Harlem, según el experto francés en África. -Estudios americanos Michel Fabre. WEB. Du Bois escribió sobre Maran y Batouala en The Crisis, la revista de la NAACP, mientras que un joven Ernest Hemingway, escribiendo en París para el Toronto Star Weekly, llamó al libro "gran arte".

No somos más que la carne de la cual se pueden imponer los impuestos.


El libro sigue al anciano jefe de Ubangui-Shari, Batouala, quien observa, desconcertado e indignado, mientras los colonizadores blancos se apoderan de su tierra y una de sus nueve esposas se enamora de un hombre más joven. Pero es el prólogo del libro, donde Maran se quita el manto de la ficción para asumir directamente el colonialismo francés, ese es el legado duradero de Batouala, dice Christopher Miller, profesor del departamento de estudios afroamericanos de Yale.

"El prefacio se lee mucho más que la novela en su conjunto", dice Miller.

Maran no comenzó tratando de cambiar el mundo. Era un hijo del colonialismo francés, nacido en un barco que se dirigía a Martinica desde la Guayana Francesa de sus padres en 1887. Su padre era un oficial de la administración colonial francesa de Gabón, y a la edad de 6 años, Maran fue enviado a un internado. escuela cerca de burdeos. Siguió a su padre a la administración colonial en 1909 a la edad de 22 años.

Sirvió fielmente a los franceses en Ubangui-Shari, donde su actitud hacia los locales era ambigua. El régimen colonial fue brutalmente opresivo en la recaudación de impuestos, la extracción de caucho y el aplastamiento de las rebeliones, y Maran demostró simpatías por la gente de Ubangui-Shari en cartas a sus amigos. Pero en una carta, también escribió que "el atavismo de los negros resiste el sello de la civilización".

Luego, en 1918, llegó lo que algunos historiadores consideran un punto de inflexión: un portero local llamado Mongo fue asesinado, y Maran fue acusada del crimen. Mientras el futuro autor insistió en que estaba cubriendo a un subordinado blanco conocido por maltratar a los locales, ninguno de sus colegas acudió en su defensa, y Maran fue procesado y reprendido.

Eso podría explicar por qué el libro, que comenzó a escribir en 1913, es menos conflictivo en su crítica del colonialismo que el prefacio, escrito más adelante. El libro "solo pinta, sin ninguna emoción, el hombre negro como lo ve el autor", dice Chidi Ikonné, una erudita nigeriana de literatura africana. En las últimas décadas, Maran ha enfrentado críticas de analistas literarios que argumentan que su exotización de los locales en Batouala solo reforzó los estereotipos de africanos perezosos e hipersexuales que ya están profundamente arraigados en las mentes occidentales.

Por el contrario, el prefacio era puntiagudo. "Los nativos", escribió Maran, "fueron derribados por un trabajo incesante, por el cual no fueron pagados. ... Vieron venir la enfermedad y tomar su morada con ellos, vieron el hambre acechar su tierra, vieron crecer su número cada vez menos ".

Aún así, la novela en sí misma no se aleja de estos temas, y Maran usó el personaje de Batouala para expresar la ira y la frustración de los locales. En un momento dado, el jefe es casi tan mordaz como el prefacio de Maran. "No somos nada más que la carne de la cual se pueden imponer los impuestos", dice Batouala. “No somos más que bestias de carga. ¿Ganado? ¡Ni siquiera eso! ... Los hombres blancos nos están matando lentamente ".

Pero la propia Batouala no produjo la investigación completa sobre los excesos en el África francesa que Maran había esperado. Seis años más tarde, el autor francés francés André Gide, quien más tarde ganaría el Premio Nobel de literatura, visitó el África ecuatorial e informó resultados similares, lo que impulsó reformas limitadas. Maran, su trabajo reivindicado, continuó su carrera como escritor y periodista en París y murió en mayo de 1960. Dos meses más tarde, la región cuya difícil situación llamó la atención del mundo se independizó como República Centroafricana.

miércoles, 14 de noviembre de 2018

Guerra del Pacífico: Arica peruana cae en manos chilenas

La batalla de Arica (7 de junio de 1880) 
por Gonzalo Maguiña 

En el marco de la Guerra del Pacifico, de 1879 entre Chile contra el Perú y Bolivia, tenemos que hacer una obligada mención a los sucesos ocurridos en Arica, desde el 8 de octubre de 1879 hasta el 7 de Junio de 1880. 

Arica, antiguo puerto fundado en tiempos de la Colonia Española, siempre estuvo fortificado ya que era ahí donde, desde fines del siglo XVI, se embarcaba la plata proveniente de las ricas minas de Potosí (en la actual Bolivia). Si bien para el año 1879 las fortificaciones coloniales ya eran obsoletas y casi inexistentes, el puerto (entonces peruano) había conocido un nuevo período de auge por su cercanía a las zonas salitreras de Bolivia y el Perú. Apenas comenzó la guerra, Arica se fortificó con artillería traída de Lima y se convirtió en el centro de las operaciones militares peruanas y bolivianas. 



Las condiciones geológicas del puerto lo hacían muy fácil de defender de un ataque de mar, principalmente por la presencia de un gran promontorio rocoso, el Morro de Arica donde se emplezaban las principales fortificaciones. Pero no era tan fácil de defender por tierra a menos que se contara con un gran número de efectivos y piezas de artillería de campaña. Esta deficiencia solo se haría notoria una vez perdida la campaña naval por parte del Perú (primera fase de la guerra), gracias a lo cual Chile se adueña del mar. Pudo así incomunicar a los Ejércitos aliados del Perú y Bolivia que estaban agrupados en Tacna, Iquique, Arica y Pisagua. El ejercito chileno pudo desarticular las tropas aliadas acantonadas en Pisagua e Iquique (al sur de Arica) y luego las que se encontraban en Tacna (al norte). Fue entonces cuando Chile decidió tomar Arica. 


Lado este del Morro de Arica (pocos años después de la batalla). Como se aprecia es un lado totalmente expuesto y fácilmente accesible. 

Sabiendo que Arica no contaba con gran número de efectivos y que las fuerzas Chilenas disponibles para el ataque superaban en 6 a 1, el alto mando chileno invitó al Jefe de la Plaza Coronel Peruano Francisco Bolognesi a rendirse para evitar el derramamiento de sangre ya que, estando completamente rodeado por los chilenos, estaba imposibilitado de recibir ayuda por mar o por tierra. Su respuesta fue categórica, “...tengo deberes sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho...” . Días después, en el asalto final, Bolognesi moriría cumpliendo su palabra. 

El bloqueo del Puerto 
Sin embargo la toma de Arica no demoró algunos minutos como cuenta la historia oficial de Chile, si no más de 6 meses desde que se iniciara el bloqueo del puerto por la flota chilena. 

