martes, 14 de junio de 2022

Campañas contra el indio: Combate de Loreto

Combate de Loreto

Revisionistas




General Hilario Lagos (1806-1860)

A principios del siglo XIX la provincia de Santa Fe era lugar de tránsito de los escuadrones indígenas que se dirigían a engrosar su codicia, sobre los poblados de la campaña bonaerense. Sin un plan estudiado ni recursos para frenar con éxito a los depredadores, la defensa era casi nula, sólo la Campaña sería el único remedio para acabar con los malones que asolaban medio territorio, postergando su desarrollo civilizador.

La campaña de 1833 dirigida por Juan Manuel de Rosas que siempre gozó de menos prensa que la de Julio Argentino Roca, fue tal vez más sangrienta, pero no exterminadora. Después de la expedición 1833 y 1834, en Buenos Aires se logró una relación armónica con algunos grupos indígenas pampeanos, instalados en la zona fronteriza. Esta relación se sustentaba en la contraprestación de bienes y servicios: las tribus auxiliaban en la defensa de la frontera y el gobierno les entregaba raciones de ganado (yeguarizo, vacuno y ovino), yerba, tabaco y azúcar. Esta armonía se quebró con la caída de Rosas, y los enfrentamientos se convirtieron en el rasgo más frecuente.

Mientras los alcaldes mayores se ocupaban especialmente del orden y la tranquilidad pública de la Villa del Rosario, más el comandante militar a cuyas órdenes actuaban los pocos milicianos que tenía la guarnición local, los gobernantes descuidaban las fronteras de la provincia por donde pululaban desertores y bandidos que en alianza con los bárbaros eran tan feroces y salvajes como ellos. Así se sucedían correrías que obligaban a los pobladores a emigrar siempre dentro de la geografía santafesina, mientras el gobernador hacía colocar piquetes en las cuatro postas de la zona amenazada.

No obstante las hordas salvajes penetraban con siniestros planes de destrucción saciando sus feroces instintos, saqueando y reduciendo a cenizas los fuertes entre ellos el de Melincué, situado en el sudeste provincial donde se apropiaron de cañones que habían sido colocados en una estancia del arroyo Pavón.

A tal punto cundió el pánico que el mismo gobernador optó por salir a la campaña para sorprender a los aborígenes que se desplazaban libremente por su territorio.

En 1838 más de mil indios ranqueles al mano del cacique Quiñamay y Chipitruz, aplicando principios estratégicos hasta entonces desconocidos, atacaron en tres divisiones, una por la costa del río Carcarañá, otra por las chacras del Gamonal y la tercera por la Horqueta, amenazando devastar el S. y O. del departamento Rosario.

El gobernador Juan Pablo López en combinación con el coronel Hilario Lagos y milicianos de Buenos Aires se reunieron en el Pedernal , al sur de Melincué, totalizando unos 500 hombres, que avanzaron hasta Loreto (1) para enfrentar las 2.000 lanzas ranqueles. Cuando lejos de hallarlos en actitud de ferocidad, se encontraban en medio de libaciones y danzas celebrando el éxito de sus arremetidas. López conformó las tropas en tres columnas comandadas por los coroneles Lagos, Moreyra y Soayre.

Medallas otorgadas al Gral. Hilario Lagos

Sorprendidos los naturales algunos se lanzaron a la lucha profiriendo gritos feroces, mientras otros huían desordenadamente dejando más de un centenar de muertos.

Tomado prisionero el cacique Quiñimay, las fuerzas nacionales rescataron cautivos y hacienda robada, mientras el cacique Chipitruz conseguía evadirse.”

El gobernador de Buenos Aires, don Juan Manuel de Rosas otorgó a los vencedores una medalla de oro con la leyenda: “El gobierno reconocido a la virtud y al valor”. Buenos Aires, 22 de diciembre de 1838. Medalla que, como un preciado tesoro, aún conserva el biznieto del general Hilario Lagos, el coronel mayor Luis Hilario Lagos, la cual hemos tenido el privilegio y el honor de apreciar en una de las “Tertulias Federales” organizadas por los Patricios de Vuelta de Obligado.

De esta manera el general Hilario Lagos finalizó sus contiendas con los indios al defender el sur de la Provincia de Santa Fe, en donde los indios ranqueles estaban haciendo los malones y masacrando gente, quemando estancias y robando ganado. Adolfo Saldías, el padre del revisionismo histórico vernáculo, lo consideró a Lagos “la primera lanza de la caballería federal“.

Referencia

(1) Paraje del antiguo Pago de los Arroyos, a 165 Kilómetros de la actual ciudad de Venado Tuerto, departamento General López.

Fuente
Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado.
Mikielievich Wladimir C. – “Batalla de Loreto” – Diccionario de Rosario. Tomo XXXI. Rosario, 1960.
Portal www.revisionistas.com.ar
Yaben, Jacinto R. – Biografías argentinas y sudamericanas – Buenos Aires (1938).

lunes, 13 de junio de 2022

Comunismo: Cuando la KGB inundó la educación y la cultura en Latinoamérica

El ex-agente de la KGB Yuri Bezmenov explica la subversión ideológica comunista en América





El ex agente del KGB Yuri Bezmenov desempeñó un papel en la “subversión ideológica comunista de la Unión Soviética en América“, que comenzó en los años 20 y continuó hasta finales de los 80, pero estas ramificaciones continúan en la sociedad occidental hasta el día  hoy.

KGB son las siglas de “Komitet Gosudarstrennoaja Bezopasnosty”, Comité de la Seguridad del Estado. Es una Organización de la antigua Unión Soviética dedicada al espionaje y contraespionaje.

En este caso Bezmenov era un experto en propaganda política, ocupaba un puesto en la agencia de prensa estatal Nosoti ,que era en realidad una fachada de la KGB .

A pesar de lo que se pueda pensar, las actividades de espionaje sólo ocupaban una pequeña fracción de los recursos del KGB. La mayor parte de la maquinaria del KGB se centró en operaciones de subversión ideológica en las sociedades occidentales.

Bezmenov dijo :

“El énfasis principal del KGB no está en el área de la inteligencia en absoluto.
Según mi opinión y la de muchos desertores de mi calibre, sólo un 15 por ciento del tiempo, el dinero y la mano de obra se dedica al espionaje como tal.
El otro 85 por ciento es un proceso lento, que llamamos subversión ideológica, o medidas activas, o guerra psicológica”.

Hablando con G. Edward Griffin en el siguiente vídeo realizado en 1984, Yuri Bezmenov explicó que este proceso de “subversión ideológica” se hace en cuatro etapas, siendo la primera la “desmoralización”.



Bezmenov declaró:

“El objetivo de este proceso es cambiar la percepción de la realidad de todos los estadounidenses hasta el punto de que, a pesar de la abundancia de información, nadie sea capaz de llegar a una conclusión sensata en aras de defenderse a sí mismo, a sus familias, a sus comunidades y a su país.
Se necesitan entre 10 y 15 años para desmoralizar a una nación.
¿Por qué tantos años? Porque es el número mínimo de años que se necesita para educar a una generación de estudiantes en el país.”

Ideología marxista-leninista

El ex agente de la KGB afirmó que la ideología marxista-leninista fue inyectada en las mentes indulgentes de al menos tres generaciones de estudiantes estadounidenses sin ser desafiada o contrarrestada por los valores básicos del americanismo y el patriotismo estadounidense.

“¿El resultado? El resultado se puede ver: La mayor parte de la gente que se graduó en los años 60 -abandonados intelectuales desertores- ocupan ahora puestos de poder en el gobierno, la administración pública, las empresas, los medios de comunicación, [y] el sistema educativo.
No puedes hacerles cambiar de opinión aunque les expongas información auténtica, aunque les demuestres que lo blanco es blanco y lo negro es negro no puedes cambiar su percepción básica y su lógica de comportamiento.
En otras palabras, [con] estas personas, el proceso de desmoralización es completo e irreversible”, dijo.

Cabe aclarar que si un régimen marxista-leninista acabara llegando al poder, Bezmenov afirmó que estos izquierdistas e idealistas estadounidenses estarían señalados para ser ejecutados, porque una vez que se dieran cuenta de la realidad de un sistema socialista soviético brutal, se revelarían.

“Un régimen marxista-leninista no tolera a esa gente. En un estado marxista-leninista, no habrá lugar para la disidencia”

Bezmenov añade que personas de izquierdas como Jane Fonda serían aplastadas como cucarachas.

Así también afirmó que el proceso de desmoralización en Estados Unidos se completó y fue un éxito, hasta tal punto que habría sorprendido a los altos mandos de los entonces dirigentes del KGB.

Esto puede llevarse a cabo, entre otras cosas, por la falta de normas morales en la sociedad.

“Una persona desmoralizada es incapaz de aceptar la información verdadera; los hechos no le dicen nada”

Dijo Bezmenov y añadió que estos individuos sólo se dan cuenta de la verdad del estado socialista soviético cuando están en un gulag y son aplastados por una bota militar.