Esta situación obliga a los defensores de la plaza a sobrevivir ese tiempo casi sin provisiones ni pertrechos de guerra y sin refuerzos. 

La Armada chilena intentó destruir las baterías del puerto sin ningún éxito. Desde ese momento evitó mantenerse cerca del alcance de los tiros de las defensas peruanas. 

El 27 de febrero mantenían el bloqueo del puerto el monitor Huáscar (recién capturado al Perú por la Armada Chilena) y la cañonera Magallanes. Los peruanos rompieron sus fuegos para provocar a las Naves bloqueadoras, pero esto no causó efecto en las naves chilenas que no se iban a exponer innecesariamente a un encuentro con las baterías del puerto. Apareció un penacho de humo de un tren que venia de Tacna, supuestamente con refuerzos. 


Este monitor contaba con artillería de 500 Lb de bala esférica. 

El comandante del Huáscar se puso a tiro para batir al tren y evitar su llegada al puerto. En esta acción entró en combate con el Monitor peruano Manco Cápac que contaba con artillería de 500 lb. pero un andar de 3 nudos. El comandante Thomson al mando del Huáscar decidió usar el espolón para tratar de hundir al Manco Cápac, acción casi suicida ya sea por que el blindaje del monitor peruano era muchísimo mayor que el del “Huascar” o porque la proa con espolón le impedía abordar la otra nave y quedar encima de la borda del Manco Cápac; era una técnica usada por comandantes de buques con proas lanzadas para hundir blindados de poco calado... pero este no era el caso. Para mala suerte de los chilenos el Huáscar quedo momentáneamente sin fuerza en sus maquinas lo cual lo convirtió en presa fácil del pesado monitor peruano que descargo su artillería destruyendo el palo de mesana y matando al comandante Thomson. Una vez recuperada la fuerza de sus maquinas, huyo a toda velocidad para evita el encuentro con el Manco Cápac. 

Doble ruptura del bloqueo 

El 17 de Marzo de 1880, en una acción audaz, el Capitán de Navío Villavisencio al mando de la corbeta peruana Unión rompe el bloqueo, atraca en puerto, recarga carbón, baja pertrechos a tierra y dispara sus cañones contra el blindado chileno Blanco Encalada y el Monitor Huáscar ayudada por la invalorable colaboración de los fuertes de tierra y del monitor Manco Cápac. 

Apenas terminó de cargar carbón, La Unión zarpó y salió entre el fuego enemigo rompiendo el bloqueo por segunda vez en el mismo día, contestando el fuego que se le hacia. Llegó tres días después al Callao, por lo que su misión puede considerarse un éxito. La rotura del bloqueo sirvió no solo para llevar pertrechos si no para llevar hasta ese puerto a la torpedera Alianza. Desde la aparición de esta pequeña lancha entre las defensas peruanas los buques chilenos nunca pasaron la noche cerca de su fondeadero original, si no mar adentro evitando sus incursiones. 

La batalla 

Pero volvamos al día de la batalla decisiva. Según algunas fuentes Arica era defendida por aproximadamente 1500 infantes y 300 artilleros. 


Bombardeo del 6 de junio de 1880 

Las acciones del asalto comenzaron el 6 de junio de 1880 con un ablandamiento por la artillería de campaña por tierra y la escuadra por mar. Las defensas peruanas impidieron que este ablandamiento se llevara a buen termino, anulando por completo la acción de las naves chilenas. Y como la artillería de campaña chilena estaba dentro del alcance de la peruana tampoco ésta produjo grandes daños. La acción de fuego del día 6 no tuvo la efectividad que se esperaba. 

El día 7 de Junio de 1880, el coronel chileno Lagos dispuso el ataque con 4 regimientos atacándo las defensas peruanas por el lado más desguarnecido de sus defensas hacia tierra. 

El Regimiento Lautaro atacaría los fuertes del norte en la parte baja y los regimientos 1º, 3º y 4º de línea atacarían por el Morro por detrás. 


Ilustración peruana sobre el asalto al Morro de Arica 

La infantería chilena subió valientemente a carga de bayoneta sobrepazando a los defensores en número. La mayoría de los peruanos muere en sus puestos de combate. 


Ilustración chilena de la toma del Morro de Arica. 

El asalto al Morro se vio ensombrecido por la actitud del coronel Lagos, quien arenga a su tropa para no dar cuartel a nadie, legándonos el triste recuerdo de una atroz matanza donde la mayoría de los heridos fueron rematados a cuchilladas o a culatazos, incluso aquellos que después de la batalla refugiados en la iglesia, que servia de ambulancia, fueron asesinados y sus cuerpos atravesados en los barrotes que rodeaban el recinto sagrado. 


Horrible escena donde se muestra la indiferencia con los heridos, en muchas ocasiones se dice que esta foto fue preparada y que los "supuestos" heridos serian soldados chilenos. Es obvio que es una excusa a tan infame evidencia. 

Según fuentes chilenas de los 1969 defensores de la plaza, cayeron 700 muertos (más del 30%) y el doble de heridos, de manera que podemos considerar a todos los defensores peruanos como bajas. 

De los 4379 chilenos que participaron en la toma de Arica, cayeron muertos 473 y más de 200 heridos. 

El Monitor Manco Cápac fue echado a pique por su propia tripulación y la torpedera Alianza forzó el bloqueo siendo perseguida por el Blanco Encalada y el crucero Loa y llegó hasta Ite al norte de Arica donde su tripulación fue finalmente capturada por la caballería chilena después de alargar su escape por las quebradas de la zona. 


Asalto del 7 de junio de 1880 

Desde ese momento Arica es territorio chileno, y si bien en el acuerdo de paz entre Chile y el Perú se estipuló la posible entrega de Arica después de un referéndum entre sus habitantes quienes decidirían si preferían pertenecer a Chile o al Perú. Los sucesivos gobiernos chilenos atrasarían este referéndum por más de 25 años, tiempo en el cual movilizaron un gran número de colonos chilenos y hostigaron a los peruanos residentes, mientras que el Perú no pudo ejercer fuerza alguna en las negociaciones con Chile por hallarse desvastado por la guerra. Miles de cartas, testimonios y documentos familiares que pueblan diferentes publicaciones evidencian la triste historia de aquellos peruanos que decidieron no dejar su tierra natal y seguir viviendo en Tacna, Arica y Tarapacá. Tacna, finalmente, sería devuelta al Perú en 1929 y Arica, tras el postergado referéndum, quedó definitivamente al otro lado de la frontera. 

Referencias técnicas: 

DEFENSAS DE ARICA 


Toda esta artillería era de avancarga y ya era obsoleta para la fecha del encuentro, su mayoría eran excedentes de la Guerra de secesión Estadounidense de 1862. 

Si bien se puede decir que los gruesos calibres daban la superioridad artillera a los peruanos, su lentitud de recarga y la perdida de la posición de disparo después del tiro los hacían totalmente ineficiente ante los cañones modernos de retrocarga chilenos, que podían disparan hasta 8 tiros por minuto contra 1 tiro cada 5 minutos de los peruanos. Otro problema, era ya que estas piezas eran de uso naval en su mayoría tenían una zona muerta de mas de 400 metros, es decir una vez entrado en la zona muerta de la artillería peruana, las baterías solo quedaban a la defensa de sus sirvientes que fueron superados en número fácilmente por las tropas chilenas en relación de 6 a1. 

Arica estaba preparada para repeler ataques navales, pero no contaba con suficiente granadas de fragmentacion especiales para repeler ataque de infantería. 

Estamos obligados a mencionar los campos minados que rodeaban Arica, única solución que encontraron los peruanos para proteger su flanco más expuesto. La infantería Chilena sorteó con mucha valentía dichos campos, y si bien los comandantes chilenos sabían de la ubicación de los campos minados, esto no fue comunicado a los regimientos, provocando en este tipo de arma la mayor cantidad de bajas en el ejercito chileno. 


Arica después de la Batalla, 
Fotos tomadas por las fuerzas chilenas. 


Fuerte San José, cañones Parrott de 150 lb. 

Batería Alta del Morro, Vavasseur de250 lb. y Parrott 100lb 

Batería Alta del Morro, cañónes Parrot de 100lb y Voruz 70 Lb. 

Batería Alta del Morro, Vavasseur de 250 lb. 

Artillería de Campaña Chilena, Krupp de 75 mm 

Referencias 

- Agustín Toro Dávila: Síntesis histórico militar de Chile. 
- Armada de Chile: Huáscar. 
- Boletín de la Guerra del Pacífico 1979 - 1881. (recopilación de documentos de la época) 
- Francisco Yábar. Las fuerzas sutiles (en prensa; investigación sobre la defensa de costa y las lanchas torpederas peruanas). 
- Colección fotográfica Maguiña, Pizarro y Greve. 

War-Book (c)x

martes, 13 de noviembre de 2018

Las drogas y el alcohol en la guerra

Las guerras se pelean raramente sobrios

Una breve historia del uso militar de drogas.


Wes O Donnell | War is Boring


En la parte superior, los soldados estadounidenses fuman marihuana de una escopeta en 1970.

Aunque ese fue el caso a lo largo de la mayor parte de la historia de la humanidad, parece inconcebible que los militares estadounidenses de hoy en día utilicen drogas para mejorar el rendimiento a fin de obtener una ventaja frente a los adversarios formidables de nuestra nación.

Pero puede que te sorprendas.

Algunos de los primeros ejemplos de uso explícito de drogas se encuentran en la Odisea de Homero, la historia de un veterano de la guerra de Troya que se abalanza en el Egeo. El cannabis y el opio, el equivalente jónico del LSD, tientan a Odiseo y su equipo en casi cada paso de su viaje de 10 años.

Durante 1,000 años, el alcohol fue probablemente el motivador farmacológico más popular de los luchadores jóvenes. Los gobiernos racionaron el "valor líquido" para hacer más soportables los combates y también para aliviar el aburrimiento que acompaña a la guerra.

Los guerreros romanos bebían vino. La Royal Navy emitió ron. El Ejército Rojo tenía vodka y los alemanes bebían cerveza.

Incluso el joven gobierno estadounidense emitió alcohol durante la Guerra Civil. Whisky, por supuesto.

En su reciente libro Blitzed: Drugs in the Third Reich, el autor Norman Ohler describe una máquina de guerra nazi que estaba llena de "cocaína, opiáceos y, sobre todo, metanfetaminas, que eran consumidos por todos, desde obreros de fábricas hasta amas de casa y soldados alemanes. ”

Pero los nazis no eran la única potencia europea que buscaba crear súper soldados a través de la farmacología creativa.

Gran Bretaña fue un ejemplo. Esta nación conmemora con orgullo la Segunda Batalla de El Alamein en el norte de África. El 8vo ejército del general Bernard Montgomery ganó una victoria decisiva contra los alemanes allí y envió a las tropas del mariscal de campo Erwin Rommel a un retiro en Túnez.

Montgomery distribuyó 100,000 tabletas de anfetaminas a sus tropas justo antes de la batalla.

Sin embargo, la infantería aliada no era la única beneficiaria. Los pilotos estadounidenses de bombarderos a menudo tenían tabletas de Benzedrine ("bennies") en sus kits de emergencia para los momentos en que estar especialmente alerta era una cuestión de vida o muerte.



Ración de ron arriba. Foto via Wikipedia

El uso desenfrenado de drogas ilícitas durante la guerra de Vietnam es bien conocido. Según un informe del Departamento de Defensa, el 51 por ciento de las fuerzas armadas fumaba marihuana, el 31 por ciento usaba drogas psicodélicas como el LSD, la mescalina y los hongos de psilocibina y un 28 por ciento adicional consumía drogas fuertes como la cocaína y la heroína.

Según The Atlantic, las unidades de reconocimiento de largo alcance "que se infiltraron en Laos para una misión de cuatro días recibieron un kit médico que contenía, entre otros artículos, 12 tabletas de Darvon (un analgésico suave), 24 tabletas de codeína (un analgésico opioide) Y seis pastillas de Dexedrine. Antes de partir para una expedición larga y exigente, a los miembros de las unidades especiales también se les administraron inyecciones de esteroides ".

En la Batalla de Mogadiscio de 1993, los combatientes somalíes bajo el señor de la guerra Mohamed Farrah Aidid masticaron una planta llamada khat, conocida localmente como "qaad" o "jaad". Sus efectos incluyen una sensación de bienestar, alerta mental y emoción.

En las conversaciones que tuve con los Rangers del Ejército que lucharon en Mogadiscio, me dijeron que el uso de khat era a menudo la razón por la cual los somalíes se lanzaron a la batalla en un número tan grande, a pesar de sus grandes bajas.

El modafinilo es un medicamento que promueve la vigilia similar a las anfetaminas, pero sin muchos de los efectos secundarios. La droga se hizo popular después del lanzamiento de la película "Limitless" de Bradley Cooper de 2011. En esta película, un hombre toma una píldora que "desbloquea" partes de su cerebro que antes no se utilizaban, lo que lo convierte en la persona más inteligente del planeta.

La píldora ficticia en la película, NZT-48, se basó en el modafinil, que la Fuerza Aérea de los EE. UU. Ha estado publicando abiertamente para los pilotos desde el 2003. El modafinil está disponible en los Estados Unidos solo con receta médica, y con frecuencia se usa fuera de etiqueta para la cognición mejora.