Próximas etapas de la subversión en América

La segunda etapa consiste en subvertir la economía, los sistemas de defensa y la política exterior, que, según él, está plagada de ideología marxista-leninista.

Por su parte, la tercera etapa es cuando las crisis llegan a la sociedad.

“Esto sucederá cuando todos los “imbéciles” prometan todas las bondades y traer el paraíso a la Tierra. Desestabilizar la economía, eliminar el principio de la competencia del libre mercado y poner un gran gobierno en Washington, D.C. con un dictador benévolo que promete muchas cosas.
Sin importar si esas promesas se cumplen o no”.

Según Yuri Bezmenov, este tipo de política crearía finalmente una crisis violenta que provocaría el derrocamiento del gobierno y de la sociedad.

La cuarta etapa de los planes soviéticos es entonces la “normalización”, en la que una dictadura socialista gobierna de forma suprema y no tolera la disidencia.

Yuri Bezmenov asignado a una embajada soviética

Yuri Bezmenov participó en las actividades subversivas del KGB mientras estaba destinado en la embajada soviética en Nueva Delhi, India.

En este caso, el KGB incluso le hizo visitar a Maharishi Mahesh Yogi, que se hizo famoso por ser el gurú de personas como los Beatles y los Beach Boys . Bezmenov debía informar sobre qué tipos de VIPs de Occidente acudían a la escuela del gurú para aprender la Meditación Trascendental.

Esos tipos alternativos, decía Bezmenov, eran más fáciles de manipular.

Yuri Bezmenov dijo que trabajaba para el Departamento de Investigación y Contrapropaganda de la embajada, pero que la mayor parte de su actividad consistía en recopilar enormes volúmenes de información sobre personas que tenían un papel decisivo en la formación de la opinión pública.

Entre ellos miembros del parlamento, profesionales de los medios de comunicación, actores, educadores y líderes empresariales.

Estos tipos de influencia se dividieron en dos grupos:

  • Aquellos que seguirían la política exterior soviética. Serían promovidos a posiciones de poder político mediante la manipulación de los medios de comunicación y de la opinión pública.
  • Aquellos que rechazaban las influencias soviéticas en su propio país, los cuales eran objeto de asesinatos de carácter y/o estaban destinados a ser ejecutados si la revolución socialista tenía lugar.
“Para mi horror, en los archivos [de su despacho en la embajada soviética] había personas condenadas a la ejecución. Había nombres de periodistas prosoviéticos con los que yo tenía amistad personal”,

dijo Bezmenov y agrego:

“Eran izquierdistas de mentalidad ideológica que hicieron varias visitas a la URSS y, sin embargo, el KGB decidió que cuando se produjera la revolución o los cambios drásticos en la estructura política de la India, tendrían que irse [ser asesinados]”.

¿Pero por qué?…

“Porque saben demasiado.
Simplemente porque son idiotas útiles, los izquierdistas que creen en el sistema socialista o comunista soviético, cuando se desilusionan se convierten en los peores enemigos”,
dijo Bezmenov.

El verdadero “Tiro al blanco”

Los instructores del KGB le dijeron a Bezmenov que no se molestara con los izquierdistas y que apuntara más alto.

Los verdaderos objetivos eran los grandes medios de comunicación establecidos, los ricos productores de cine, los intelectuales y los círculos académicos.

Así también le dijeron que se dirigiera a “personas cínicas y egocéntricas que pueden mirarte a los ojos con una expresión angelical y decirte mentiras, [ya que] son las personas más reclutables que carecen de principios morales, personas codiciosas o que sufren de prepotencia, sienten que importan mucho”. Esta es la gente en la  que KGB estaba interesada en seleccionar.

Ver los nombres de esos periodistas en la lista de muertos enfermó mental y físicamente a Yuri Bezmenov.

Eso y las actividades del KGB para fomentar los disturbios violentos en Pakistán Oriental (Bangladesh) le ayudaron a decidirse a desertar a Occidente en 1970.

“Mi principal motivación para desertar no tenía nada que ver con la opulencia (como en la búsqueda de una vida mejor), era principalmente la indignación moral, la protesta moral, la rebelión contra los métodos inhumanos del sistema soviético”.

Dijo, refiriéndose también a la opresión soviética de los disidentes e intelectuales rusos.

“Para mi horror, descubrí que somos un millón de veces más opresivos que cualquier potencia colonial o imperialista de la historia de la humanidad…
Lo que mi país aporta a la India no es la libertad, el progreso y la amistad entre las naciones, sino el racismo, la explotación, la esclavitud y, por supuesto, la ineficacia económica”

Yuri Bezmenov declaró haberse enamorado literalmente de la India y desarrolló lo que más teme la KGB, la “división de lealtades”, es decir, cuando a un agente le gusta más el país de destino que el suyo propio.

Vida de Yuri Bezmenov

Nacido en 1939, Yuri Bezmenov era hijo de un militar soviético de alto rango.

Cuenta haber tenido una vida privilegiada y que, como miembro de la élite, asistió a las mejores instituciones educativas.

Tras su deserción, Yuri Bezmenov vivió en Canadá y, durante la década de 1980, escribió varios libros. Falleció en 1993.

Nota del editor: Las pruebas que han salido a la luz en los últimos años, incluidos los archivos del programa de contrainteligencia Venona y los archivos soviéticos, demuestran la existencia de una amplia subversión soviética no sólo en Estados Unidos, sino en otras naciones occidentales.

¿Sabías que hoy en día el marxismo sigue prosperando en los ámbitos educativos estadounidenses?

Para saber cómo el marxismo sigue subvirtiendo la cultura estadounidense a través de la educación, te invitamos a ver el siguiente vídeo:




domingo, 12 de junio de 2022

PGM: Libre comercio y guerra

Libre comercio y guerra

“La Primera Guerra Mundial: Una Interpretación Agraria” de Avner Offer
 
Branko Milanovic






Las personas que han leído mis publicaciones en los últimos dos años habrán notado que hablé varias veces sobre los orígenes de la Primera Guerra Mundial ( aquí y aquí y aquí). Hay dos razones por las que creo que esto es importante. En primer lugar, muy pocas personas estarían en desacuerdo con que nuestro mundo todavía está moldeado por lo que sucedió entonces. La guerra no solo terminó con los sistemas semifeudales en Europa y destruyó cuatro imperios, sino que llevó al mundo a revoluciones comunistas y luego fascistas, y también a la descolonización. Entonces, la mayor parte de lo que existe políticamente hoy tiene su origen en 1914. La segunda razón es que el período que precedió a la Primera Guerra Mundial fue un período de globalización más completa hasta la fecha, comercio relativamente libre y (lo que se llamaría hoy) políticas neoliberales. . Así, las similitudes entre ese mundo y el nuestro son muchas.

Las teorías de lo que causó la guerra son casi tan numerosas como las teorías de lo que causó la caída del Imperio Romano occidental. Sin entrar en ninguno de ellos, creo que se pueden dividir útilmente en teorías que enfatizan los factores económicos, aquellas que enfatizan la política y, finalmente, aquellas que creen en los accidentes. Para mí, y diría que para la mayoría de los economistas, son las primeras (las teorías económicas) las que más nos interesan y, quizás por eso, las encontramos más sensatas. En mi nuevo libro “Desigualdad global: un nuevo enfoque para la era de la globalización” , utilizo una de ellas, la teoría de Hobson-Lenin que ve el origen de la guerra en la mala distribución interna del ingreso, la lucha por los mercados extranjeros y la necesidad de controlar físicamente los territorios donde se realizan las inversiones.

El excelente libro de Avner Offer “La Primera Guerra Mundial: Una Interpretación Agraria” (publicado en 1991) también brinda una explicación económica, pero algo diferente. Es posible que la interpretación particular de Offer sobre los orígenes de la guerra no sea tan conocida, así que permítanme dar aquí un resumen y una interpretación.

La oferta comienza con la derogación de las Leyes del Maíz en 1846. La derogación de las Leyes del Maíz abrió la agricultura británica a la competencia extranjera. La agricultura británica no podía competir, por lo que la mayor parte de los alimentos debían provenir del extranjero. Esto requería el control de los mares. La flota se convirtió en el sustituto de las tarifas. Gran Bretaña se hizo más rica al "permitir" el movimiento de mano de obra de la agricultura menos productiva a la industria, pero su economía y sociedad se volvieron más frágiles. La armada, como dice Offer muy bien, asumió el papel de las tasas arancelarias. Mientras existieron las Leyes del Maíz, las tarifas aseguraron que hubiera suficiente comida para los trabajadores; sin las Leyes del Maíz, una armada fuerte tenía que asegurarse de que los alimentos fueran enviados a Gran Bretaña.

Por lo tanto, Offer implica, y en ocasiones argumenta, que la especialización y la división internacional del trabajo llevaron directamente a la necesidad de un ejército fuerte. El libre comercio fue respaldado por las armas.

Pero este cálculo particular no se limitó a Gran Bretaña. A medida que otras naciones comenzaron a desarrollarse, especialmente Alemania, se enfrentaron a la misma disyuntiva. O Alemania mantuvo una parte significativa de su población en tierra en una agricultura de baja productividad, o pasó a toda velocidad a la industria manufacturera, para lo cual necesitaba que la mano de obra se trasladara a las ciudades y que los alimentos vinieran de otros lugares. Entonces, Alemania, como Gran Bretaña, tuvo que asegurarse de que pudiera recibir alimentos y materias primas, lo que implicaba también la creación de una armada y un control más fuerte sobre los vecinos agrícolas que producían alimentos, principalmente en el este (Rusia o lo que hoy es Ucrania). , y en los Balcanes. (Puede ver allí, si lo desea, las semillas de la doctrina del Lebensraum impulsada por la comida , un punto señalado recientemente por Timothy Snyder).

Otro elemento entró en escena también. Mientras tanto los británicos como los alemanes buscaban garantizar la seguridad de sus suministros de alimentos, se dieron cuenta de que, en caso de guerra, el suministro de alimentos era el punto más débil para ambos. Fue especialmente sensible porque la clase dominante de ningún país podía estar segura de la lealtad de sus trabajadores una vez que comenzó la guerra y se extendió la escasez de alimentos. Los partidos socialistas y los movimientos obreros, antes de la guerra, a menudo lo daban a entender. Se avecinaba una revolución socialista o una capitulación, o ambas cosas (como de hecho sucedió finalmente en Rusia, Alemania y Austria). Así, gradualmente, los planificadores militares británicos y alemanes se dieron cuenta de que la forma más efectiva de luchar contra el enemigo era interrumpir sus suministros de alimentos y que la forma más segura de permanecer invulnerable era tener una armada lo suficientemente poderosa como para repeler todos esos intentos del otro lado.

Las poblaciones civiles se convirtieron en el principal objetivo de guerra. (Offer abre el libro con el efecto final de esta estrategia: el hambre en Alemania en los meses previos al Armisticio y todo el camino hasta la firma del tratado de paz de Versalles.) Cada avance militar en el Reino Unido o Alemania dio solo un respiro temporal hasta que el movimiento fue igualado por el otro lado. A partir de ese momento, solo era cuestión de tiempo y oportunidad que estallara el conflicto.

No repasaré los detalles muy elaborados que ofrece Offer sobre la estrategia británica para golpear a Alemania en su (si puedo usar este dudoso juego de palabras) "panza blanda" (suministro de alimentos). Abarcó desde el bloqueo naval de los puertos del norte de Alemania, Bélgica y Holanda hasta la invasión terrestre del norte de Alemania. La planificación tuvo lugar entre 1905 y 1914, pero los hechos no se revelaron hasta la década de 1960 porque habrían caído bajo la rúbrica de preparativos para una guerra agresiva, que los Aliados, en Versalles, afirmaron que solo Alemania había hecho antes de la guerra.

Hay aquí un punto muy importante a tener en cuenta para los economistas. A diferencia de aquellos que (algo erróneamente) interpretaron que Ivan Bloch y Norman Angell creían que la creciente interacción y los vínculos económicos entre los países harían impensable la guerra, Offer argumenta implícitamente todo lo contrario. Es precisamente la decisión de especializarse en la producción de manufacturas (es decir, producir algo para lo que Gran Bretaña o Alemania poseían una ventaja comparativa) lo que condujo a la necesidad de tener una máquina de guerra y, en última instancia, a la guerra misma: "el ajuste a la economía". la especialización fue la causa raíz de la guerra" (p. 327). La Primera Guerra Mundial fue en efecto la primera guerra de la globalización.

Si bien la división internacional del trabajo hace que los costos de las guerras sean exorbitantes para todos los participantes, también requiere, para que el sistema se mantenga, un apuntalamiento armado permanente. Pero ese apuntalamiento armado permanente por sí solo hace más probable la guerra porque lleva a más de una potencia a hacer el mismo cálculo y llegar a las mismas conclusiones. Si reemplazáramos a Gran Bretaña y Alemania del libro de Offer por EE. UU. y China hoy, no seríamos muy negligentes.

Los países más diversificados, menos autárquicos, se vuelven mucho más productivos pero a costa de ser más frágiles y quebradizos ante cualquier disrupción. Nuestro muy sofisticado sistema económico puede detenerse por completo con (digamos) un mes de interrupción de todas las comunicaciones electrónicas. En 1926, Vladimir Mayakovski, después de pasar algún tiempo en Nueva York, escribió esto:

“Exactamente debajo de Wall Street corre un túnel de metro. ¿Qué pasaría si se llenara de dinamita y toda la calle explotara y desapareciera en el aire? También desaparecerían los registros de depósitos, títulos y números de serie de innumerables acciones, y las columnas de datos sobre la deuda externa”. ( América , Editorial Gallo Nero, Madrid, 2011, p. 120).

Mayakovski estaba tan lejos de ser un economista como todo poeta, pero a veces los poetas pueden ver mejor el futuro que los economistas.

Finalmente, me gustaría mencionar tres capítulos excelentes en el libro de Offer sobre la oposición a la migración asiática a Canadá, EE. UU., Australia y Nueva Zelanda. Traen, muy oportunamente, todos los temas con los que estamos familiarizados hoy: la actitud anti-inmigrante de la clase obrera (blanca) que vio en la mano de obra asiática un competidor contra el que estaban destinados a perder, el surgimiento de políticos populistas, estereotipos raciales (los asiáticos fueron atacados porque eran "inferiores" a los inmigrantes europeos, pero también porque eran "superiores", más inteligentes y más trabajadores), confiscación de los bienes de los inmigrantes potenciales (llamados entonces "tasas de aterrizaje" que los trabajadores indios y chinos tenían que pagar al ingresar a Canadá y los EE. UU.), y finalmente la prohibición total de la migración asiática.

sábado, 11 de junio de 2022

Frente Oriental: La planificación soviética de la operación Urano

Operación Urano: la planificación soviética

Weapons and Warfare

 





La batalla por Stalingrado y el Cáucaso se prolongó durante septiembre y octubre, ya que ambos bandos continuaron enviando más hombres a la región. Mientras tanto, utilizando las máximas que tanto le habían servido, Zhukov y el estado mayor estaban trabajando en un plan que cambiaría el equilibrio de la guerra en el este de una vez por todas. El plan se conoció como Operación Urano.

Mirando el frente extendido en el sector de Stalingrado, Zhukov y su personal inmediatamente aprovecharon las oportunidades que brindaban las grandes áreas en poder de los aliados del Eje. Los soviéticos tenían dos extensas cabezas de puente en la orilla occidental del Don frente a las fuerzas de Dumitrescu, que les proporcionarían sus puntos de ataque en el norte. El ejército de Constantinescu, con su largo y débil frente defensivo, proporcionaría el lugar perfecto para el ataque del sur.

Los rusos ya eran maestros del engaño y el camuflaje, pero Zhukov y su personal lo convirtieron en un arte. Mientras se ponían en marcha los planes para Urano, los soviéticos lanzaron varios pequeños ataques contra el Heeresgruppe Mitte. Se establecieron formaciones ficticias con sus propias redes de radio en el sector, dando a los oficiales de inteligencia alemanes la impresión de que los rusos estaban concentrando fuerzas para una ofensiva de finales de otoño o principios de invierno contra el Heeresgruppe.



El Generaloberst Reinhard Gehlen, jefe del Fremde Heeres Ost (Ejércitos Extranjeros Este) del alto mando alemán, estaba a cargo de recopilar y descifrar información de inteligencia en el Frente Oriental. Aunque sorprendido por el número de divisiones rusas identificadas durante los primeros meses de la invasión de 1941, su oficina aún no apreciaba las vastas reservas de mano de obra que poseía la Unión Soviética.

Con la supuesta acumulación de fuerzas soviéticas en el sector del Heeresgruppe Mitte, Fremde Heeres Ost estaba convencido de que los rusos no podrían poseer suficientes hombres para lanzar ningún tipo de ofensiva importante en el sur. Cuando los nerviosos comandantes rumanos sacaron a relucir el tema de una posible ofensiva soviética, se les dijo que no se preocuparan porque los rusos ya estaban al límite.

Zhukov enfrentó un problema de seguridad abrumador. Concentrar las divisiones para su ofensiva sin ser descubierto por los alemanes significaba que las unidades solo podían moverse de noche o con mal tiempo a medida que se acercaban al frente. Durante el día, los trenes y convoyes que transportaban hombres y material para Urano se detendrían, y las tropas camuflarían los vehículos, haciéndolos invisibles desde el aire.