En un informe reciente de ABC News, los científicos privaron a 16 sujetos sanos de sueño durante 28 horas. Se esperaba que los sujetos durmieran a partir de las 11:00 a.m. a las 7:00 p.m. Durante cuatro días y quédate despierto cada noche. Los que tomaron modafinilo tuvieron mejores resultados en las pruebas cognitivas que los que tomaron un placebo. Algunos de los participantes pudieron permanecer despiertos durante más de 90 horas.

El gobierno francés admite haber emitido modafinil para sus tropas de la Legión Extranjera. Los ministerios de defensa indios y británicos aprobaron el modafinilo para sus respectivas fuerzas armadas. El gobierno canadiense también informa que el modafinil es utilizado por sus astronautas en misiones a largo plazo a bordo de la Estación Espacial Internacional.

En cuanto al ejército estadounidense, el modafinil ha sido aprobado para ciertas misiones de la Fuerza Aérea como una "píldora para el control de la fatiga". El uso de dextro-anfetamina ya no está aprobado, de acuerdo con una Instrucción de la Fuerza Aérea emitida por el Comando de Operaciones Especiales.

¿En qué momento no es ético emitir medicamentos de grado farmacéutico que mejoran el rendimiento a los combatientes estadounidenses? En el caso de una "guerra total" en la que la supervivencia de nuestra nación está en juego, me imagino que haríamos cualquier cosa para ganar.

Sin duda, muchos de los adversarios de nuestra nación están experimentando nuevas formas de aumentar la letalidad de sus tropas. Por lo tanto, parece que estamos experimentando una especie de carrera de armamentos de bajo perfil en el ámbito de la modificación y mejora química que es en gran medida desconocida para los contribuyentes estadounidenses.

A medida que la tecnología médica mejore, esta práctica de dispensación solo aumentará en frecuencia y quizás en letalidad. El modafinilo es ciertamente una droga más segura y menos adictiva que las anfetaminas en el corto plazo.

El problema, porque siempre hay un problema, es que lleva años de investigación clínica determinar si un medicamento tiene riesgos para la salud a largo plazo. Los investigadores admiten que no están seguros de cómo el modafinilo hace lo que hace dentro del cerebro.

Tampoco están seguros de cuáles son los efectos secundarios a largo plazo, si los hay, y qué tan graves podrían ser.

lunes, 12 de noviembre de 2018

Libro: "Un año de gloria"

"Un año de gloria"


Durante el Siglo XX, tres de los hitos más importantes del Regimiento de Granaderos a Caballo sucedieron durante el mes de Junio.



En uno de ellos, 16 de Junio de 1955, 9 Granaderos ofrendaron sus vidas cumpliendo con la misión de Escolta y Custodia Presidencial que desempeña el Regimiento desde 1907, más allá del pensamiento político de cada uno de sus integrantes.

En este trabajo podrás encontrarte con sus nombres, junto a todo el personal que resultó herido, gracias a los datos que aporta la documentación de la época.

Estos datos y más los podés encontrar en "UN AÑO DE GLORiA", el nuevo libro de Esteban Ocampo(1), te cuenta esto y mucho más.

Es un viaje donde el autor nos lleva a lo largo de un año calendario, conociendo y adentrándose en aquellos hechos del siglo XIX y XX que marcaron, no sólo la vida de los Granaderos y el Padre de la Patria, sino de nuestro país y América.

“UN AÑO DE GLORIA” es un día a día que nos propone vivir junto a los Granaderos y el Libertador todos aquellos hechos que han y deben quedar por siempre marcados en la memoria de todos nosotros.

Para los interesados en participar de esta pre venta exclusiva, pueden escribirnos a:

elhusar.ediciones@gmail.com

Participando no sólo aseguran su ejemplar, sino que también obtendrán un voucher de descuento para el próximo libro que estaremos lanzando en el mes de noviembre.

No te pierdas esta oportunidad de conocer más sobre nuestra Historia de Gloria.

Ediciones
El Húsar

(1) Esteban Ocampo ha sido miembro del Regimiento de Granaderos a Caballo "General San Martín", es historiador y autor de los libros: "Centauros de los Andes - Historia del Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín - 1812 a 1820" y "Granaderos, Libertad y Gloria - Historia del Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín - 1820 a 1826"; además de artículos y publicaciones vinculadas con la historia del Regimiento de Granaderos a Caballo, el General José de San Martín, la Guerra de la Independencia y la Caballería Argentina, entre otros temas.

Foto: Tanque modelo Sherman de la Sección Armas pesadas del Regimiento de Granaderos a Caballo "General San Martín", en Plaza de Mayo luego de los combates.

domingo, 11 de noviembre de 2018

Argentinos: Los productivos y constructivos años 30

Los años 30, no tan infames como se dice

Luis Alberto Romero | La Nación




En la historia argentina, los años entre 1930 a 1943 fueron de una gran riqueza. El renacimiento cultural y político del catolicismo, el último esplendor del liberalismo reformista, la reformulación del papel del Estado, el impulso a la industrialización y el crecimiento de la cultura popular de masas, entre tantas otras cosas, indican que fue un período tan creativo como cualquier otro. Pero, en el sentido común vulgar todo esto suele resumirse en una frase concluyente: fue la "década infame".

La descalificación se apoya en sucesos de indudable impacto, como el golpe del 30, el tratado Roca-Runciman, el fraude electoral y varios casos de corrupción. Sin embargo, cabe preguntarse: ¿fue una década globalmente "infame"? ¿Lo fue más que otras décadas? Para analizar este tema polémico, el Club del Progreso convocó, dentro de un ciclo de charlas sobre el pasado nacional, a dos reconocidos historiadores: Pablo Gerchunoff y Luciano de Privitellio.

Para Gerchunoff, la crisis mundial de 1929 creó en la Argentina una situación inédita, de la que surgió un régimen económico nuevo. Las políticas fueron pensadas sobre la marcha, discutidas ampliamente y luego seguidas con firmeza, al punto que sus orientaciones básicas -como la participación activa del Estado en la economía- perduraron hasta hace apenas unas décadas.


Década infame. 6 de septiembre de 1930. Fuerzas del Escuadrón de Seguridad impiden el avance de manifestantes hacia Plaza de Mayo Crédito: ARCHIVO LA NACION

Al crack de la Bolsa de Nueva York de 1929 siguió el derrumbe del sistema bancario estadounidense en 1931 y, al año siguiente, el abandono del patrón oro por Gran Bretaña. Era un mundo nuevo mucho más difícil para la Argentina. Cayeron el volumen y los precios de las exportaciones agrarias y las divisas se hicieron escasas. Luego de suspender la Conversión del peso, el gobierno de Agustín P. Justo, que siguió al del general José Félix Uriburu, estableció el control de cambios: el Estado concentraba las divisas disponibles y las asignaba a los distintos sectores a precios diferentes, de acuerdo prioridades que, día a día, le permitían desarrollar una vigorosa intervención en el rumbo económico.