En total, Zhukov tendría 11 ejércitos para montar su ofensiva. Serían aumentados por varias brigadas y cuerpos mecanizados, de caballería y de tanques separados. Se ensamblaron alrededor de 13.500 piezas de artillería y morteros junto con 115 destacamentos de artillería de cohetes, 900 tanques y más de 1.000 aviones. Fue una operación logística tremenda, pero los rusos pudieron llevarla a cabo sin que los alemanes se dieran cuenta.

Aunque estacionado en Moscú, el mariscal soviético hizo extensas visitas al frente para hablar con sus comandantes sobre Urano. Aunque no estaban al tanto del alcance general de la operación, los comandantes del Frente y del Ejército hicieron sugerencias sobre los objetivos en sus sectores particulares y la coordinación con las unidades vecinas y dieron otras opiniones que el mariscal envió a su personal de Moscú.

El cuartel general supremo y el personal de Zhukov incorporaron muchas de las sugerencias en el plan final para Urano. La inteligencia sobre las unidades enemigas opuestas también se canalizó directamente a Moscú. Mientras los soldados alemanes y rusos luchaban y morían entre los escombros de Stalingrado, la acumulación continuaba. A mediados de octubre, se estaban afinando los planes finales para Urano, y se esperaba que la operación pudiera comenzar en algún momento de la primera semana de noviembre.

A medida que se acercaba noviembre, los comandantes alemanes en el 6º Ejército enfrentaban escasez tanto de hombres como de material. También se estaban poniendo cada vez más nerviosos por los informes no confirmados de que los soviéticos se estaban concentrando en sus flancos. El engaño de Zhukov había funcionado en su mayor parte, pero incluso los rusos no pudieron enmascarar totalmente los movimientos de una fuerza tan masiva cuando llegó al alcance del oído de los alemanes. Los motores retumbaban y los caballos relinchaban, y los sonidos se escuchaban bien en el aire fresco de finales de otoño.

En el flanco izquierdo de Paulus, el XI Cuerpo de Ejército del general Karl Strecker tenía tres divisiones para cubrir un frente de más de 60 millas a lo largo de la curva del Don. Strecker sabía que esto era demasiado para que lo defendieran sus divisiones, por lo que las hizo retroceder a posiciones secundarias bien preparadas, reduciendo su frente a la mitad.

El teniente general PI Batov se aprovechó de inmediato de la situación enviando unidades de su 65º Ejército a través del Don para establecer otra cabeza de puente soviética. Luego, Batov llevó a cabo varios ataques enérgicos contra las nuevas posiciones de Strecker, pero los alemanes estaban demasiado atrincherados para avanzar.

Si bien estaba satisfecho con el desempeño de sus propias divisiones, Strecker mantuvo un ojo cauteloso sobre los rumanos a su izquierda. El 3.er ejército rumano estaba lamentablemente escaso de todo, especialmente de armas antitanque. Los suyos eran obsoletos, y Dumitrescu continuamente acosaba a los alemanes para obtener piezas más efectivas. Se habían transferido algunos cañones de 75 mm a su ejército, pero no lo suficiente como para detener cualquier ataque ruso importante.

Berlín también había ordenado al XLVIII Cuerpo Panzer del general Ferdinand Heim que se retirara de su sector en el frente y formara una reserva lista detrás del ejército de Dumitrescu. Elementos de la 14.ª División Panzer y la 1.ª División de Tanques Rumana también fueron enviados al área. Parecía un buen plan, pero el núcleo del cuerpo de Heim, la 22ª División Panzer, estaba equipada principalmente con tanques checos obsoletos. Además, uno de sus regimientos de granaderos panzer había sido separado de la división y trasladado a otro sector del frente.

Zhukov planeaba comenzar Urano el 9 de noviembre, pero la fecha tuvo que posponerse después de que el mariscal hiciera otra serie de visitas a sus comandantes. Al llegar a Serafimovich, un pequeño pueblo cosaco de agricultores y pescadores en el Don medio, consultó con los generales Konstantin K. Rokossovsky y Nicholai F. Vatutin, los comandantes de los frentes Don y Sudoeste. Señalaron que la lluvia helada y las fuertes heladas de la semana anterior habían dificultado mucho las cosas para las fuerzas que intentaban llegar al frente. También dijeron que había que abordar la escasez de ropa de invierno antes de sentir que sus hombres estaban listos para la batalla.

Pasando al cuartel general del 57º Ejército del general Fedor I. Tolbukhin al sur de Stalingrado, le dijeron a Zhukov que los hombres y el equipo no llegaban a tiempo y que la artillería aún no se había atrincherado y apuntado. Regresó a Moscú y pospuso Urano hasta el 17 de noviembre. Al enterarse de que las unidades aéreas marcadas para la ofensiva podrían no estar listas en esa fecha, Zhukov pospuso la operación por dos días más.

Stalingrado estuvo al borde del colapso ya que Urano fue pospuesto no una, sino dos veces. Cuanto más tiempo transcurriera, mayores serían las posibilidades de que los alemanes se enteraran de la acumulación masiva. Afortunadamente, Berlín tenía otros problemas con los que lidiar. El 8 de noviembre, los aliados desembarcaron en el norte de África francés, amenazando la retaguardia del mariscal de campo Erwin Rommel y condenando al cacareado Afrika Korps y al Panzer Army Afrika. El alto mando alemán ahora tuvo que dividir su atención, centrándose en los desastres potenciales en dos frentes.

A medida que se acercaba el 19, Zhukov envió sus órdenes finales. Urano implicaría un doble envolvimiento de Stalingrado con una fuerza principalmente de infantería rodeando la ciudad misma. Un anillo exterior, formado por unidades de tanques, mecanizadas, caballería e infantería, formaría un amortiguador de acero contra cualquier posible contraataque alemán. Las unidades alemanas y aliadas atrapadas entre los dos anillos serían sistemáticamente destruidas y, si surgiera la oportunidad, las fuerzas soviéticas en el sur avanzarían a Rostov y atraparían a las divisiones del Heeresgruppe A, que todavía estaba comprometido en el Cáucaso.

La primera fase de la operación involucró al Frente Sudoeste de Vatutin atacando al 3.er Ejército Rumano desde la cabeza de puente en la orilla occidental del Don. Al mismo tiempo, el Frente Don de Rokossovsky comenzaría el envolvimiento de Stalingrado desde el norte y el este. Un día después, el Frente de Stalingrado del general Andrei I. Eremenko atacaría al 4º ejército rumano en el área del lago Sarpa al sur de Stalingrado.

Ambos frentes debían enviar fuerzas blindadas y mecanizadas para unirse cerca de Kalach. Al mismo tiempo, otras unidades de los frentes se desplegarían y se dirigirían al oeste para proteger los flancos mientras se formaba el anillo exterior.

viernes, 10 de junio de 2022

Irak: Encuentran ciudad sumeria sumergida de los Mitanis

Sensación arqueológica: una ciudad antigua resurge en un embalse de Irak

La sequía extrema en Irak ha brindado a los arqueólogos alemanes y kurdos la oportunidad única de examinar una antigua ciudad de la Edad del Bronce, Zachiku. Era una carrera contrarreloj.
DW


 
La antigua ciudad en ruinas estuvo expuesta durante solo unas seis semanas.

El sur de Irak ha estado sufriendo sequías extremas durante meses. Desde diciembre, se han desviado grandes cantidades de agua de la presa de Mosul, la reserva de agua más importante de Irak, para evitar que se sequen las cosechas.

Debido al bajo nivel del agua, en el borde del embalse surgieron los restos de una ciudad de 3.400 años de antigüedad que desapareció hace décadas.

"Vi en las imágenes de satélite que el nivel del agua estaba cayendo, pero no estaba claro cuándo volvería a subir. Entonces, teníamos una ventana de tiempo desconocida", dice la arqueóloga alemana Ivana Puljiz, profesora junior en la Universidad de Friburgo. .

Pero los arqueólogos sabían que el sitio, conocido como Kemune, era interesante. Habían estado allí antes.

 
Los arqueólogos tuvieron poco tiempo para descubrir y documentar el sitio.

Entonces, Puljiz se reunió con Hasan Ahmed Qasim, arqueólogo kurdo y director de la Organización de Arqueología de Kurdistán, y Peter Pfälzner, profesor de arqueología alemán en la Universidad de Tübingen, para llevar a cabo una excavación de rescate espontánea.

Rápidamente reunieron a un equipo de arqueólogos alemanes y kurdos para descubrir y documentar la mayor cantidad posible del gran sitio.

El equipo inspeccionó la ciudad de la Edad del Bronce durante siete semanas en enero y febrero de 2022 antes de que volviera a inundarse por completo.

La excavación de emergencia revela grandes edificios

Durante una fase seca similar en 2018 , los investigadores descubrieron un palacio similar a una fortaleza ubicado cerca de una pequeña colina. Estaba bordeado por un gran muro de terraza.

 
"Tuvimos una ventana de tiempo desconocida", dice el arqueólogo Puljiz a DW

En ese momento, el equipo de Ivana Puljiz encontró restos de pinturas murales en tonos rojos y azules brillantes, que se cree que son una característica típica de tales palacios.

El hecho de que los pigmentos se conservaran a pesar de la inundación fue "una sensación arqueológica", dijo Puljiz a DW después de su visita al sitio en 2022.

"Por supuesto que teníamos grandes esperanzas. Con base en las cosas que habíamos encontrado en 2018, sabíamos que este sitio podría traer hallazgos interesantes. Pero no sabíamos exactamente qué encontraríamos [esta vez]", dijo Puljiz.

El equipo no quedó decepcionado: durante la excavación de este año, el arqueólogo dijo que pudieron descubrir otros edificios grandes, como una enorme fortificación con un muro y torres que rodeaban la ciudad.

Una ciudad poderosa que dominaba el área.

El descubrimiento de los investigadores de un gran almacén de varios pisos lleno de suministros fue particularmente emocionante.


La extensión de lo que una vez fue posiblemente una ciudad poderosa solo puede verse verdaderamente desde arriba


"El tamaño de este edificio por sí solo muestra que tuvo que albergar una enorme cantidad de bienes. Y estos bienes tuvieron que ser producidos y llevados allí primero", dijo Puljiz. Sugiere que la ciudad obtuvo sus suministros de un área circundante que controlaba.

Puljiz dijo que sus hallazgos iniciales sugirieron que el extenso complejo de la ciudad podría ser el antiguo Zachiku, un centro importante en el imperio Mitanni (alrededor de 1550 a 1350 a. C.). Zachiku controlaba gran parte del norte de Mesopotamia y Siria.

Sin embargo, no se sabe mucho sobre el antiguo Zachiku. "Hay muy, muy pocas menciones del nombre de esta ciudad en otras fuentes, por lo que solo ahora estamos sacando a la luz nuevos conocimientos al respecto", dijo Puljiz.

Vasijas de cerámica con más de 100 inscripciones

Las paredes y los cimientos del edificio parecen estar en muy buenas condiciones, dijo Puljiz, a pesar de que están hechos de ladrillos de adobe sin cocer que han estado bajo el agua durante décadas.

 

Los investigadores descubrieron vasijas de arcilla que contenían numerosas tablillas cuneiformes.

Es posible que un terremoto masivo que azotó la ciudad alrededor del año 1350 a. C. ayudara a preservar esos muros: cuando el edificio fue destruido y los escombros cayeron, es posible que cubrieran las partes inferiores del muro, preservándolos así.

Uno de los hallazgos más fascinantes, dijo el investigador, fue el hallazgo de cinco vasijas de cerámica, que contenían más de 100 tablillas cuneiformes, como en una especie de archivo.

La escritura cuneiforme es una de las formas más antiguas de escritura. Algunas de las tablillas de arcilla incluso se encontraron en "sobres" de arcilla.

"Cuando piensas que estas tabletas de arcilla, que no se cuecen, son solo arcilla sólida, estuvieron bajo el agua durante tanto tiempo y sobrevivieron y, con suerte, un filólogo puede leerlas pronto, entonces eso es realmente una sensación", dijo Puljiz.

Imperio desconocido de los Mitanni

Esas tablillas de arcilla se crearon en el período medio asirio, poco después de ese devastador terremoto, cuando la gente pudo haber comenzado a asentarse nuevamente en las ruinas de la antigua ciudad.

 

Los arqueólogos dicen que es una "sensación" de que las tablillas de arcilla sin cocer encontradas en el sitio no fueron destruidas.

Los textos cuneiformes ahora pueden proporcionar información sobre el final del período Mitanni y el comienzo del dominio asirio en la región. El reino de Mitanni todavía se considera uno de los estados menos explorados de la antigüedad.

Durante su apogeo a mediados del segundo milenio antes de Cristo, el reino se extendía desde la costa mediterránea a través de la actual Siria hasta el norte del actual Irak.
Heartland of the Mitanni yace en la oscuridad

Se dice que la realeza de Mitanni mantuvo un animado intercambio con los faraones egipcios y los gobernantes babilónicos . Sin embargo, alrededor de 1350 a. C., el imperio Mitanni fue conquistado por los vecinos hititas y asirios.

 
Los arqueólogos esperan que las láminas de plástico protejan el sitio hasta la próxima vez que el agua esté baja.

Los eventos que llevaron a la caída de la ciudad siguen sin estar claros. Para aprender más sobre el imperio Mitanni, los investigadores tendrían que investigar el centro del antiguo imperio, que probablemente estaba ubicado en lo que ahora es el norte de Siria, dijo el arqueólogo Puljiz.

Pero los muchos años de guerra en la región han hecho imposibles tales excavaciones arqueológicas.

"Sin encontrar textos notables del centro del imperio, es muy difícil hacerse una idea de cómo funcionaba, qué lo mantenía unido o qué hacían los terratenientes. Hasta ahora solo tenemos fuentes únicas y destacadas de áreas periféricas, como ahora de lo que probablemente sea el antiguo Zachiku", dijo Puljiz. "Pero el área central permanece en la oscuridad".

Antes de que la ciudad en ruinas quedara sumergida nuevamente por el embalse, los arqueólogos cubrieron los edificios excavados con una película plástica ajustada y grava para protegerlos de daños mayores. Con suerte, la ciudad perdida de los Mitanni reaparecerá en otra ocasión.


 

jueves, 9 de junio de 2022

Guerra de la independencia de Croacia

Guerra de Independencia de Croacia

Weapons and Warfare

 





El 22 de agosto de 1991, con el ultimátum del presidente croata a la presidencia del estado yugoslavo de detener la ayuda del ejército federal a las milicias serbias y desarmarlas; De lo contrario, afirmó, convertiría al ejército federal en un ejército de ocupación. Como era de esperar, la presidencia del estado yugoslavo estuvo bastante dividida en su respuesta y, en consecuencia, unos días después, el primer ministro croata llamó a la movilización general en previsión de una "guerra de liberación". El 14 de septiembre de 1991, las fuerzas croatas bloquearon más de cien cuarteles del ejército yugoslavo en toda Croacia. Si bien la estrategia de los gobiernos croatas emuló, quizás con retraso, el bloqueo de las bases del ejército yugoslavo por parte del gobierno esloveno en junio de 1991, las fuerzas croatas no estaban tan bien preparadas para la operación;

A diferencia de la operación eslovena, que se limitó a asegurar el paso fronterizo internacional, el alto mando del ejército yugoslavo inicialmente planeó disputar casi toda Croacia para cortar sus comunicaciones con el mundo exterior y derrotar a sus fuerzas armadas. Y, a diferencia de su operación eslovena, su campaña en Croacia, inicialmente, no fue autorizada por el gobierno federal yugoslavo y la presidencia estatal: el presidente de la presidencia estatal yugoslava y el primer ministro federal, ambos croatas, se opusieron a la campaña pero fue en vano. Sin embargo, la campaña planificada del ejército en Croacia requirió una convocatoria masiva de reservistas en Serbia y Montenegro y la activación de personal de oficiales de reserva. Ante una resistencia generalizada a esta convocatoria, la deserción de sus reservistas, su propio mando y comunicaciones deficientes,
  • un asalto concentrado en Eslavonia occidental y oriental y Baranja, incluidas las ciudades de Vukovar y Osjek (con importantes poblaciones serbias);
  • un asalto a la ciudad costera de Dubrovnik y su interior; . un bloqueo naval de los puertos más grandes de Croacia y la extracción del equipo de la marina federal yugoslava de esos puertos;
  • la retirada de personal y armas pesadas de sus guarniciones en Croacia, incluida la guarnición central en Zagreb.

Aparte de su campaña para ampliar los territorios ya controlados por las milicias serbias, el ejército federal yugoslavo también intentaba asegurar los enlaces de comunicación de Serbia y Montengro. La ciudad de Vukovar, por ejemplo, (con una población mixta serbia y croata de proporciones casi iguales), controla el acceso al Danubio y el interior montañoso de la ciudad adriática de Dubrovnik (con una población serbia muy pequeña) controla los enlaces de comunicación a la principal base naval yugoslava en Kotor en Montenegro.

Si bien no fueron desplegados ni armados para contrarrestar un ataque de tal magnitud, el ejército croata, las unidades de policía, varias unidades de voluntarios y mercenarios extranjeros (probablemente más de 120 000) pudieron frenar y detener el avance inicial del ejército yugoslavo. En particular, las unidades de voluntarios (como las de la ultraderechista Liga de Defensa Croata - HOS) proporcionaron la columna vertebral de la resistencia al ataque del ejército yugoslavo en Vukovar y otros lugares. Sin embargo, las fuerzas croatas no pudieron impedir que el ejército, mucho mejor equipado y entrenado, lograra la mayoría de sus objetivos: el ejército ocupó el interior de Dubrovnik casi sin oposición y, tras un asedio de tres meses y un bombardeo de artillería, en noviembre de 1991, también tomó las ruinas de Vukovar; la mayor parte del personal y el equipo del ejército se recuperó de las guarniciones e instalaciones portuarias bloqueadas. Si bien los combates continuaron hasta noviembre de 1991, a fines de octubre, la línea del frente, que seguía aproximadamente las fronteras de las áreas pobladas por serbios de Krajina, Lika, Banija, Kordun y Eslavonia Oriental y Occidental, se había estabilizado.