Estímulo a la industria


Cumplir con la deuda externa fue una de las prioridades. Otra fue el estimulo a la industria interna, que al sustituir importaciones aliviaba la balanza de pagos. Además, la industria ofrecía empleo a los trabajadores que migraban a las ciudades, expulsados por un agro en crisis. Federico Pinedo y Raúl Prebisch, artífices de esta reestructuración estatal, se propusieron favorecer especialmente aquellas industrias más competitivas que pudieran exportar hacia los países vecinos, una línea que se abandonó en 1946.

Un factor coyuntural le permitió a la Argentina salir rápido de la crisis: la larga sequía estadounidense, iniciada en 1932, mejoró nuestras exportaciones cerealeras. Hubo beneficios para los productores rurales y, gracias al control de cambios, más ingresos para un gobierno que desarrolló una gran política de obras públicas, especialmente viales. Fue entonces cuando los camiones comenzaron a desplazar a los trenes.

Pero esos positivos cambios de largo plazo -señala De Privitellio- no fueron percibidos por la opinión pública, que en cambio criticó los términos del Tratado Roca Runciman (una "entrega" a Gran Bretaña), y se escandalizó por los privilegios a los grandes ganaderos y las empresas británicas o por el salvataje estatal de bancos quebrados.

Se trata de una interpretación simplista, opinó Gerchunoff. Sin duda el Tratado arrojó un magro resultado para la exportación de carnes, pero en realidad pudo haber sido mucho peor, dada la decisión británica de privilegiar la relación con Australia y Nueva Zelanda. En cambio, Gran Bretaña concedió un excepcional préstamo en libras para que las empresas inglesas pudieran remitir sus beneficios acumulados en pesos; sin esa ayuda hubieran quebrado, arrastrando a muchas empresas y bancos locales y produciendo un descalabro generalizado. Una decisión parecida tomó el gobierno al sostener al Banco Español; su salvataje impidió una quiebra de bancos en cadena como la ocurrida en los Estados Unidos.

La voluntad de conjurar el riesgo de todo el sistema -puntualizó Gerchunoff- explica una política que, vista desde otro punto de vista, significó un beneficio para determinados grupos. El excepcional equipo técnico encabezado por Pinedo y Prebisch, que logró lo que se proponía, gozó de una ventaja importante: por un tiempo pudo despreocuparse del problema de las elecciones.

El "fraude" es el otro gran estigma de la "década infame". La frase fue acuñada en 1944 por el periodista José Luis Torres, quien, recuerda De Privitellio, era nacionalista, pronazi y partidario del golpe castrense de 1943. Según creía, el fraude demostraba la podredumbre de la democracia liberal, que quedó en evidencia con el "escándalo de la Chade" de 1936. Para lograr que se renovara la concesión por el suministro eléctrico de la Capital, la poderosa empresa sobornó a periodistas, funcionarios, concejales de todos los partidos y hasta a Marcelo T. de Alvear, entonces jefe del radicalismo, y Justo.

Sentidos múltiples


La "década infame" resultó una frase exitosa, pero su sentido fue variando. Los radicales la usaron para reivindicar la pureza de la democracia anterior al golpe de 1930; los peronistas, para condenar el pasado anterior al golpe de 1943. Luego de 1955, la consagró Arturo Jauretche en una versión nacionalista, populista y antiimperialista en la que el villano era Gran Bretaña. Es conocido el lugar que este tópico ocupa hoy en el "relato".

Muchos historiadores han tratado de tomar distancia de la "década" y del parteaguas del golpe del 30 para reflexionar sobre el período entre las dos guerras mundiales. De Privitellio recuerda las continuidades de los años 20 y 30, en lo social y lo cultural, e invita a reflexionar también sobre la política de entreguerras, signada por la ley Sáenz Peña de voto secreto y obligatorio y por el gradual descubrimiento de sus dificultades, tanto teóricas como prácticas.


Perón junto al auto que lleva al general Uriburu al poder, el 6 de septiembre de 1930, día del golpe Crédito: ARCHIVO LA NACION

Desde 1920 hubo sucesivos proyectos de modificación de la ley, buscando una forma de representación distinta, por ejemplo la corporativa, en boga en Europa. Pero predominó una solución más práctica: retornar al uso del poder gubernamental para modificar un poco los resultados electorales. Lo hizo Yrigoyen, moderadamente. Justo no tuvo necesidad al principio, debido a la abstención radical, pero lo hizo de forma masiva desde 1936, cuando los radicales volvieron a las urnas. Entonces, las elecciones fueron sistemáticamente falseadas, pero con el tácito consentimiento de los derrotados.

¿Fue infame, en definitiva, la década del 30? Ambos historiadores coinciden en que el problema no es demasiado relevante. Gerchunoff habló de cambios estructurales en la economía. De Privitellio, de un largo proceso de discusión y de adecuación de la ley Sáenz Peña, anterior y posterior a los años 30. Pero el sentido común se concentra en tópicos más llamativos -la intervención británica, la corrupción o el fraude-, generalmente mal entendidos e hilvanados en un relato simplificado, con una matriz entre nacionalista y populista, que ha calado hondo.

¿Puede modificarse el sentido común? Los expositores fueron escépticos, y con razones. Yo creo que siempre se puede abrir una discusión, sembrar una duda, mostrar que hay diversas versiones del pasado y que entre ellas puede entablarse un diálogo civilizado y provechoso. Hoy estamos lejos de eso. Pero, parafraseando a Sarmiento, las contradicciones se vencen a fuerza de contradecirlas.

Investigación de Archivo fotográfico: Juan Trenado

sábado, 10 de noviembre de 2018

SGM: El dominio aéreo antes de la toma de Túnez (2/2)

‘Zona de exclusión aérea’ para tomar Túnez

Parte 1 | Parte 2
Weapons and Warfare





Dos días después, el domingo de Ramos, el 18 de abril, la tarde parecía estar a la deriva, como su nombre indica en un día de relativa paz y tranquilidad. Siguiendo los informes de inteligencia de los planes alemanes de rescatar a algunos de sus empleados clave del Heeresgruppe Afrika y las tropas no combatientes, en los transportes que regresan a Sicilia, el 57º Grupo de Combatidos de la USAAF envió patrullas sucesivas a lo largo del día para tratar de interceptar tales vuelos. Los pilotos regresaban continuamente sin nada que informar.