En estas áreas, las fuerzas croatas se enfrentaron a las milicias serbias que defendían sus propios hogares y familias de las fuerzas croatas que, según creían, estaban decididas, como los Ustasha del pasado, a aniquilarlos. Para esos reclutas y voluntarios serbios, su patria principal eran las regiones en las que crecieron. En un sentido más amplio, consideraban a Yugoslavia y no a Croacia como su patria; y, a medida que las partes no serbias de Yugoslavia se estaban separando, Yugoslavia pasó a significar simplemente las tierras pobladas por serbios de la antigua Yugoslavia. Al defender su patria principal, muchos serbios de Krajina creían que también estaban defendiendo su patria más amplia de las tierras serbias de la ex Yugoslavia.

Fuera de las áreas controladas por los serbios, el ejército federal yugoslavo se enfrentaba a los reclutas y voluntarios croatas que creían igualmente firmemente que estaban defendiendo sus propios hogares y familias de un ejército extranjero brutal. Sin embargo, la patria que defendían era Croacia, como hogar de todos los croatas, incluidos posiblemente los patriotas croatas de fe ortodoxa o de origen serbio. De acuerdo con la ideología nacional croata oficial generalmente aceptada, los serbios que no aceptan a Croacia como su patria simplemente no tienen lugar en Croacia. Los serbios insurgentes fueron así considerados como instrumentos del enemigo ^ del gobierno de Belgrado que intentaba subyugar a Croacia ya los croatas a su dominio. Cada uno de los dos puntos de vista presentó el conflicto como una defensa de la patria de uno del dominio extranjero y el derecho de uno a vivir en la patria propia;

Para los reclutas y oficiales del ejército federal yugoslavo, los serbios de Serbia y de otras nacionalidades, no se trataba de una competencia por un territorio al que pudieran llamar su patria en el mismo sentido; no estaban defendiendo sus hogares o las regiones en las que crecieron. La vieja visión partisana de Yugoslavia como patria común de todas sus naciones, que, hasta 1991, presentaba al ejército federal yugoslavo como el defensor de Yugoslavia, no podía justificar el papel del ejército en esta guerra. El alto mando del ejército yugoslavo se dio cuenta tardíamente de esto y eliminó, en las últimas etapas de la guerra, la insignia de la estrella roja del ejército partisano y la reemplazó con una bandera tricolor yugoslava. La eliminación de la estrella roja simbolizó el final de la visión pan-yugoslava partisana como la ideología de liberación nacional de los eslavos del sur. De hecho, muchos miembros del ejército yugoslavo no tenían una concepción ideológica o patriótica clara de su papel en Croacia: muchos no veían el conflicto como una defensa de las tierras serbias de la antigua Yugoslavia. Esto podría explicar, al menos en parte, la deserción generalizada y la moral relativamente baja en muchas de sus unidades desplegadas en Croacia.

El enfrentamiento alcanzado en noviembre de 1991 probablemente se debió, al menos en cierta medida, a los problemas de moral de ambos lados. Debido a la resistencia al llamado y la baja moral de sus unidades de reclutas, el ejército yugoslavo no tenía suficientes efectivos para enfrentarse a las fuerzas croatas fuera de las áreas colonizadas por los serbios. Los voluntarios y reclutas croatas, aunque comprometidos con la defensa de sus hogares y su patria, en 1991 (todavía) no eran una fuerza capaz de enfrentarse a los defensores serbios de sus hogares en su patria, respaldados por el ejército yugoslavo y su armamento pesado. Al darse cuenta de que, por el momento, no puede conquistar estas áreas, el gobierno croata se movió para consolidar sus ganancias y eliminar, como el gobierno esloveno, los restos del ejército federal yugoslavo de Croacia. Al no poder asegurar esto a través de la CE, el gobierno croata aceptó el plan negociado por la ONU para el cese de hostilidades (ver más abajo). El alto mando del ejército yugoslavo, tras sacar a su personal de las zonas controladas por los croatas y asegurar las fronteras de la República de la Krajina serbia, podía declarar cumplidos sus objetivos; esto le permitiría retirar sus unidades de reclutas y dejar parte de su armamento, así como a sus oficiales, al mando de las milicias serbias de Krajina.



A diferencia de la guerra en Eslovenia, la segunda fase de la guerra en Croacia resultó en la muerte de más de 10 000 militares y civiles croatas, en muchos más heridos y en la destrucción a gran escala de pueblos y aldeas. Muchas regiones fueron limpiadas de sus habitantes serbios o croatas (así como de sus minorías, como los ucranianos), lo que convirtió a cientos de miles de personas en refugiados. Sin embargo, a pesar de no poder conquistar las áreas controladas por los serbios, el gobierno croata podía proclamarse vencedor en lo que denominó "La Guerra de la Patria". La guerra, en su segunda fase, terminó con la amenaza del ejército federal yugoslavo al gobierno croata (al ser reemplazado por las fuerzas de la ONU en la Krajina serbia) y contribuyó, principalmente como foco de una campaña de relaciones públicas, a la obtención del reconocimiento internacional de la independencia de Croacia. Como en el caso esloveno, en retrospectiva parece que ambos objetivos podrían haberse logrado eventualmente sin entrar en guerra con el ejército federal yugoslavo. Pero, como en Eslovenia, la guerra desplazó el foco de la lealtad nacional croata exclusivamente al estado croata: la guerra parece haber demostrado lo que el presidente croata, Dr. Tudjman, había argumentado en sus días de disidencia, que solo el estado croata y sus fuerzas armadas podrían garantizar la paz y la libertad a los croatas frente a un enemigo, los serbios, tanto dentro como fuera de Croacia.

Si bien la impopularidad de esta guerra en Serbia erosionó el apoyo electoral para el gobierno de Milo šievi ć , le permitió dejar de lado y despedir a muchos oficiales del ejército yugoslavo, de cualquier nacionalidad, que se oponían al compromiso del ejército en Croacia. La guerra en Croacia ayudó así a transformar el ejército yugoslavo, originalmente una fuerza multinacional, en una fuerza serbia cada vez más bajo el control del gobierno de Milo šievi ć .

Una patria destruida: el fin de la Krajina serbia

En una operación de 48 horas, a partir del 1 de mayo de 1995, el ejército croata conquistó toda Eslavonia occidental (UNPA - Sector Oeste). A pesar de la concentración de más de 15 000 tropas croatas, los defensores serbios (superados en número por tres a uno) parecieron ser tomados por sorpresa y ofrecieron solo una resistencia esporádica. Las fuerzas de la ONU fueron apartadas y un número desconocido de civiles serbios murieron. Sin embargo, el gobierno croata tenía buenas razones para creer que Milo šievi ć , en sus esfuerzos por obtener el levantamiento de las sanciones de la ONU contra Yugoslavia, rechazaría cualquier ayuda a las fuerzas serbias de Krajina. En desafío a Milo š esievi ćCon su política, el líder serbio de Krajina, Babice, ordenó el lanzamiento de varios misiles tierra-tierra no guiados sobre Zagreb y sus fuerzas bombardearon varias localidades de Croacia al alcance de su artillería. Su acción provocó una dura reprimenda por parte del gobierno estadounidense que, sin embargo, no condenó ni el ataque del ejército croata ni la expulsión de casi la totalidad de la población serbia de Eslavonia occidental (alrededor de 15 000) a Bosnia y Serbia.

De hecho, esta operación parece haber sido un ensayo general para una serie de operaciones mucho mayores que el ejército croata lanzó en agosto y septiembre en la región de Krajina y el oeste de Bosnia. Sus operaciones en Bosnia formaban parte del plan estadounidense de pacificación de Bosnia-Herzegovina y la imposición del plan del grupo de contacto para la partición de la república en las 'entidades' bosnias musulmanas/croatas y serbias. Sin embargo, en julio de 1995, el ejército croata ya había entrado en el suroeste de Bosnia y conquistado el área de Grahovo-Glamoci, quemando las aldeas y obligando a huir a toda su población serbia. Habiendo asegurado así un acceso suroeste mucho menos defendido a Krajina, estaba listo para comenzar su asalto final a la región.

La operación "Tormenta" del ejército croata, planificada y ejecutada con la ayuda de oficiales estadounidenses, se lanzó el 4 de agosto de 1995, con 150 - 70 000 soldados apoyados por vehículos blindados y artillería pesada, así como ataques aéreos de la OTAN contra los centros de comunicaciones serbios en el Krajina serbia. Al igual que en la operación de mayo, las fuerzas croatas, que superaban con creces en número a los defensores, hicieron a un lado a las fuerzas de la ONU y completaron la operación en cuatro días. En esta operación, Milo š esievi ćEl gobierno de Krajina restringió severamente los intentos de las fuerzas serbias de Krajina de tomar represalias o resistir: unas semanas antes del ataque, reemplazó a los altos comandantes serbios de Krajina con oficiales confiables de Serbia y emitió órdenes selladas a los comandantes de las unidades para retirar sus unidades y evacuar a los serbios. población en rutas preestablecidas a Bosnia y Serbia. Como temían los líderes serbios de Krajina desde diciembre de 1992, Milo š ievi ć abandonó su causa de independencia de Croacia; a cambio de su cooperación en la conquista croata de Krajina y, más tarde, con la ofensiva apoyada por la OTAN en Bosnia, Estados Unidos apoyó el levantamiento parcial de las sanciones de la ONU contra Yugoslavia en diciembre de 1995.

En pocos días, entre 150 y 200 000 serbios, casi la totalidad de la población serbia, se habían retirado de las ciudades y pueblos bajo el intenso bombardeo croata, primero a Bosnia y luego a Serbia. Algunos de los serbios restantes, en su mayoría ancianos, fueron víctimas de la política de "tierra arrasada", que implicó el saqueo y el incendio de las aldeas abandonadas. Como resultado, la imagen mediática dominante de los serbios como agresores brutales favorecidos por el gobierno croata fue reemplazada muy brevemente en las pantallas de televisión por la imagen de los refugiados serbios de Krajina como víctimas del ejército croata; los medios de comunicación occidentales difícilmente podrían haber dejado de registrar la mayor operación individual de expulsión forzada de civiles en el conflicto yugoslavo hasta la fecha, llevada a cabo esta vez con el apoyo de Estados Unidos y sin la oposición de sus aliados europeos. Esta operación de cuatro días hizo realidad por primera vez el sueño nacionalista del siglo XIX de una Croacia independiente y pura. Como la mayoría de sus habitantes serbios de otras áreas ya se habían ido, Croacia pronto alcanzaría un nivel poco común de pureza nacional, comparable en esta parte del mundo solo con Eslovenia: en 1998, cuando la última área de UNPA, Eslavonia Oriental, fue transferida a Croacia, Croacia tenía el 94 por ciento de su población declarada croata.

martes, 7 de junio de 2022

Guerra Mexicano-Estadounidense de 1845: La batalla de San Jacinto

La batalla de San Jacinto - La locura de Santa Anna

Weapons and Warfare


 


La batalla de San Jacinto-1895 pintura de Henry Arthur McArdle (1836-1908)

 

La provincia mexicana de Texas, 1836

En 1835, Santa Anna, uno de los generales que habían liderado al pueblo mexicano para expulsar a los españoles, fue elegido presidente y casi inmediatamente abolió la constitución, convirtiéndose en dictador. Al igual que sus vecinos del norte, muchos mexicanos estaban muy convencidos de su libertad y constitución. Dentro de un año, el dictador Santa Anna Pérez de Lebrón reaccionó a la primera resistencia a su gobierno ya la abolición de la constitución dirigiendo un ejército a la anteriormente próspera provincia de Zacatecas. Fue un ejército que quemó, saqueó y violó a lo largo de la tierra hasta que la provincia quedó devastada y prácticamente despoblada.Santa Anna se aseguró entonces de que su frase “Si ejecutas a tus enemigos, te ahorras el trabajo de tener que perdonarlos” fuera conocido por todos en México. Era una advertencia severa,

Ahora, si había una parte de todo México que todavía estaba dispuesta a rebelarse contra Santa Anna, era Texas. Estaba lejos de los centros de poder del dictador, y dos tercios de los treinta ciudadanos mil que vivían en lo que entonces era la provincia mexicana de Texas eran inmigrantes de los Estados Unidos. El resto eran familias mexicanas establecidas con un espíritu independiente u hombres que habían huido allí cuando Santa Anna tomó el poder. La abolición de la constitución enfureció a la mayoría de los mexicanos ya los “texicanos” más que a la mayoría. Muchos de los hombres y oficiales que lucharon contra Santa Anna, desde El Álamo hasta San Jacinto, eran descendientes de mexicanos y muchos arriesgaron tierras que habían pertenecido a sus familias durante generaciones.Para 1836, las cosas habían llegado a un punto crítico y comenzaron una revuelta en Texas, con unos pocos cientos de hombres mal organizados que expulsaron fácilmente a las guarniciones locales. Hasta ahora todo esto se estaba haciendo en nombre de la constitución abolida. Pero la revolución era la revolución y, habiendo liderado con éxito contra los españoles que liberaron a todo México solo unos años antes, Santa Anna sabía que no podía permitir que comenzara otra revuelta, incluso en la distante y relativamente pobre provincia de Texas.

La población de Texas era sólo una pequeña fracción de la de México; el propio ejército mexicano era casi tan grande como la población total de la provincia lejana. Santa Anna había vencido al ejército francés y reprimido revoluciones mucho más grandes, por lo que le tomó varios errores en Texas para perder tanto la batalla como la guerra. Que perdiera es más sorprendente, ya que Santa Anna estaba liderando a veteranos probados en la batalla contra hombres que no tenían más que unos pocos meses para entrenar juntos, y eran mucho más independientes y difíciles de liderar de lo que deberían ser los buenos soldados. . Entonces, como los tejanos señalan con tanto orgullo, ¿cómo ganó Texas su independencia en lugar de terminar en el páramo en el que se había convertido Zacatecas?

Santa Anna había sido llamado el Napoleón de México, y rápidamente tomó el nombre en serio. Estaba confiado, o, como veremos, demasiado confiado, frente a cualquier “chusma” en la escasamente poblada Texas. Aun así, hubo que traer contra Texas un ejército de seis mil de sus mejores tropas, la mayoría de las cuales hubo en la devastación de Zacatecas el año anterior. Las declaraciones públicas aseguraron a todos en la Ciudad de México que Texas correría la misma suerte que Zacatecas, y que todos los ex ciudadanos de los Estados Unidos serían asesinados o expulsados ​​de esa provincia de forma permanente. Al igual que Napoleón, Santa Anna sintió que la maniobra era una parte muy importante de la guerra.Así que dirigió cuidadosamente cada marcha y las rutas de cada columna en su ejército. A diferencia de Napoleón, el dictador mexicano se interesó poco en abastecer a su ejército. Decidido a sofocar la revuelta antes de que pudiera organizarse una oposición efectiva, el dictador seguramente a su ejército que avanzara hacia el norte a marchas forzadas. Siendo invierno, el viaje pronto pasó factura, y más se pareció a la retirada de Moscú que al comienzo de una nueva campaña. Cuando el ejército se aproximó al Río Grande, sólo se quedaron unos cuatro mil efectivos. Dos mil hombres habían caído de cansancio, se habían enfermado o simplemente habían desertado durante la dura marcha desde la capital hasta el Río Grande.Estas tropas restantes se reforzaron a un poco más que el ejército de seis mil hombres con el que Santa Anna había comenzado al agregarles a los sobrevivientes de las guarniciones de Texas. Esto significaba que había un soldado mexicano por cada cinco hombres, mujeres y niños en todo Texas. Nadie, ni siquiera los que querrían,

La primera oposición se produjo el 23 de febrero en la misión abandonada cerca de San Antonio de Bexar, conocida como El Álamo. Al igual que con Zacatecas, Santa Anna rápidamente hizo saber que no tomaría prisioneros. Los defensores lucharon con valor desesperado, pero el 6 de marzo no pudieron sostener la gran longitud de los muros y finalmente fueron abrumados. Es posible que los que sobrevivieron al asalto hayan sido ejecutados; la evidencia es mixta. Pero el resultado final fue que ningún defensor sobrevivió.



Unas semanas más tarde, una fuerza mixta de caballería y artillería a caballo capturó a la mayor fuerza individual de rebeldes al mando del coronel Fannin cerca de Goliad. Atrapados en campo abierto, los tejanos formaron una posición defensiva y rechazaron los primeros ataques de los jinetes. Luego, la artillería a caballo se desarme y comenzó a castigarlos con perdigones y metralla, paquetes de cientos de balas de mosquete disparadas desde el cañón como una escopeta gigante. Al ver que su posición era indefendible, Fannin negoció una rendición. Sus hombres tendrían las armas a cambio de poder regresar a sus hogares y la promesa de no volver a levantarse en armas contra Santa Anna. Aceptados estos términos, los tejanos se rindieron.En este punto, Santa Anna descarta que todos ejecutaron. Los oficiales que aceptaron la rendición protestaron y fueron despedidos. El 27 de marzo,

Después de haber destruido tanto la fortaleza única ocupada por los tejanos como su mayor fuerza individual, parece que Santa Anna se quedó que la revuelta había terminado. Sam Houston estaba tratando desesperadamente de organizar lo que quedaba de la resistencia, pero esta fuerza de menos de mil hombres (en su apogeo) estaba siendo forzada constantemente al norte lejos de los centros de población y sus familias. Así que Santa Anna dividió su fuerza en una serie de "columnas voladoras", lo que en su mayoría significaba que eran lo suficientemente pequeñas como para marchar con bastante rapidez y vivir de la tierra. Estas columnas comenzaron a recrear en Texas las atrocidades de Zacatecas. Podrías seguir su movimiento por el humo de las casas y pueblos que quemaron.