Al final del día, cuando se organizó la última patrulla, no se habían hecho contactos con aviones enemigos. Esta operación final fue una combinación de 57th Group y 244 Wing RAF, cuyos Spitfires of 92 Squadron proporcionarían la cubierta superior. En 1705, cuarenta y ocho Warhawks de los cuatro escuadrones de caza del 57.º grupo, 64, 65, 66 y 319, comenzaron a despegar, liderados por el capitán James "Big Jim" Curl, el experimentado líder de vuelo de la 66a.

Una vez que se encontraron con los Spitfires, Curl condujo la formación hacia el noroeste sobre Cape Bon. A casi diez kilómetros del mar, el crepúsculo se estaba reuniendo cuando Curl los hizo retroceder hacia el sur para regresar a casa. Sabía que la luz no duraría mucho más. Entonces vio algo, tal vez 4,000 pies debajo de ellos, cerca del mar. Al principio pensó que podría ser un vuelo muy grande de gansos migratorios. Las formas se hicieron más claras bajo su mirada. Estaba mirando lo que estimaba que eran alrededor de 100 de los transportes Ju52 / 3m. Todos estaban en un color verde camuflado, lo que los hacía difíciles de distinguir contra el mar en el crepúsculo, y volaban hacia el norte en una formación gigante de "V-de-Vs". Lo que vino después fue apodado al principio por los pilotos estadounidenses como un "disparo de ganso".

Mientras que los Spitfires tomaron algunos Bf109 escoltando, los cuarenta y ocho Warhawks descendieron sobre los incómodos Ju52 como halcones que se lanzaban sobre una bandada de gordas palomas. En el caos, Curl reclamó dos Ju52 y un 109. Describió el compromiso como caótico, el cielo lleno de aviones que giraban y giraban. Los Warhawks giraron en el cuerpo a cuerpo, disparando a una masa de aviones enemigos que no tenían escape. El capitán Roy Whittaker, líder de vuelo en el 65. ° Escuadrón de caza, derribó dos Ju52 y dos 109. Sus cuatro victorias lo llevaron a un total de siete, lo que lo convirtió en el piloto con la puntuación más alta en el puesto 57.

El teniente Richard O. Hunziker, del 65. ° Escuadrón de Combate, en solo su segunda operación de combate, se encontró en un bautismo de fuego. Estaba asombrado por el número de aviones enemigos.

La formación del enemigo parecía como mil escarabajos negros que se arrastraban sobre el agua. En nuestro primer pase estaba tan emocionado que comencé a disparar temprano. Pude ver los disparos levantando el agua.

Hunziker fue tras un Ju52 cerca de la parte delantera de la "V" y vio que sus disparos martilleaban a lo largo de su cola y fuselaje, y al mismo tiempo se dio cuenta de que dos Ju52 a cada lado le disparaban.

Parecía como si estuvieran parpadeando con linternas rojas desde las ventanas - Tommy-guns, probablemente. El barco al que estaba disparando golpeó el agua con una gran capa de rocío y luego explotó. Cuando me detuve pude ver figuras alejándose de lo que quedaba del avión.

Luego, Hunziker respondió a una llamada de radio en busca de ayuda contra algunos Bf109 a 5,000 pies sobre él. Al principio, luchó por aferrarse a los combatientes enemigos en los torbellinos de perros. Tomando una acción evasiva se encontró cruzando la tierra. Luego, con su primer estallido de fuego en uno de los años 109, se sonó la nariz, enviándola a una inmersión empinada para estrellarse contra el suelo en llamas.

Las pérdidas totales y el daño infligido por el 57º Grupo de Cazas en los transportes y escoltas de la Luftwaffe fueron:




No es sorprendente que los medios informaran que la batalla aérea unilateral era la "Masacre del Domingo de Ramos".

Sin embargo, los enfrentamientos entre los combatientes, los Warhawks y los Bf109, estaban lejos de ser unilaterales. Los Bf109 pudieron operar miles de pies por encima de los Warhawks, que eran ineficaces por encima de los 15,000 pies. Esto permitió que los 109 esperaran la oportunidad de montar un ataque de buceo, idealmente fuera del sol en los combatientes estadounidenses. Para contrarrestar la ventaja de los combatientes alemanes, los pilotos del 57º Grupo, como el teniente Mike McCarthy del 64º Escuadrón de Combate, sabían que un 109 no podía superar a un Warhawk P-40 correctamente volado: "Teníamos que saber dónde estaban en cada momento, para cronometrar la llamada de 'descanso', y girarse con fuerza para que podamos llevar nuestras armas y disparar '.



El 22 de abril, DAF Spitfires y Kittyhawks se lanzaron sobre una veintena de Me323 que volaban en una amplia formación de V. La carga principal de estos transportes gigantes de seis motores era el combustible. Fueron escoltados por diez Bf109s y Macchi C.202s. El teniente "Robbie" Robinson del 1 Escuadrón SAAF derribó dos 109, lo que lo convirtió en un as. Sus compañeros pilotos enviaron seis más de los 323, envueltos en llamas alimentadas con gasolina, sumergiéndose en el mar.

De una flota de alrededor de 250 de estos enormes aviones de batalla, los registros alemanes muestran que entre el 5 de abril y el 12 de mayo de 1943, se perdieron 166 aviones y sus cargamentos de suministros críticos. Entre el 18 y el 22 de abril, los combatientes aliados afirmaron haber derribado a unos 120 aviones de transporte Ju52 y Me323 de la Luftwaffe. Después del 22 de abril, la Luftwaffe se vio obligada a volar transportes aéreos solo por la noche, y con pérdidas continuas para los combatientes nocturnos aliados, en números cada vez más reducidos.#

En contraste, los aliados no tenían tal escasez de suministros. En el suelo tenían más hombres, más armas, más tanques, y en el cielo la ventaja decisiva: la superioridad aérea. Sin embargo, los alemanes aún tenían los pases vitales a través de las colinas que rodeaban Túnez, causando terribles pérdidas mientras soportaban cada ataque aliado. En los corredores costeros del sur y del norte, parecía imposible concentrar fuerzas suficientes para abrirse paso. El valle de Medjerda fue bloqueado por las defensas alemanas en Longstop Hill. Después de que los alemanes habían derrotado los desesperados ataques aliados el 25 de diciembre de 1942 para retener a Longstop, habían cavado en extensas y formidables defensas contra lo que era para ellos, su Weinachtshügel (Colina de Navidad).

Por fin, en la última semana de abril, llegó el gran avance buscado. El Octavo Ejército capturó Longstop Hill y otros puntos fuertes enemigos en el valle de Medjerda. Aquí estaba la oportunidad de concentrar fuerzas para un empuje decisivo en Túnez. Los generales alemanes sabían que se avecinaba una gran ofensiva, pero no si sería el Octavo Ejército del sureste, el Primer Ejército en el centro o los estadounidenses en el noroeste.