Liderando la columna más grande, alrededor de mil soldados, Santa Anna persiguió y finalmente expulsó al gobierno rebelde por completo de Texas (en un barco). Continuó moviéndose en la dirección general de Sam Houston, más preocupado por expulsar a los ex ciudadanos estadounidenses de Texas y quemar todos los edificios que encontrara que por librar una batalla contra un enemigo ya derrotado.

Este exceso de confianza, y el agotamiento general por una larga marcha y meses de campaña, llevaron a una relajación de los procedimientos que el verdadero Napoleón nunca habría tolerado. Los piquetes y los exploradores se usaban solo ocasionalmente, y las órdenes a menudo se enviaban mediante mensajeros sin escolta.

Los exploradores de Sam Houston capturaron a un mensajero que se dirigía al campamento del dictador. El mensaje le decía dos cosas. Una era que la columna que encabezaba Santa Anna estaba mucho más cerca de lo que había pensado, a menos de un día de marcha. La segunda era que en menos de una semana se reforzaría fuertemente la columna mexicana. Con sus propios hombres más que inquietos y algunos listos para amotinarse debido a la inacción, Houston sabía que finalmente era hora de actuar. Ya había dejado de correr y marchaba más cerca de Santa Anna. Al ver que las semanas de retirada habían terminado, el espíritu del ejército texicano se levantó mientras marchaban para encontrarse con los hombres que estaban quemando sus casas y pueblos. Cuando se dieron cuenta de que la batalla era inminente, vitorearon.

Desconocido para Houston, los refuerzos mexicanos habían llegado antes de lo esperado. Sam Houston tenía como máximo ochocientos hombres listos para luchar, y las llegadas adicionales significaban que Santa Anna tenía bajo su mando a más de mil quinientos soldados experimentados, incluidos lanceros montados y varios cañones. Esto le dio a Santa Anna, ya convenció de que simplemente estaba completando una limpieza después de sus victorias en El Álamo y Goliad, una falsa sensación de confianza. Su ejército era casi dos veces más grande que el de Houston y estaba en una buena posición defendible. Sus hombres eran profesionales, y había oído hablar de la disensión que habían engendrado las constantes órdenes de retirada de Houston.Los tejanos nunca se atreverían a atacar, y todo lo que tenía que hacer era esperar hasta las deserciones, ya un problema texicano, y la frustración eliminó la oposición para él. Aunque sabía que los tejanos estaban cerca, la confianza del dictador era tal que seguramente a su ejército que se retirara por la tarde, descansando en el campamento en lugar de preparación para la batalla. Se unió a sus oficiales bebiendo champán bajo la sombra de un gran árbol en el centro del campamento y pronto todos, excepto unos pocos guardias, estaban disfrutando de su siesta.

Cuando Houston formó su ejército para el ataque, contaba con 793 hombres. Todos estaban listos para una lucha largamente esperada, pero pocos habían estado realmente en una batalla. El potencial de desastre era grande, pero la oportunidad de derrotar y capturar a Santa Anna era una oportunidad demasiado grande para dejarla pasar. Esta fue probablemente la última y única oportunidad de victoria de Houston. El comandante tejano entendió que si mantenía alejados a sus hombres de la batalla por mucho más tiempo, seguramente se amotinarían o simplemente desertarían. Así que se tomó la decisión de atacar, y pronto la doble fila de tejanos esperaba detrás de una loma que los ocultaba del campamento del ejército mexicano. A la señal de Houston, avanzaron en silencio.

A medida que los hombres avanzaban hacia el campamento mexicano, todos esperaban ser vistos y esperaban poder obtener la ventaja relativa de la cima de la cresta antes de tener que enfrentarse a los habituales mexicanos. Sorprendentemente, se acercó a la cresta y no pasó nada. Nadie, especialmente Sam Houston, podía creer su suerte. Cuando finalmente avistaron el campamento, estaba apenas a doscientos metros de distancia y aún no se había dado la alarma. Finalmente, cuando toda la doble línea de tejanos apareció a la vista, se dispararon algunas balas de cañón contra la línea que se aproximaba, navegando con seguridad sobre su cabeza pero alertando a los soldados mexicanos de que algo estaba sucediendo.Unos cuantos disparos de mosquete resonaron desde el campamento y los tambores redoblaron mientras los hombres luchaban por despertarse y formar unidades.

En este punto, un pequeño grupo de hombres que Houston había enviado para controlar se unió a la batalla y gritó que la única línea de retirada de los texanos, el puente Vince, estaba caído. Todos los tejanos ahora sabían que era sin duda la victoria o la muerte, en el sentido más literal. Santa Anna nunca tomó prisioneros y no había forma de escapar. Justo cuando se elevó este grito, el ejército estaba a solo ochenta yardas del borde del campamento mexicano lleno de confusión, el coronel Sidney Sherman gritó: "Recuerden el Álamo y Goliad". Era a la vez una advertencia y un grito de guerra. Se repitió “Remember the Alamo” y luego lo rugió en español mientras los texanos que avanzaban abrían fuego desde unos pocos metros de donde los oficiales de Santa Anna luchaban por poner orden en un ejército ahora aterrorizado. El fuego irritante (la mayoría de los tejanos eran hombres de la frontera, tantos tiros en el blanco) quebró la moral de los hombres desorganizados. La resistencia se detuvo excepto en focos aislados, y la mayoría de los soldados mexicanos corrieron o intentaron rendirse. Estos eran los mismos soldados que habían saqueado y violado en Texas durante los tres meses anteriores, y las unidades que habían tomado El Álamo, sin dejar a nadie con vida. Se aceptaron pocas rendiciones y el pánico se hizo cargo, los oficiales y hombres de Santa Anna huyeron para salvar sus vidas.

La batalla resultó menos de veinte minutos. La venganza se prolongó durante más de una hora mientras los tejanos perseguían y mataban a los restos de la columna. Los fusileros dispararon contra las multitudes que se arremolinaban y su pequeña unidad de caballería estaba en todas partes, acuchillando a los soldados que huían y asegurándose de que nadie pudiera reformarse y ofrecer resistencia. No fue hasta algunas horas después de que Sam Houston volvió a tener el control de su ejército y se tomó algunos prisioneros. Pero estaba preocupado. Si bien habían roto la columna, esto era menos de la cuarta parte del ejército total de Santa Anna, y el dictador había escapado.Gracias al exceso de confianza de Santa Anna, Houston obtuvo una victoria, pero la guerra estaba lejos de ganarse.

Al día siguiente, entre unos pocos prisioneros rezagados traídos para unirse a los que ya estaban bajo custodia, estaba un hombre polvoriento y sucio con una camisa rota que, si alguien se había molestado en mirar de cerca, era de mucha mejor calidad que la de los soldados rasos. No fue hasta que sus propios hombres comenzaron a saludar y murmurar su nombre que los tejanos se dieron cuenta de que este prisionero era el mismo Santa Anna Pérez de Lebron. Más tarde se descubrió que la camisa manchada y sucia en realidad estaba unida con tachuelas de diamantes. Rápidamente llevado ante Sam Houston, quien sufría de un tobillo destrozado en el ataque inicial, el dictador comenzó a negociar por su vida y libertad. Muchos de los tejanos, todavía deseosos de venganza por El Álamo y Goliad, querían colgar a Santa Anna allí mismo. Pero Houston lo mantuvo prisionero hasta un mes después, cuando se firmó un tratado y Texas se convirtió en una nación. El trato era que Santa Anna podría quedar libre si dejaba ir a Texas. Estuvo de acuerdo y regresó a la Ciudad de México. Después de eso ya nadie lo llamó el Napoleón de México.

Texas era una frontera escasamente habitada y el ejército mexicano era casi tan grande como la población de la antigua provincia. El año anterior, una provincia mucho más poblada se había convertido fácilmente en un páramo. Además, Santa Anna estaba liderando a veteranos probados en la batalla contra hombres que no tenían más que unos pocos meses, en el mejor de los casos, para entrenar y trabajar juntos. Entonces, ¿cómo ganó Texas su independencia en lugar de terminar en el páramo en el que se había convertido la otra provincia rebelde? Hay una razón simple para esta derrota que formó una nación: el exceso de confianza de Santa Anna condujo a la dispersión de las fuerzas y una respuesta demasiado dura que reunió a la oposición. Sus verdaderos fracasos fueron no mantener la seguridad local alrededor de su campamento o incluso molestarse en localizar al enemigo. Todo se redujo a una confianza fuera de lugar y una gran subestimación de los texicanos.

La guerra mexicano-estadounidense de John Tiller