El plan final fue un ataque de punta de lanza en el centro a principios de mayo por parte del Primer Ejército combinado con elementos transferidos del Octavo Ejército. Batallones de infantería británicos endurecidos por la batalla de la 1ª y 4ª y 78ª divisiones blindadas romperían primero las líneas alemanas. Luego, las Divisiones Blindadas 6 y 7, después de abrirse camino a través de la ciudad estratégica de mercado aliada de Medjez el Bab, se abrirían camino a través del valle de Medjerda a través de Massicault y St. Cyprien hasta Túnez.

Sin embargo, en el despliegue de la redistribución y la concentración, hubo un gran riesgo. La debilidad inherente del plan era que los tanques y sus vehículos de apoyo transferidos desde el Octavo Ejército en el sur tendrían que moverse a la vista a través de las colinas al norte hasta Medjez el Bab. Luego, interminables columnas de tanques, infantería y suministros tendrían que arrastrarse por el único puente sobre el río Medjerda en Medjez.

Solo entonces el ataque podría concentrarse en un frente estrecho de 3,000 yardas en el fondo del valle para conducir hacia Túnez. En los días de reposicionamiento y concentración, las fuerzas aliadas serían manifiestamente susceptibles al reconocimiento alemán, y al consiguiente ataque por tierra y aire. Una vez más, la pregunta era: ¿cómo podría hacerse esto sin que los alemanes se dieran cuenta y respondieran con sus propios redistribuciones de tropas? A pesar de las enormes pérdidas impuestas a la Luftwaffe, incluso a finales de abril, con los aviones que les quedaban, los alemanes tenían la capacidad de montar una redada desesperada de "último lanzamiento".

#

Las posiciones del Eje en las colinas alrededor de Enfidaville eran muy fuertes, y desde el aire era difícil identificar objetivos entre los huertos, campos y plantaciones dentro de las crestas y el terreno montañoso. Era muy diferente del desierto y los vehículos enemigos evitaban el uso de carreteras durante el día. En una operación, los Huracanes antitanque del Escuadrón No. 6, a pesar de ver el humo de color de las posiciones del Octavo Ejército, no pudieron identificar las fuerzas del Eje que se escondían entre los olivares. En lugar de objetivos visibles, los pilotos tenían que ser informados con áreas designadas en fotografías aéreas, lo que requería un nuevo enfoque y capacitación.

Desde el mar al norte de Enfidaville, las fuerzas del Eje establecieron una línea defensiva a través de las colinas del noroeste a Medjez el Bab en el valle de Medjerda, luego nuevamente al norte a través de las montañas hasta la costa a unas veinte millas al oeste del puerto de Bizerta. La llanura frente a Medjez en el valle de Medjerda fue claramente la más favorable para que un ataque blindado llegara a Túnez. Alexander y Montgomery acordaron que el Octavo Ejército debería restringir sus esfuerzos para mantener la presión sobre las defensas de Enfidaville en una operación de espera. El 18 de abril, la 1ª División Acorazada y la Guardia del Dragón del Rey, y más tarde, el 30 de abril, la 7ª División blindada y la 4ª División india, la Brigada de la Guardia 201 y algo de artillería se movieron para unirse al Primer Ejército cerca de Medjez.

Una conferencia de planificación conjunta determinó que DAF volvería a recibir apoyo cercano del ejército / aire para cubrir el viaje blindado por el valle de Medjerda a Túnez. Los primeros movimientos de fuerzas del Octavo Ejército comenzaron el 30 de abril. Debido a que los pilotos de DAF no se experimentaron con el terreno del área de batalla y las comunicaciones se canalizaron a través de los cuarteles generales del Primer Ejército y del Octavo Ejército, los objetivos para los escuadrones de DAF se establecieron y acordaron de antemano. Una enorme letra "T" de 150 yardas de largo se marcó en blanco en el suelo, así como en humo rojo y azul, para ayudar a la navegación de los pilotos.

El plan de apoyo aéreo y los plazos para un "bombardeo aéreo" el 6 de mayo fueron:

0540: Ochenta y cuatro bombarderos medianos de la Tactical Bomber Force (TBF) bombardearían las posiciones terrestres del Eje directamente frente al avance de las tropas aliadas.

0730–0800: 126 bombarderos ligeros de DAF atacarían sus objetivos preseleccionados más atrás.

0830–0930: Ochenta y cuatro bombarderos medianos de TBF bombardearían objetivos a una distancia mayor.

0930–1200: Fighter-bombers of 242 Wing RAF atacaría objetivos de oportunidad en el área de batalla.

1200 en adelante: 108 bombarderos ligeros de DAF estarían listos para atacar las reservas enemigas, mientras que los bombarderos de DAF buscarían movimientos de fuerza del Eje en carreteras y valles.

Al contrario de algunas expectativas, el movimiento inicial de las divisiones blindadas del sur a Medjez, protegido por la cobertura aérea dominante de DAF, se logró sin el conocimiento o el obstáculo del enemigo. Era una clara demostración de cómo la superioridad aérea podía permitir que las fuerzas terrestres se reposicionaran sin interferencias.

El empuje blindado para Túnez comenzó con seis divisiones, y todos sus suministros, en un lento arrastre a través de ese único puente en Medjez. El poder aéreo tenía la tarea de imponer una pantalla protectora, un paraguas sobre la ruta del valle para hacerlo impenetrable a cualquier enemigo de reconocimiento o ataque aéreo. Parecía que gritaba para que una incursión de bombardeos en picado de Stuka golpeara ese único y único puente en Medjez, y cortara la ofensiva en dos.

El 6 de mayo, día uno del avance a través de Medjez, los aviones aliados volaron unas 2.500 salidas, atacando a las fuerzas del Eje en sus bases traseras, y bombardeando y atacando sus defensas en el camino del ataque aliado. Para las 8.00 horas del 6 de mayo, la infantería británica había abierto un camino a través de las posiciones alemanas y sus campos de minas, tomó objetivos como Frendj, y excavó. En un ejemplo del apoyo aire-tierra, y en coordinación con un bombardeo de artillería que precedió al Infantería de plomo y tanques, bombarderos ligeros de DAF y Kittyhawks alcanzaron las posiciones del Eje en Bordj Frendj y St Cyprien, deteniendo un convoy de 100 camiones enemigos.

Luego, las divisiones blindadas irrumpieron para tomar Massicault antes del anochecer. El 7 de mayo, la armadura entró en Túnez, tomando por sorpresa a muchas fuerzas del Eje. Algunas tropas enemigas incluso emergieron de bares y restaurantes, con miradas de asombro, y se rindieron sin luchar. El poder aéreo aliado había hecho de los cielos sobre Medjez y el valle de Medjerda otra zona de exclusión aérea.

Fue la combinación de un "bombardeo aéreo", apoyo aéreo, artillería y una armadura masiva que, el 7 de mayo, permitió que la 7ª División Blindada irrumpiera en Túnez. En las fuerzas norteamericanas tomaron el puerto de Bizerta. Las fuerzas aéreas del Eje fueron impotentes para ayudar a sus tropas en tierra. El 8 de mayo, las líneas de frente avanzaban tan rápidamente que el Primer Ejército solo permitía solicitudes específicas de apoyo aéreo.

El 8 de mayo, la Luftwaffe pudo realizar solo sesenta salidas, algunas de ellas desde solo dos bases aéreas operativas que retuvieron en la península de Cabo Bon. El 9 de mayo hubo incluso menos salidas de la Luftwaffe, y el 10 de mayo no hubo ninguna. Los alemanes habían huido de los cielos tunecinos, evacuando qué aviones, equipos y personal podían.

Pequeñas embarcaciones que intentaban evacuar las tropas del Eje por mar fueron atacadas por combatientes. Un gran ejercicio de evacuación el 9 de mayo, cuando fue atacado por bombarderos ligeros de la Tactical Bomber Force y cazas DAF, se rindió rápidamente. Las grandes formaciones de las tropas del Eje se rindieron, pero algunas todavía se movieron hacia la costa, a pesar de que ningún barco pudo salir. En las montañas al norte de Enfidaville el 10 de mayo, el Primer Ejército italiano, incluido el Décimo Panzer alemán, la 90.ª División Ligera y la 164.ª División de Infantería, todavía se mantenía. La 90.ª División Ligera tenía el camino de la costa y estaba impidiendo que los Ejércitos Primero y Octavo se unieran.

El 12 de mayo se planeó una incursión de bombarderos ligeros en la 90 División Ligera. Las tropas aliadas estaban a solo 1.500 metros del enemigo, por lo que se colocó un bombardeo de artillería con humo amarillo tanto al norte como al sur de las posiciones de la 90.ª Ligera. Los bombardeos fueron precisos, y muy rápidamente las banderas blancas estaban por todas partes. Resultó ser el último ataque aéreo contra las fuerzas terrestres de la campaña del norte de África.

La captura de Túnez trajo la rendición del Eje y 250.000 prisioneros. Fue en la misma escala que la derrota alemana en Stalingrado, y fue aclamado como el cambio de rumbo. Y una vez más el poder aéreo había sido el decisivo "cambio de juego".

El éxito en el norte de África del apoyo de DAF al ejército se basó en la obtención de la superioridad aérea, que a su vez se basó en ganar la guerra aérea primero. La base integral para ganar la guerra aérea se derivó de la decisión estratégica de la RAF de comprar combatientes en lugar de bombarderos en picado. Y, por supuesto, el rendimiento superior del Spitfire en batallas aéreas de luchador contra combatiente fue un factor significativo.

Quizás los más importantes fueron los sistemas de control de apoyo aéreo / ejército a través de los grupos AASC, pioneros y mejorados entre el ejército y la fuerza aérea desde 1941 hasta 1943. En la campaña tunecina, en un terreno tan diferente del desierto, los mensajes 'flash' de AASC en el Ejército Se introdujeron HQ a ALO en los aeródromos de DAF. Esto mejoró mucho la capacidad de los ALO para comunicarse y explicar los nuevos desarrollos en el área de batalla a los pilotos. DAF desarrolló una plataforma en esta área en la que se podía ganar la superioridad aérea y, con suerte, mantenerse durante la invasión aliada planificada de Italia.

viernes, 9 de noviembre de 2018

SGM: Un soldado con lanzagranadas frena un ataque alemán

Con su lanzador de granadas, un solitario soldado británico reprueba un ataque de tanque alemán

Tragedia, alcohol y un tren finalmente derrotaron a Francis Jefferson


Matthew Moss | WIB



Un PIAT en acción en un campo de tiro en Túnez en febrero de 1943

El 6 de mayo de 1944, durante la Batalla de Monte Cassino en Italia, Francis Arthur Jefferson, un soldado de Lancashire Fusiliers del ejército británico, se enfrentó a un tanque alemán con un lanzador de granada antitanque Proyectile Infantry, o PIAT.

La acción hizo famoso a Jefferson. Pero la fama no le ahorraría un destino trágico.

Un obstáculo antitanque había detenido a los tanques de apoyo de los Fusileros. El batallón había avanzado solo y había comenzado a establecer una posición defensiva. Sin soporte de tanque y sin pistolas antitanques disponibles, los Fusiliers estaban en una posición expuesta.

Los alemanes contraatacaron con dos Panzers Mark IV y la infantería de apoyo, abrieron fuego a corta distancia y mataron a un equipo de PIAT que intentaba atacarlos.

Jefferson, un joven de 23 años de Ulverston, Lancashire, tomó un PIAT cercano y avanzó para enfrentarse al avance de los Panzers. "Corriendo hacia adelante solo bajo fuego pesado, [Jefferson] tomó una posición detrás de un seto; como no podía ver bien, salió a la luz y, levantándose bajo una lluvia de balas, disparó contra el tanque principal que ahora estaba a solo 20 yardas de distancia ", explicaría su cita de Victoria Cross. "Estalló en llamas y toda la tripulación fue asesinada".



Frank Jefferson en la foto con PIAT. 

Fusilier Jefferson luego recargó su PIAT y avanzó en el segundo tanque, pero el vehículo comenzó a retirarse antes de que Jefferson pudiera entrar dentro del alcance efectivo del arma de unos 50 metros.

"En este momento nuestros propios tanques habían llegado y el contraataque enemigo fue aplastado con grandes bajas", dice la cita. "El acto valiente de Fusilier Jefferson no solo salvó las vidas de su compañía y causó muchas bajas a los alemanes, sino que también rompió el contraataque del enemigo y tuvo un efecto decisivo en la operación posterior. Su suprema gallardía e ignorancia del riesgo personal contribuyeron en gran medida al éxito de la acción ".

Jefferson permaneció en el ejército hasta 1946, finalmente se desmovilizó con el rango de cabo de lanza. Fue uno de los siete beneficiarios de Victoria Cross, el galardón más grande de gallardía de Gran Bretaña, por acciones relacionadas con PIAT.

Su Victoria Cross fue tristemente robada de su casa en Bolton durante un robo en 1982. Esto deprimió enormemente a Frank, quien comenzó a beber mucho. Fue atropellado por un tren y murió en septiembre de 1982 a la edad de 61 años.